Tocando bajo las estrellas

-En serio, ¿tú crees?- dije con una sonrisa- yo creo que no nos parecemos tanto, me alegra que Ryu este haciendo amigos.

Parecia que poco a poco mi hijo esta adaptandose.

-Si, al parecer es bastante amigo de Lucia, pasan mucho tiempo juntos creo.

Eso hizo encenderse en mi algo que no me gustaba mucho, pero lo dejé correr

Ese ultimo pensamiento no escapo de mi, a veces odiaba este poder no podía controlar a la gente que pensaba libremente aunque por otro lado era bastante divertido en ocasiones.

El pensamiento de Dean me dejo un par de dudas aunque estaba bastante claro que estaba celoso de mi hijo. De mis labios se escapo cierta sonrisita, no podía evitarlo.

-Eso parece, la verdad es que las pocas veces que he visto a Ryu con alguien siempre ha sido con la pequeña Lucía.

Alcé una ceja ante su risita, pero lo dejé correr.
No quería seguir hablando de aquello, a si que busqué otro tema de conversación.

-Supongo que, al tener un hijo, estará casada-asbía que eso no cambiaba mucho el tema, pero era lo unico que se me ocurria y si que sabía que almenos no volveríamos a hablar de lucia y ryu, de momento.

Era el tema que menos quería tocar en esos momentos. Había pasado 7 años y aún no había podido olvidar aquel dia.
Desvié mi mirada, no quería que nadie me viese así.

-Lo estuve, pero él murió en la guerra que hubo hace 7 años...

"bravo, Dean" me elogié sarcasticamente. Había metido la pata hasta el fondo y me sentía bastante mal por ello.

-Lo.. lamento. Bueno.. de todas formas.. yo creo que la gente no muere del todo mientras siga su recuerdo en nuestra memoria. Siempre quedará algo de él si sigues recordandole-esperaba que aquello la consolase, en verdad... ami me consolaba siempre un poco

Vi en su mente y en sus ojos su culpabilidad, realemente parecia afligido por su metedura de pata. Le puse una mano en su hombro y le dedique una calida sonrisa.

-Tranquilo tu no tenias por que saberlo, ademas aunque el no este tengo a Ryu y se que de alguna manera, Jozu nos cuida a los dos.

Sonreí aun que algo triste. Nunca eran buenas historias aquellas en las que un ser amado perecía. Entonces pensé en Katerina y me entró la angustia... si ella se iba yo.... ¿yo que haría? no imaginaba otra vida que con ella.
Ahora si que era un buen momento para cambiar de tema.

-¿Usted sabe tocar el saxophone?

El ambiente estaba ahora un tanto tenso, aunque intentase que no se sintiera culpable por haber sacado ese tema pero aún así el hablar de Jozu me dolía a día de hoy pero por suerte Dean había cambiado de tema.

-No, saxo no lo se tocar pero si se tocar el piano en cambio, cuando era mortal era de las mejores del pueblo.

Hablar de eso me hizo recordar que llevaba mucho tiempo sin tocar con el piano.

Sonreí ampliamente.

-Valla, ¿enserio? yo también toco el piano. Me encanta ese instrumento... empezaste a tocarlo desde pequeña o ya por la "madurez"

Le devolví la sonrisa con mucho gusto.

-Pues menuda sorpresa no sabía que también tocases el piano, a mi enseñaron a tocarlo cuando tenía 8 años...me enseñó mi tio.

Recorde con mucha nostalgia todo esos momentos de mi vida.

Sonreí, me gustaba conversar sobre esos temas.

-Yo aprendí sobretodo gracias a una anciana que hospedó a mi padre y a mi un tiempo. Despues siempre que tenía oportunidad leía partituras y las memorizaba para si encontraba algun piano, y se me permitía, tocarlas y practicar

El tema se volvía bastante interesane. pensaba que era de las pocas personas que sabían tocar el piano pero mira por donde aquel muchacho tambien sabía tocarlo.

-A mi me enseño mi tio, al principio me costo un poco pero poco a poco conseguia dejarme llevar por la música y despues mis dedos hacían el resto. Con 16 años era la mejor de toda la ciudad hasta participe en unos cuantos recitales que por supuesto conseguí ganar. Pero bueno luego me ocurrió ese accidente y me convirtireron pero por suerte Luccie me deja tocar su piano muy de vez en cuando.

La escuché con atención.
En verdad me alegraba ver que alguien más compartía mi pasión por ese instrumento.

-Es muy generosa Luccie. En mi reino, aun que parezca mentira, tenemos una sala algo insonorizada específica para poder tocar, ya no solo el piano sino cualquier instrumento. Aun que en mi raza... se llevan mucho más los instrumentos de percusión... por lo que también tengo algo de conocimientos sobre ellos, pero no me gustan tanto

El tema era de lo mas interesante, hasta ahora no habia conocido a alguien que le gustase tanto la musica como a mi.

-Vaya si que tiene que ser eso interesante, una sala insonorizada y todo. La verdad es que me pregunto como tiene que ser tu reino nunca he ido y siempre he tenido curiosidad.

Quedé pensativo un rato

-Bueno, es bastante diferente al tuyo... es menos luminoso, es un castillo mucho más clasico de robustas y resistentes piedras. Pero, de todas formas dudo que mi padre estuviera contento de dejarte entrar tranquilamente-dije algo incomodo por la relación tan reacia que tenia mi padre con los vampiros, aun que no había más que esperar, era algo muy logico. Lo raro es que yo no tuviera tanta aversión hacia ellos, supuse que se debía a que era más humano que elr esto de licántropos

-No te preocupes doy por asentado que no soy bien recibida en el reino licantropo, ya sabes mi naturaleza es un gran impedimento ademas no creo que a Andrew le haga mucha gracia verme por allí. El sentimiento es mutuo al fin y al cabo.

era raro pues aunque los licantropos eran nuestros enemigos por naturaleza si que he sido capaz de llevarme bien con alguno de ellos.

