Asuntos importantes

Llegamos al castillo en relativamente poco tiempo, posé mis pies en el suelo y fui a la puerta, un guardia nos salió al paso-Buscamos a la Reina Aurora, soy luccie hyuga y este es jozu, tenemos una entrevista con ella-dije haciendo una pequeña reverencia, el guardi se lo dijo al otro y fue a buscarla, esperaba que no tardara mucho.

-Llegué junto a Luccie al reino y nos topamos con unos guardias vi como mi reina hablaba y hizo la reverencia y yo también hice una quería entrar y ver que es lo que había sucedido con Kaede... Ni una palabra salió de mi boca estaba bien serio y preparado para lo que fuera a suceder.

Estaba enterrada bajo el papeleo cuando el guardia me avisó de que los vampiros habían llegado. Aparté los papeles de golpe y bajé rápidamente a recibirlos, suprimiendo mi aura por el camino.
-Bienvenidos- saludé con una inclinación de cabeza. Arqueé las cejas al ver que Luccie había venido también-. Vaya, la reina en persona. Y tú debes de ser Jozu, ¿no es así?

hice una reverencia cuando Aurora vino-Así es, disculpa que haya venido asi con é, aun que no querías que fuera muy obvio pero me parecio un tema del cual realmente tenía que estar aqui-me expliqué con tranquilidad-Asi que si no le importa me gustaría estar aqui, no me entrometere, se lo puedo asegurar-

-Hice una reverencia, contesté a su pregunta y no dije nada mas.
-Si yo soy Jozu, Jozu Yagami encantado de conocerla.

Fruncí ligeramente el ceño pero me encogí de hombros.
-Bueno, mientras los dos ocultéis vuestras auras, no tiene por qué haber ningún problema. Acompañadme, por favor- indiqué. Les llevé a una de las salas aisladas acústicamente que había en el palacio, concretamente a una con una mesa circular en el centro y cuatro sillas. Tomé asiento en una y les indiqué con un gesto que hicieran lo mismo antes de cerrar la puerta.

Off: vamos a darle vida a esto que ana no comenta xD

On: -Nos llevó a una sala que por la apariencia de las paredes se podía ver que era un tipo de sala insonorizada se sentó en una silla y nos ofreció asiento, cogí retire la silla y me senté esperando a ver que era lo que tenía que decir y cual era el motivo... aun que podía sospechar cual era el motivo.

OFF: gomeeen ^^U

Hice otra pequeña reverencia y escondí todo lo que pude mi aura, mientras la segiamos, posiblemente estubiera insonorizada. Me senté en contestacion a su gesto y pregunté tranquilamente-¿De que se trata Aurora?-

Entrelacé los dedos y les miré seriamente.
-Veréis, hace poco se produjo un crimen que involucra a Kaede Hanayuki, a la que creo que ambos conocéis. Según parece, Jozu fue el único que presenció dicho crimen, de modo que su testimonio es crucial para juzgar el caso- expliqué.

Me quedé callada, ahora el que tendria que hablar es el y no yo, "¿pero un crimen?¿Kaede?" era algo para mi imposible de pensar, pero no lo sabia con certeza, ahora solo quedaba observar la situacion.

Esta en lo correcto, no vi exactamente como lo mataba pero por lo que escuche ella no quería hacerlo... era por decisión del ángel caído... el no quería vivir... debido a la sangre no pude hacer nada en aquella situación no los pude ayudar...
-Dije con seriedad.

Escuché con atención y abrí un cajón que había semiescondido debajo de la mesa. Saqué un par de hojas de papel y una pluma y se las pasé a Jozu.
-¿Te importaría escribir lo que viste, por favor? Con el máximo detalle posible- le pedí.

-Si.
-Agarré la pluma acerqué el papel y comencé a redactar.

-Paseaba por la orilla de la playa sin rumbo establecido ni nada que hacer, en ese momento me llego un leve olor a sangre, vi a lo lejos un par de ángeles caídos echados en la arena, uno que era kaede y el otro ángel caído que si no recuerdo mal se llamaba samuel. Samuel tenia una herida bastante grabe y se veía bastante mal, en cambio kaede pude ver que no estaba herida, pero estaba toda manchada de sangre. Mis instintos empezaron a salir estaba por volverme loco tanta olor a sangre y reciente.. estaba por estallar, pero no podía tenia que suprimir ese sentimiento. Me acerqué poco a poco asta llegar a unos arbustos y allí fue cuando escuche su conversación. Samuel decía que llevaba tiempo buscando esta ocasión que se había rendido y kaede le suplicaba y le pedía perdón por lo hecho e intentaba con las manos taponarle la herida o hacer algo para que se le curara pero no pudo, aún así samuel sonreía y le estaba como agradecido asta que se despidió de ella y fue cuando falleció. Yo quería ayudar pero no lo llevo bien con el tema de la sangre así que no pude hacer nada mas que contemplar esa trágica escena.

-Aquí tiene... creo que se lo he dejado bien detallado... y en cualquier caso lo digo con mis propias palabras kaede no lo quería hacer...

Cogí el papel y lo leí detenidamente. Asentí con la cabeza, lo doblé y lo guardé en un bolsillo escondido en mi bota.
-Bien, creo que esto era todo. Puede que te vuelva a llamar, pero intentaré que no sea necesario. Gracias a ambos por haber venido- les dije, levantándome.

-Puedo ver a kaede?-Pregunté antes de levantarme y mirándole a los ojos.

Me levanté con tranquilidad, haciendo una pequeña reverencia, mas cuando o hice, jozu dijo que quería ver a Kaede, era normal, pues yo tambien quería verla, pero ahora mismo estaba prisionera. esperé una respuesta de aurora, aun que me la esperaba de sobra.

-Lo siento, pero eso no va a ser posible. Kaede se encuentra en estado de aislamiento. No obstante, si las cosas van bien deberías poder verla pronto, así que no te preocupes- respondí, suavizando un poco el gesto.

-D-deacuerdo...
-Suspiré-
-Si necesita mi ayuda de nuevo no dude en llamarme, ha sido un placer conocerla...
-Sonreí.

Me pasé suavemente la mano por el pelo, era normal que lo denegara, estando ella en prisión, solo esperaba que pudiera verla pronto-bueno, vayamonos-me incliné hacia Aurora-Gracias por dejarme acompañarle Aurora, ahora nos iremos y esperemos que todo se arregle cuanto antes-me dí la vuelta con un suspiro y cojí a Jozu-ya nos veremos-y rapidamente desaparecimos de allí.

Cuando se marcharon relajé los hombros y moví las alas un poco para desentumecerlas. Me rasqué los lacrimales, cansada. Saqué el testimonio de Jozu y lo releí. "Af, será mejor que dé un paseo para despejarme y pensar en ello" me dije a mí misma. Guardé el papel y me marché.