16 años

Ya han pasado 16 años, parece mentira como ha pasado el tiempo. Aun no me puedo creer lo mucho que han cambiado las cosas desde entonces.

Tras la tragedica muerte de Jozu, me quede embarazada y presa del miedo y que la muerte de mi amado era reciente no me quedo otra alternativa que ocultar a mi hijo Ryu en el castillo.

Nadie sabe de su existencia nisiquiera mi reina y su consorte. Aun no puedo creer que le haya echo esto a mi hijo pero por mas que lo intento no puedo sacar de mi mente el momento en el que Jozu recibio el impacto por mi y murio ensangrentado dando su vida por mi.

Le perdi a el y tengo un miedo espantoso a perder tambien a mi pequeño Ryu.

Sabia perfectamente que Ryu se habia escapado del castillo. En cierta parte no le culpo, no podia estar reteniendole ahí para siempre. Al fin y alcabo ya se estaba haciendo mayor...y cada vez se parece mas a su padre.


Esta mañana me habia levantado con muy mal cuerpo, otra vez habia tenido pesadillas con el dia en que Jozu murio.

No pude evitar derramar unas lagrimas mientras miraba distraidamente por la ventana.

Regresé sigilosamente al castillo, tenía miedo de que mi madre me pillara, pero de todas formas lo iba a hacer ya que ya había conocido a Lucía. Era una chica realmente bonita y era la hija de la reina si mal no recuerdo como la nombró ella se llamaba Luccie.
Fui sigiloso por el pasillo muy lentamente, cada paso que daba intentaba hacerlo con el mínimo sigilo y con el mínimo sonido posible hasta llegar así a la puerta del cuarto.
Abrí esta lentamente y miré hacía dentro sin éxito vi a mamá ya despierta y sonreí tontamente para luego entrar y cerrar la puerta.
-Hola.. Mamá.. que haci..
Cuando quise preguntarle por lo que hacía vi su rostro lloroso, me acerqué a ella y me senté al lado pasando mis manos por su rostro retirando sus lágrimas.
De nuevo por el viejo?...

Escuche perfectamente como intentaba torpemente pasar despercibido a la habitacion. No pude evitar soltar una sonrisa nostalgica...me recordaba mucho a él.

-Te he dicho mil veces que no le llames asi- dije suavemente- no es por el, se me ha metido algo en el ojo.

Me seque mis lagrimas y le mire.

-¿Que tal estas cariño?

Perdona es que no se.. Me hace gracia llamarlo así.
La miré de nuevo preocupado pero aun sonriente y le retiré las manos.
Claro se te habrá metido algo en el ojo si lo dices tu será verdad...
Escuché de nuevo lo que me dijo y sonreí algo nervioso sobandome la nuca.
Esto mamá..verás..y-yo
No sabía como decírselo me daba miedo.. Tenía miedo de que me echara la bronca. Suspiré con levedad intentando tranquilizarme y la miré directamente armándome de valor.
Estoy bien.. Pero salí al exterior y conocí a Lucía la hija de la reina y sabe de mi existencia y se lo va a decir a la reina.. Y-yo mamá lo siento no quería meterte en este lío tan solo quería salir al exterior solo..
Agaché la cabeza entristecido esperando su regañina.

En el fondo aquellas palabras no me sorprendieron demasiado al menos en parte...pero si Lucia sabia de la existencia de Ryu era cuestion de tiempo que Luccie supiese de el.

Mi rostro se puso serio, tenia miedo de lo que fuese a pasar ahora. Un escalofrio recorrio todo mi cupero.

Me sente en la cama.

-¿Has hablado con Lucia?...entonces ya Luccie debe de saberlo tambien.

Realmente estaba muy apenada con mi actitud. Estaba muy nerviosa.

-Soy una madre pesima, como he podido hacerte esto. Ryu...siento todo esto, de verdad.

Agache la cabeza apenada.

