La nueva reina

Los días de verano llegaban finalmente a su fin,y las brisas de otoño llegaban en silencio junto a los nuevos cambios en la torre de los brujos renegados.
Hacía ya 7 años que el brujo Salem había fallecido y el reino permanecía sin rey,y yo había logrado evadir el cargo el tiempo suficiente para lo que consideraba estar preparada.


Recorría los largos pasillos en silencio,junto al libro de Salem bajo el brazo y unos curiosos tatuajes en el otro.Llevaba un vestido formal y elegante para la ocasión,mezcla de colores fríos y enredaderas blancas. Miré por última vez los grandes ventanales de la torre y vi las primeras gotas de lluvia caer sobre ellas.No era un día demasiado alegre para ser coronada,pero la lluvia me encantaba,y me sentía protegida bajo ella.Dos guardias esperaban en la puerta de la sala principal cuando llegué frente a ella,y la abrieron despacio mientras se inclinaban. Atravesé la sala con paso firme y seguro,haciendo sonar las pisadas con las botas fuertes,y mirada solemne. El lugar estaba lleno de todos los brujos de la torre y exteriores,así como algunas pinturas y pergaminos de los anteriores cargos. Subí las escaleras de madera y piedra,observando el trono que aguardaba en completo silencio junto a la sala. Mis pasos se detuvieron al estar a unos pocos centímetros de distancia de él,y uno de los brujos mas antiguos aguardaba allí para realizar el rito de coronación.
Hice una reverencia de media cintura,y puso sobre mi cabeza una mano llena de sellos en ella.

"Ahora serás tu quien gobierne este reino,tu serás el escudo que proteja la fortaleza,la medicina que revivirá a los moribundos,y la espada que se alce en nombre de todos tus guerreros. Todo esto no lo podrás hacer sola,por eso,a partir de este día,cuentas con todos nosotros para permanecer a tu lado,Neliel. "

De su mano empezaron a brotar los sellos,y llegaron hasta mi frente,que la rodearon y formaron una fina corona de plata y minerales azules. Me levanté despacio,y la corona se fue convirtiendo poco a poco en un tatuaje sobre la piel,que fue desapareciendo.

Que así sea. A partir de este día,el Reino de los Brujos volverá a ser uno solo.
Que el Rey Salem se enorgullezca de nosotros-recé esto último para mi misma besándome los dedos.