La semicúpula abandonada

Me encontraba en una alta montaña, donde tiempo atrás parecía haber existido un antiguo pueblo griego, por los restos de esculturas.

Paseé un buen rato,saltando obstáculos,y me detuve en el interior de lo que parecía ser una cúpula,de suelo circular,lleno de jeroglíficos que llamaron mucho mi atención.
El viento soplaba con fuerza en aquel lugar,y mi melena se agitaba irregularmente a su son.

Sabía donde se encontraba ella pero no había tenido suficiente valor para hablar con ella, pero cuando lo conseguí fui a aquellas ruinas griegas. Siempre me gustó más el renacimiento. Prefiero a Miguel Ángel antes que Fidias. -dije sentándome en un trozo de la base de una antigua escultura.

-E leído y visto varios libros sobre esta cultura, y debo decir que me encantan. Se para que fue construida esta especie de cúpula-dije alzando un poco ambos brazos e invocando mas viento aún rodeando únicamente la cúpula.

La estructura estaba muy destrozada,pero aún podía hacer alguno de sus usos.

Lo que parecían ser gruesas columnas,empezaron a dividirse en decenas de tablas de piedra maciza,y empezaron a girar alrededor de nosotros,encajadas en la cúpula.

-Era usado por los elementales de aire para combatir o entrenar.-acababa de encerrarnos a los dos a mi voluntad, pudiéramos salir o no. No le había mirado en ningun momento,y tenía los ojos cerrados,concentrada en mi elemento mientras la luz pasaba muy de vez en cuando con el movimiento de las tablas.

Ahí me había pillado. Conocía todo acerca de la civilización y del arte antiguo (Grecia y Roma) pero solo lo referido a lo meramente humano. En esta época no se estudiaba esa época como en la que yo nací, solo bastaba decir con que el latín se continuaba empleando en aquellos tiempos. Miré con asombro como aquellas tablas volaban sobre nuestras cabezas y confiaba en mis reflejos para evitar cualquier imprevisto. En cambio veía bastante confiada a Kaede.

Ese día estaba bastante inestable,pero desde que había sentido a Ian,había puesto todo mi esfuerzo en que no lo notara.

Empezaron a caer unas pocas gotas de lluvia, hasta que empezaron a ser mas aún, e incrementé la velocidad de las tablas de piedra.


-Quieres hablar-dije todavía de espaldas a él.

Cerré los ojos notando como las gotas caían por mi cara. Las tablas seguian volando y no podía dejar de estar pendiente por si acaso había que esquivar.

Cuando no estés ocupada -dije abriendo los ojos.

Bajé las tablas, dejándolas de nuevo en su sitio,y mas calmada me di la vuelta y me acerqué a el.

Pude respirar tranquilo al ver las tablas en su sitio.
Creo que te debo una explicación, de todo.

-Fue en gran parte mi culpa, no eres extraño,aveces pasa eso..no era tu intención, y lo entiendo perfectamente Ian-dije mirándole seria a los ojos.

Noté esa especie de muro que ella había alzado entre sí misma y yo, impidiéndome llegar hasta ella.
No Kaede, necesito explicártelo. -dije bajando la cabeza.

-Ian..te escucho,y escucharé siempre que lo necesites, que..que es lo que pasa..?-dije semi dudosa, pues tal vez sabía la respuesta.


Mi larga melena oscura se adhería ami piel y ropa,y empezaba a sentir aún mas frío el viento mientras observaba a Ian.

Suspiré, no sabía por donde empezar. A ver como te explico esto. -dije y esperé unos segundos. Te quiero Kaede, me llamastes la atención desde la primera vez que te vi pero he estado intentando engañarme. Por otro lado está Sakura... pero no, con ella no puedo seguir así. Pero es que no lo se... -dije cerrando los ojos. Me gusta estar contigo aunque no pase nada entre nosotros no quiero que te alejes de mi... -dije sin atreverme a abrir los ojos. En cuano los abrí me miré a las manos para no mirarla a ella a la cara. Observé que mis manos empezaban a poblarse de pelo y noté como mi boca se alargaba poco a poco como siempre que pasaba cuando perdía el control de mis sentimientos.