Asentí ante sus palabras aun mirando el suelo temeroso de lo que me hiciera, poco a poco fui alzando el rostro mirando el de ella y negué con rapidez cogiendo una de sus manos.
Mentira mamá.. Se que lo has hecho todo por mi bien y mi protección. No eres una mala madre en absoluto. No te disculpes pero.. La próxima vez que salga si quieres puedes venir conmigo si? Y me puedes enseñar mas cosas del exterior como la de los libros
Comentó sonriendo ampliamente apretujando la mano de su madre esperando a que sonriera.
Ya verás no será para tanto.. Espero que no se líe mucho.. Lo lamento mamá.

Di un largo suspiro y le mire a los ojos, tiene la misma nirada de su padre.

-No intentes justificarme Ryu lo que he echo no tiene nombre- me mordi con fuerza el labio inferior- siento haberte tenido encerrado durante tanto tiempo sin dejarte salir...pero lo ultimo que pretendia era causarte algun daño...

De repente a mi mente vino la imagen de Jozu muriendo en mis brazos ensangrentado.

Coloque mis manos en mi cabeza y la movi de un lado a otro intentando hacer desaparecer aquel recuerdo. Tenia que aparentar estar bien delante de Ryu.

Off: Ryu no puede leerte la mente, ryu solo puede leerle la mente a los maestros y comunes. Rectifica eso.

No importa mamá lo hiciste por mi bien...
La vi estaba triste y se estaba poniendo peor. Estaba mal y yo sabía el por que, solo había un motivo por el cual ella se pusiera así la razón era por el seguramente. Me acerqué de nuevo a ella y la abracé.
Sabes mamá?... De vez en cuando no viene nada mal llorar... Como haces tu conmigo yo también puedo hacer contigo si?..
Dijo para después sonreír mirándola.

Ante aquellas palabras no podia hacerme la mas fuerte por mucho mas tiempo.

En un arrebato le estreche entre mis brazos, las lagrimas empezaron a salir de mis ojos. No podia contenerme.

-Intento hacerlo lo mejor posible... Mi vida siento no ser la madre perfecta.

Le di un beso en la mejilla.

Eres mi madre perfecta.. Tonta..
Susurré cariñosamente acariciando con levedad su cabeza sonriente por su beso viendo sus lágrimas.
Tienes que confiar mas en mi.. si? Si te pasan estas cosas tan solo dímelo... Yo bueno.. Se rascó la mejilla.
Te consolaré todo lo que pueda.
Susurró sonriente pasando las manos por la cara de su madre secando sus lágrimas.

Le oberve con mucho detenimiento. Era pelirrojo como yo ambos compartiamos el mismo don pero sus ojos y su caracter eran como los de el. Simpatico algo salidillo pero era muy buena persona.

-Sabes que no soy perfecta- dije intentando sonreirle- no quiero ni pensar que pensara la gente cuando sepa de tu existencia, pensaran que soy una psicopata que no se merece criar a un hijo.

La verdad esque me daba terror el momento en el que tuviese que enfrentarme a Luccie y Walter.

Un escalofrio recorrio mi espalda.

Sabes mamá nadie es perfecto... Yo tampoco lo soy sino mira mis ojos...
Se levantó el parche y la miro fijamente.
Uno es como los tuyos y otros como los del vie.. de papá que diga.
Rió con levedad y le poqueo la nariz.No seas así la gente que hable lo que quiera, los que realmente sabemos lo que a pasado somos nosotros y yo e vivido muy bien hasta el día de hoy. Nunca me ha faltado nada.. Bueno tan solo quería pedirte un poco de libertad.. Creo que ya soy lo suficiente mayor y fuerte como para salir..
Susurró esto mirándola decidido .

-Tienes razon, no me he dado cuenta de que ya eres todo un hombre. Hace nada eras tan solo un bebe y ahora ya tienes 16 años. No te preocupes Ryu puedes salir del castillo siempre que puedas.


Una sensacion de soledad invadio mi cuerpo, algun dia acabaria llendose y no podia retenerlo a mi lado eternamente.

Y en cuanto el se fuese no me quedaria nada.

-En cuanto hable con Luccie seras libre de hacer lo que quieras- dije levantandome.

Oye...
Antes de que se separara la cogió de la mano y sonrió ampliamente.
Siempre estaré contigo pase lo que pase si? Y gracias por todo mamá por preocuparte y demás
Dijo sin perder la sonrisa mirándola.

