Un día sin preocupaciones

Estaba escuchando con atención a Andrew responderme. No me podía creer que se hubiera peleado con un calamar gigante como un kraken. Me parecía bastante impresionante que sólo tuviera una pequeña herida como esa para haberse peleado con uno.

Vaya...tuvo que ser una batalla muy dura ¿verdad? jejejeje

Pregunté retóricamente.
Sin embargo, oí a una chica vociferando no muy lejanamente. Me giré hacia la chica con la que estaba Lucius. Algunas palabras llegaron a mi oído, como que se llamaba Kanna, y "te mataré". No parecía una persona muy amistosa que digamos. Así que avancé un par de pasos, observando la escena. Pero cuando vi el puñetazo, iba a ir hacia ella, pero Andrew se me adelantó. Evidentemente, merecía aquel sermón, pero no podía entender cómo alguien podía rechazar ayuda de esa forma, así que me acerqué lentamente hacia allá, y me coloqué entre Andrew y Lucius, mirando con cierta decepción en mi rostro a Kanna.

Querida...¿por qué le has pegado?¿Qué te ha hecho él? Pregunté con preocupación, aunque con un tono ligeramente sermoneante. No me podía creer lo que había visto

lo que faltaba.

No podia crearme enemigos aunque en estos momentos me gustaria verles a los 3 pudriendose en el infierno.

Puse cara de no habe roto un plato en mi vida y me dirigi a Lucius.

-Lo....lo siento no se que me ha pasado- dije con la cabeza agachada- conocer gente nueva me pone nerviosa.

Malditos idiotas quien os ha mandado meteros donde no os llaman.

- Tranquilzaos, ya me encargo yo -Les dije a Amy y Andrew para intentar tranquilizarlos-. Lo tengo todo bajo control, jeje...

Luego me volví hacia Kanna. Me resultó muy kawaii ver cómo cambiaba y se volvía tan mona.

- A ver, señorita Kanna... ¿Me permitís ahora terminar de examinaros para ver si no habéis sufrido una secuela mayor por el golpe?

Con las manos en los bolsillos, refunfuñe por lo bajo, poneindo cara de enfado. Ami me hacen eso y no responderia de tal manera.
Entonces pude oler los sentimientos de aquella chica, y no...me parecian demasiado buenos, no me concordaban con lo que decia. Realmente no estaba arrepentida

-Como tu quieras-chisté-solo que yo no me fiaria de ella; los angeles sois un tanto extraños...

Asentí ante el ofrecimiento de Lucius.

Es tan atento y amable...más que yo incluso

Me alejé un par de pasos, y me dirigí hacia Andrew, con una mirada de extrañeza. ¿Extraños nosotros? Bueno, es posible, pero tal y como lo dijo...pareceríamos una pandilla de fanáticos.

Probablemente sea mi imaginación

Entonces, le susurré al oído.

La verdad, a mi no me inspira demasiada confianza tampoco. Pero como ángel, tengo un "sexto sentido" que me indica que si insisto, hará cosas buenas. Por supuesto, a veces, por no decir a menudo, erra.

Tras eso giré sobre mi misma, poniéndome frente a Andrew, viendo a Lucius y a KAnna detrás de él.

¿Y tú?¿Cómo sabes que no tienes que fiarte?

Noté como se acercaba a mi oido, y su fresco aliento mezclado con el sonido de su dulce voz. Puse una pequeña mueca antes de que se despegara, por eso no me vio. No creia que lo que dijera fuera cierto, si que se podia cambiar con la persistencia, pero era algo bastante inutil a mi entender, pero claro, esa era mi forma de pensar; no compartia a la suya pero en el fondo, con resignación, la aceptaba. No obstante me alegro saber que hasta ella misma reconocia que en ocasiones eso no solucionaba nada, aun que a mi entender fuera en el mayor de los casos; si te ven debil, serás aun más debil, era algo que yo nunca podia llegar a permitirme.

Vi como se ponia delante mia, de tal manera que tanto el angel como la bruja no vieran mi rostro, entonces ladeando un poco la cabeza, con una media sonrisa pensando: "¿tanto tiempo conmigo y aun no se dio cuenta?"

Entonces solo hice un gesto. Alcé mi dedo indice golpeandome con suavidad la nariz, queriendo dar asi a entender que, al fin y al cabo, tenia en mi sangre la esencia lupina, lo que me hacia tener ciertas caracetristicas de estos hermosos animales. Entre ellas, claramente, un gran olfato, con el cual podia adivinar, sin mucha dificiltad, el estado animico al igual que la mayoria de los sentimientos de casi cualquier ser vivo que me rodease.

Ese perrito me seguía mirando de una manera demasiado sospechosa, me hubiera gustado contesatarle a su grosería, pero eso sería caer en su jueguecito. Preferí ignorarle, al menos por el momento.

Tranquilo a mi tampoco me das confianza.

Luego me giré hacia Lucius y le dedique una amplia sonrisa.

Claro que te dejo seguir examinandome, y de veras siento lo de antes.

Pensandolo mejor, todos ellos eran seres de Luz y podrían ayudarme a encontrar la información que estaba buscando.

Continuo con su examen para ver si tenía algun daño de gravedad. Mirandolo por un lado mas profundo me había pasado 7 pueblos con él, tan sólo quería ayudarme y yo solo fui una borde.

Pero esta en mi naturaleza, los seres de luz no me gustan...aunque por una vez podría hacer una excepción. Tan sólo por una vez.

-¿va todo bien? - pregunté con curiosdidad.

Su respuesta era aceptable. Terminé mi examen y sujeté a Kanna por los hombros para mirarla directamente a los ojos.

- Parece que todo está en orden, señorita Kanna. Pero no os descuidéis -Sonreí, de forma cómplice y tras pasar uno de los brazos por sus hombros, la acerqué hacia los demás-. Os presento a la señorita Kanna. Kanna, la dama se llama Amy y el caballero Andrew.

La liberé para que pudiera saludar si lo deseaba.

La miré de arriba abajo, no me terminaba de combencer, pero bueno.

-Encantado-saludé sin más dilación

OFF Siento la tardanza. Me fui unos días y bueno, pensé que puse un aviso...pero parece que se me olvidó ponerlo, jejejeje. Bueno, espero no haberos hecho esperar demasiado.

ON

Seguía con atenció viendo cómo Lucius terminaba de examinar a la chica, y al poco tiempo, sin que apenas me diera cuenta, nos estaba presentando a ambos. Me incliné levemente al frente, y saludé con alevosía.

Un placer conocerla, señorita Kanna, jejeje Añadí con una sonrisa cordial.