Larga espera

Ya no tardaria en llegar, lo habia visto. Por fin una princesa, alguien con poder, y por lo que habia visto con ganas de aprender. Todavia no la conocia, pero si la conocia. Sabia que llegaria en cualquier momento, tambien sabia su nombre, Neliel, sus aspiraciones no eran secretos para mi. Y sin embargo, no la conocia.
A veces maldecia mi ojo, nunca daba el momento exacto, es más, solo me permitia ver algunas de las infinitas variables que podrian tener lugar. Sin embargo, esta vez habia un patrón.
Atravesaria la puerta de la torre en algún momento. Para la espera habia colocado un sillón mirando a la puerta. Me encontraba sentado en él, con la mirada fija en mi libro. Siempre leia el mismo, no habia necesidad de leer ningún otro. En este estaba todo escrito, mejor dicho, todo estaba por escribirse. Y es que sus paginas cambiaban continuamente, mostrando una aparentemente infinita lista de conjuros, desde los más poderosos a los más insignificantes, pasando por alguna receta para pociones. Desde luego no era un libro corriente.
Suspiré y tapé con mi mano mi ojo pálido. "En cualquier momento..."

Un mapa con extrañas insignias que se deslizaban sobre el, desapareció envuelto en unas pequeñas llamas azules.

Había llegado a mi destino, el reino de los brujos,y en concreto, a la zona de los renegados.

En medio de un inmenso bosque de tonos celeste oscuro, se alzaba una inmensa torre de color mas bien oscuro, rodeada por alguna que otra enredadera. Estuve unos segundos observándola,sonriente,como de costumbre.Había oído hablar de él,y estaba segura de que se encontraba en este lugar.

Atravesé la puerta de la torre a paso tranquilo, sin percibir ni un solo alma por aquellos pasillos. Seguía con la sonrisa apacible de siempre,mientras subía las escaleras que bordeaban todo el interior de la torre,hasta que en el último piso, una de las habitaciones llamó mi atención,era la última,y me dirigí a ella.

Abrí el picaporte con lentitud,y una nítida luz me alumbró un poco los ojos.
Frente a mi,un chico joven, con un libro en la mano, parecía estar esperando algo..o a alguien.


Sonreí.

Y al fin la puerta se abrió, no me equivocaba aqui estaba. Ahora podia ver su aura con total claridad.
-Neliel... -Dije invitandola a sentarse en un sillón junto al mio aun sin levantar la vista del libro. Esperaba que toda esta espera no hubiese sido en vano, esperaba que fuese tal y como habia visto. Pero tan a menudo me equivocaba... Pero no, esta vez habia un patrón, no podia fallar.

La suela de mis botas no sonaba tanto como pensaba pese a el eco que se podía crear en aquella sala.


Me acerqué a el,y me senté en el sillón que me ofrecía bastante atenta a la sala,la cual ya había llamado mi atención. Pero no era eso lo que me interesaba ahora.


-Gracias por recibirme de esta manera-dije sonriente.-E escuchado mucho hablar de ti Salem,y e venido aquí en tu busca,entre otras cosas-dije apoyando un brazo en uno de los posabrazos, mientras sonreía mas ampliamente.

-¿Vienes a aprender o solo a charlar? -Pregunté alzando una ceja. Habia dejado de mirar al libro y la miraba a ella. Mis ojos la examinaban.
-Si me buscabas supongo que es porque querias algo de mi, y asumo que no es mi retrato... Entiende que prefiera ir al grano, llevo esperandote casi 12 horas sentado en este sillón... -La clarividencia no era un arte preciso, y mucho menos si solo se poseia un ojo. "Maldito angel." El proposito de esta conversación no era otro que hacerme una idea de su carácter, no cualquiera podria venir aqui y conseguir mi favor.

-Ya sabes de sobra que busco de ti,si no,no hubieras estado esperando esas 12 horas.Lo que busco es obtener mayores conocimientos, y aumentar mi poder,y creo que tu eres el indicado para ello.
Si no es así,creo que estamos perdiendo el tiempo-dije mirándole de frente por primera vez.

Tal y como esperaba, era cierto que habia un patrón, no obstante, si el patrón existia de verdad tendria que prepararme. El final estaba cerca.
-...Muy bien... Tu entrenamiento será intensivo, de aqui a unos meses habrás aprendido todo lo que yo se. Y todo lo que no hayas aprendido podrás aprenderlo por tu cuenta... Pero deberás jurar obedecerme, y no estoy hablando de un juramento a secas... Hablo de un juramento mágicamente vinculante... No podrás romperlo ni aunque quieras, solo quedarás libre de él cuando yo lo diga... ¿Estas dispuesta? -Sabia su respuesta de antemano, pero de momento tenia tiempo más que de sobra para desperdiciar.

Obviamente, todo tenía un precio, o al menos así parecía pensar el.

Sonreí mas cuando acepto tomarme como "aprendiz", y me quede unos instantes pensativa por el acuerdo.



-Te obedeceré tal y como me pides, pero deberás saber que este grado de obediencia dependerá solo de ti-dije con la eterna sonrisa intrigante-tu,y solo tu,serás el que lo haga subir o bajar-dije en tono tranquilo;estaba segura de que eso mas bien le resbalaba,pero no a mi,y no tenía motivos por los que ocultarlo.


Hagamos el juramento entonces-dije levantándome despacio y con la usual sonrisa tranquila.

Sonreí y me levanté. COn una pequeña daga hice un corte en mi muñeca, la sangre brotó y formó un pequeño sello en el aire. La hemorragia paró.
-...Pasa la mano por el sello y formula tú juramento... Recuerda que si lo incumples sufrirás... -Dije ocn voz tranquila.

Pase la mano por el sello y con la sonrisa algo mas tranquila,dije en voz mas alta:

-A partir de este momento,juro servirte como subordinada, Salem Blackroot.

Cerré los ojos tras haber citado el juramento.

El sello comenzó a emitir una luz pálida, acto seguido comenzó a deshacerse y acercarse a la piel de Neliel. Se posó sobre su piel y quedó grabado en su piel, en color negro. Como un recordatorio de lo que acababa de jurar. Si algún dia inclumplia su juramento el sello seria el encargado de atormentarla.
-Bien... Cuando estes lista comenzaremos tu entrenamiento, no acepto réplicas ni quejas... Aprecio la puntualiad y la lealtad... Y detesto que me hagan la pelota...

Observé las partes tatuadas de mi piel, y la energía que me había envuelto durante el sellado se disperso.


-Así lo haré-dice haciendo una reverencia mientras sonreía complacida.Si puede ser posible,me gustaría conocer toda esta zona antes de comenzar con el entrenamiento, señor-dije aún inclinada, y sonriente.

-Muy bien... Cuando quieras continuar tu entrenamiento estaré en el sotano... -Y dicho eso me levanté y me fuí.