Sonrei a mi pequeño y le di un calido abrazo.

Le mire un buen rato y sin ningun reparo le quite su parche.

-Asi esta mucho mejor, y no te preocupes por mi...al fin y al cabo tienes que hacer tu vida.

Me abrazó y yo correspondí a este contento y a gusto apoyando mi cabeza en su hombro. Me gustaba estar así junto a ella después de todo era mi madre. Después de eso paso la mano por mi cara y me retiró el parche yo sin preocupación ya que era ella abrí el ojo dejando ver aquel ojo marrón como los de jozu mirándola para luego sonreír.
Haré mi vida mamá.. Haré una familia y tu eres parte de ella si?
Le susurró al oído cerrando de nuevo los ojos relajado.

Le acaricie el pelo y estuvimos abrazados un buen rato. Echaba de menos esos momentos de tranquilidad que pasabamos.


-Siento si no te he dejado salir mucho pero al menos tienes que permitirle a la vieja de tu madre una salida al exterior con ella. Conozco un sitio muy bonito.

La verdad esque no habia salido del castillo desde la muerte de Jozu y hasta ahora no tenia intencion de hacerlo. Ni siquiera sabia que aspecto tenia ahora.

Bueno las pocas veces que hemos salido no a sido fuera del reino.. Bromeas vieja madre? Si eres guapisima
Dijo riendo mientras la apretujaba.
Tonta.. Quiero ir a ese sitio contigo si?
Dijo mientras la mirada de nuevo .

Le sonrei.

-Fantastico, me vendra bien salir de aqui. Ya veras te va a encatar.

Le guiñe un ojo y le sonrei.

-Pero antes le debo una explicacion a la reina.

Sonrío contento por fin iba a salir del castillo, por fin había reconocido de que ya me podía valer por mi mismo e iba a hablar con la reina. Esa idea no me hacía mucha gracia por que sabía que la sancionarían por tenerme de tal manera escondido pero por fin iba a ser libre.

Sonrei a mi hijo con mucha dulzura, se le veía bastante contento y eso me bastaba.

-Ryu quiero que sepas una cosa- dije en un tono serio- todo lo que he echo ha sido por ti, para velar tu protección y seguridad. Puede que me haya equivocado pero te he tenido que criarte sola y te he cuidado lo mejor que he podido. Y otra cosa. No importa lo que pase, Ryu yo siempre te protejere pase lo que pase...aunque mi vida dependiese de ello. Eres lo mas valioso que tengo.

Le mire seria a los ojos.

Después de su agradable sonrisa y sus palabras su rostro se tornó serio. Asentí con levedad ante sus palabras demostrando también algo de madurez en aquel momento tornándose su rostro algo serio al igual que el de ella.
Lo entiendo mamá... Nunca pondré en duda que lo has hecho por mi bien estar y mi protección, es mas estoy agradecido de ello. Se que no lo hacías con mala intención. Y en cuanto la protección lo se y lo entiendo que quieras protegerme...Le acarició con levedad la cara.Pero también es mi turno de cuidar de ti y de protegerte. No creo que sea mas fuerte que tu pero creo que me las puedo apañar.
Susurró con una agradable sonrisa rompiendo aquella seriedad.

Algo había en su mirada que me hizo recordar a su padre.

Sonrei satisfecha. Ryu había madurado.

-cariño- dije ladeando la cabeza- agradezco ese gesto, pero no me tienes que protegerme de nada, yo estoy bien. No tienes que preocuparte de nada.

Bromeas mamá? Dije ahora poniéndome serio yo cruzándome de brazos cerrando lo ojos, para después alzar el dedo y negar.
Te diría si te has mirado en el espejo pero lógicamente no nos reflejamos... Has perdido mucho peso desde que tengo uso de razón...Deberías comenzar a preocuparte y a cuidarte mas por ti que por mi yo estoy bien. Le dijo con una pequeña sonrisa. Y no aceptare que me lo niegues por que estoy en lo cierto, para poder cuidar a alguien primero debes cuidarte tu mismo. Sino no me dejaré cuidar~ Dijo en tono algo amistoso y burlón.