-Con Ian sin embargo las cosas son distintas, él es mi mejor amigo- una gran sonrisa se dibujo en mis labios.

Simplemente asentí ante aquel comentario, era perfectamente normal y comprensible.

al halar de Ian me sorprendió un poco, no sabía que le conocía, ni muchisimo menos que se llevara tan bien con él como para llamars emejores amigos. No sabía que Ian simpatizaba con los vampiros... me era algo extraño, curioso... pero al fin y al cabo yo tenía actualmente una relación con una vampiresa.

-Valla... esque Ian se hace mucho de querer, le tengo un gan apreccio. Además, mi padre también se lo tiene, creo que más que mejores amigos son casi como hermanos.

Pude leer todo lo que le extrañaba eso, no le culpaba, hasta a mi me sorprende la buena relación que tenemos yo e Ian...además ultimamente nos vemos muy a menudo y me ha estado ayudando mucho.

-Si la verdad es que seguro que desde fuera parece muy raro pero nos conocemos desde que llegue a este contiente y no se es alguien muy importante para mí, me ha ayudado mucho en todos estos años. Es una gran persona- me tome una pausa- es cierto él y tu padre también estan muy unidos, recuerdo que antes solían irse mucho juntos.

La escuché.

-Ian es así, ayuda incondicionalmente, es una buena persona. Si, incluso despues de tanto tiempo se siguen llevando igual de bien.

Por la mirada que ella me mostraba al hablar de Ian... no sabría como explicarlo pero algo era extraño en esa mirada... Dejé correr aquello, ya que era algo que no me incumbia.

No pude evitar pensar en él mientras hablaba, no se que me pasaba ultimamente pero no podía quitarmelo de mis pensamientos. Me ponía muy nerviosa y casi no podía pensar con claridad. ¿que es lo que me estaba pasando? no tenía ni idea de nada y eso me confundía aún mas.

-Lo siento estaba pensando en mis cosas- me disculpe- dime Dean, ¿hay alguien que ocupe tu corazón?

La observé, parecía haberse puesto nerviosa con el tema... y no solo olía a nerviosismo sino... como a primavera... Podía reconocer claramente ese olor, ese olor era característico de la emoción de un nuevo amor, de esa ilusión incontrolable... pero no quería analizarla, siempre me había parecido de mala educación olfatear más allá de los sentimientos comunes. Eso era algo intimo que tendría que ser reservado para ella... pero en el fondo me alegraba por que eran los sentimientos que emanaba hacia Ian. También olía ahora a confusión, quizas ella no lo supiera aun... reí para mis adentros. No tardaría mucho en darse cuenta de lo que yo ya había olido.
Quizas era ella de ese "algo" que había dicho Ian al preguntarle sobre si tenía alguna relación.

Entonces ella preguntó. Instantáneamente pensé en Katerina... Aquella mujer que, de pronto, había llegado y conquistado más allá de lo que jamás nadie hubiera podido. Mi corazón era joven, pero sabía perfectamente a quien se encomendaba. Era solo pensar en ella y ese olor que devilmente había sentido hace unos segundos en Natasha, lo percibía fuertemente en mi... Suspiré para mis adentros, si que había algien que ocupaba mi corazón, pero era algo que... por desgracia, nadie podía saber... Esto me entristeció, ya que si mi padre se enteraba de lo nuestro... yo... temía lo que pudiera pasar... temía por ella, más que por mí, pues al fin y al cabo yo era su hijo... pero ella solo un vampiro más que, seguramente según él, habría intentado engañarme. Pues una relación entre licantropos y vampiros nunca podria resultar... según él.. claro.

-Yo.. bueno, sí. Hay alguien-dije con simpleza. No quería decir más, bueno, en realidad si, pero no podía y mucho menos a una desconocida. Mis labios tendrian que estar sellados pero deseaba bramar a los cuatro vientos este sentimiento tan fuerte, esta dulzura que ella me hacia sentir, esta calidez que ella me hacía desprender.

Le notaba confuso ...puede que incluso algo nervioso y aunque intentó ocultar un poco lo sentimientos que tenía hacia aquella mujer para mi no escaparon tan facilmente.
"el primer amor....el más dificil de olvidar"

Le mire, la verdad es que para ser un licantropo era bastante majo. Sonreí de medio lado, las actitudes que tenía me recordaban un poco a cuando yo también era joven.

-El primer amor...el que mas te cala hondo y el mas difícil de olvidar- le puse una mano en el hombro- conservalo, es un gran tesoro, no lo dejes escapar.

La miré largamente, extrañado. Parecía como si me mirara pensando algo más... no sabía que pero en su mirada había más conocimiento del que yo le había contado. Llamalo intuición, quizas simplemente paranoia pero... lo dejé pasar pues no quería quedar como un idiota.

-...Si, no lo haré. Eso lo tengo por seguro.-hice una pausa y la sonreí-Creo que ya es hora de irme, si no dentro de poco me convertiré en uno de vosotros de tanto no dormir por la noche sino por el dia.

Era cierto, se estaba haciendo demasiado tarde. Yo tenía que volver al castillo. Ryu me estaría echando mucho de menos.

-Tienes razón, es hora de que volvamos a casa, ha sido un placer conocerte Dean espero que nos volvamos a ver pronto. Hasta luego.

Dicho esto eche a caminar rumbo al castillo.