Me quedé paralizada,mientras la lluvia se precipitaba sobre mi, y sin saber por qué, empezaron a brotarme lágrimas de los ojos.

En cuanto vi como se empezaba atransformar,me acerqué a el abrazandole con fuerza,y cerrando los ojos con algo de miedo,mientras le apretaba contra mi con fuerza.

-Ian..no te marches, no ahora.

Me sorprendió mucho su actitud y noté como el hocico volvía poco a poco a ser una boca con sus dientes y muelas. Correspondí a su abrazo torpemente ya que seguía sin salir de mi asombro. No-No me marcharé -susurré.

Me había quedado totalmente en blanco.No sabía que hacer, pero era cierto que en las ultimas semanas algo dentro de mí había crecido por Ian.

-Yo...ahora no podemos Ian, y menos estando Sakura, no podemos..-dije con la cabeza gacha.

La mandé hace unos días una carta diciendo que no podía seguir con ello, pero no ha contestado así que supongo que no habrá vuelto, como siempre... -dije pensando que en estos últimos meses había pasado muchísimo más tiempo con Kaede que con Sakura, y esto solo había provocado que el amor que profesaba a la maga hubiese disminuido, y el cariño hacia la caída fue aumentando hasta puntos insospechados. Lo único que quiero es que no te alejes de mi, por lo que más quieras en este mundo, no lo hagas. -dije fundiéndo el agua que caía de las nubes con la sal de mis lágrimas. Últimamente estaba mucho más sensible de lo normal, provocando ciertos cambios en mis transformaciones.

Le abracé ahora con mas suavidad, y le consolé en silencio mientras acariciaba con cuidado su cabeza, y miraba el cielo entristecida.

-No me marcharé Ian..de eso puedes estar seguro..-dije susurrándole.

No sabía que quería decir todas sus acciones pero me sentía feliz por estar cerca suyo. No dije nada para no cagarla.

Creé ahora yo una pequeña cúpula de aire que no tocaba el suelo,y nos cubría de la lluvia, mientras permanecíamos callados y abrazados.

-Gracias..por haberme cuidado tan bien todo este tiempo Ian-dije mientras seguía abrazada a él.

No me las des, no me las merezco. Te han pasado más cosas de las que me habría gustado. -dije mientras pensaba en la promesa que le hice a Haruka, pero aún así si la cuidaba, era por mi.

Ian, no deberías sentir nada por alguien como yo-aun que no se veía mi cara,se había vuelto totalmente inexpresiva.-No puedo sentir eso que llamáis amor, no de esa forma, y desde hace demasiado tiempo-dije mientras recordaba la muerte de Yukimaru.

Tarde o temprano podrás. Pero no puedo evitarlo Kaede, va más allá de mi control. -Sus sentimientos habían cambiado de repente y pude olerlo con claridad, aunque evité sacar el tema.

Cada vez me enrojecía mas, y dentro de mi empezaba a sentirme inestable,el corazón se había acelerado y no me había dado cuenta, asi que perdí la concentración en la cúpula de aire que había creado y la lluvia empezó a mojarnos de nuevo.

Mis brazos se apoyaron en el ahora con mas suavidad, y seguía abrazandole.

Estaba haciendo un esfuerzo enorme por mantenerme humano, algo había cambiado en mi. El agua empezó a caer encima nuestra y no pude oler nada en ella ya que los sentimientos ocultaban esa faceta. No sabía si debía decir algo más o no, así que preferí callarme y disfrutar de su abrazo.

Lo que le había dicho era cierto, no había vuelto a amar a nadie desde que Yukimaru murió,pero siempre que había estado con Ian,había sentido algo en su interior,aun que no podía explicar bien que era.

¿Y si lo estaba estropeando todo?, y ..¿si solo fuera a hacerle daño a Ian?, esos pensamientos pasaron como destellos por mi mente en apenas segundos,y mis brazos empezaron a temblar un poco.

Mas daño no,y menos a él.

Que debía hacer entonces..?

solo se me ocurría esperar para ver que ocurría con Sakura.



-Dentro de dos semanas, iré a tu castillo, para entonces tal vez hayas hablado ya con Sakura,me parece lo mas razonable-el tono de mi voz sonaba apagado,aun que no era mi intención.