Buscando ayuda II

Ambos reaparecimos en el templo de Aspicious, el ya devia haber notado nuestra presencia, sobretodo la de Ian al ser un ser superior de luz, no tardaria mucho en aparecer por alli y una vez lo hiciera le contariamos lo sucedido.

-Tu solo espera junto ami y no te comportes de forma extraña, esto no es un lugar seguro para Licántropos.

Expandí mi aura como manera de llamar a Aspicious.

Porque estábamos en su ámbito y su territorio, que si no le pondría las cosas claras con respecto a quién mandaba sobre quién. Disminuí mi aura al mínimo ya que podrían matarme en varios segundos sin dificultad, y no me apetecía correr ese riesgo.

Sentí la presencia de Wataru muy agitada y la de... ese licántropo. No me caía mal, sin embargo me enfureció ligeramente el que entrara en el infierno, ¿y qué hacía con Wataru?

Me transporté inmediatamente detrás de ambos y alcé mi voz profunda y potente.

-¿Se puede saber que estás haciendo trayendo licántropos al infierno, Wataru?

Aspicious aparecio detras nuestra rápidamente como esperaba, me giré hacia el y le contesté rápido pues no teniamos tiempo que perder.

-Aspicious, lo del licántropo es lo de menos, emos venido a informarte de la situació en los desiertos fríos del norte, veras...

[Wataru comenzó a contarle todo lo ocurrido con la piedra, Salem y Kaede, diciendole todo lo importante, aunque evitando partes inecesarias como la aparición del maestro brujo] una vez terminó de hablar sin que nadie le molestara cojió aire.

-Pensé que lo mas acertado seria venir a avisarte antes de que ocurra lo peor, Aspicious... Ayudame a salvar a Kaede.

Le dije mirandole a los ojos como quien pide un gran favor.

Noté como Wataru estaba realmente preocupado y serio. Supe al momento que realmente era importante... y lo que era más aún, ¿las piedras? ¿Por qué alguien había destruido una piedra? Muy seriamente le contesté.

-De acuerdo, llévame hasta ese lugar, no hay tiempo que perder.

Escuché la conversación sin decir nada, ya que quizás no sería lo más oportuno. De repente noté una sensación extraña, como si me faltase la respiración por algún motivo. Una presión asfixiante comenzaba a inundar mi cabeza. Miles de palabras nadaban por mis pensamientos, pero todas eran iguales, todas murmuraban lo mismo, Kaede, kaede, kaede.... Wataru por Samasha vámonos ya!

Me giré hacia Ian.

-Tienes razón, os llevaré yo, se el lugar exacto.

Dicho esto cojí a cada uno de un hombro y los tres desaparecimos de alli al instante.

OFF: Nos vamos aqui ---->https://creatureswars.forosactivos.net/desiertos-frios-del-norte-f190/pensando-t1102-75.htm#25346