Sin nada que hacer

off: ¬¬ luego os quejais de que yo abuso jum
on:

Escuche la versión de Andrew e Ian en silencio, que Andrew entrara en escena no aguardaba nada bueno, pero pr una vez parecía que se estaba comportando neutral.

-No creo que sea necesario todo esto...angeles...vampiros secrustrados y torturados..¿cuando hemos llegado a todo esto?

-Un espia, por bueno que sea, no puede ver lo que hay dentro del castillo, solo como mucho lo que hay unos pocos quilometros cerca de el, pues un reino es algo privado mas aun su castillo. Y si te refieres a lo de la inyeccion, si tus cientificos fuesen buenos os habriais dado cuenta que no era un mecanismo de ataque, si no de defensa, en ningun momento aquel antidoto iba a perjudicarla, a menos que nos quisiera atacar, tampoco iba a perjudicar a tu reino-hice una pausa, habia hablado con tranquilidad, no queria discutir es mas, no iba a discutir, de echo, aun no entendía que demonios la pasaba con nosotros, pero entonces recordé que lo de la aguja habia sido cosa mia.-Y por lo de la inyeccion, respondo yo ante ello, ian no tuvo nada que ver con ello, no sabia de mis actos.

Miré a natasha, y creo que por primera vez, no la hablé mal. Suspiré.

-Que se yo?

Firma los tratados que quieras Luccie, a ver cuando abres los ojos y ves que no quiero hacerte nada. -eso fue lo único que comenté a lo de Luccie.
No pude decir nada ante el comentario de Nat ya que era culpable de ello tanto como Luccie.
Me giré al escuchar a Andrew, me estaba defendiendo tras la discusión. A pesar de ello, no esperaba que la reina se creyese que yo no hize nada, aunque fuese la verdad.
Conocía la existencia del virus, pero en ningún momento autorizé la inyección en Angeline. -dije serio.

No esperaba un tono tan normal por parte de Andrew, la verdad no me lo esperaba.

-Aun estamos a tiempo de arreglar las cosas...alomejor todo esto ha sido un mal entendido.
Si, tenia esa estúpida esperanza, pero sabía que esto dolía mas a Luccie que a mí incluso ian la echaba de menos.

Tenía que intentarlo.

-Se que no fué Ian, angeline me lo contó todo, absolutamente todo, el trato que tubistes con ella, fué horrible.- Miré furiosa a Andrew-¿Y que mas da que sea un defensa?!, fue en contra de su voluntad!, es repugnante!-grité-¿Desde cuando lo haciais?-bajé la cabeza, antes de aquello había una especie de tratado, y ellos simplemente estaban preparandose mientras que yo nunca hice nada, ni preparé nada en su contra, incluso desice la inquisicion.

-En lo unico que la tratamos... "mal" fue en lo de la inyeccion, por lo demás en el poco tiempo que estuvo allí, no se que te habra contado, pero no fue maltratada. Aun que me da igual que no me creas-dije con voz neutra, entonces proseguí tras una pequeña pausa-El tiempo no te incumbe, pero creeme que esa inyeccion no estaba ideada para vosotros, no teniamos motivos para crearla ni mucho menos para utilizarla hacia vosotros. Es un sistema de defensa como quien entrena a sus tropas de más por si el enemigo ataca, ni siquiera pensabamos que la utilizaríamos algun dia y con ella fue para provar los efectos. Sin embargo, una cosa sabiamos, que no la haría daño pues estaba ideada para eso, su objetivo era evitar que nos atacaran, no causar daño; ya te he dicho que era una defensa. Y si puedes, porfavor, tranquilizate y no grites, yo no te estoy levantando el tono en ningun momento y te estoy hablando bien.-hice una pausa-de cualquier modo, no la ha pasado nada, y el efecto de la inyeccion se iba en un corto periodo de tiempo-suspiré-mira luccie, mi intencion no era dañar tus sentimientos, y mucho menos herir a los tuyos con algo, cosa que tampoco hice en ningun momento. Soy un licantropo, y los tuyos vampiros, de echo he peleado muchas veces con natasha, no puedo evitarlo al igual que tu no puedes evitar sentir un odio irracional por mi, aun que solo sea por mi olor. Pese a todo eso, tanto ian como yo te teniamos, y te tenemos un aprecio inmenso, y aun asi, tu de repente sin motivo alguno rompes nuestra alianza, nos desprecias en la reunion poniendonos en evidencia delante de todos... por que si?... cuando has conseguido algo que ningun vampiro habia conseguido antes... mi cariño...-habia alzado un poco el todo, pero en estas ultimas frases lo habia bajado, con un minimo tono de tristeza que pese a todo queria evitar, y mantener el tono neutro-Estaba cabreado, no sabia, ni se el motivo por el que derepente pasaste de palabras dulces, a las que respondia por igual, a una brusquedad repentina.-hice una pausa-siento si hice daño a uno de los tuyos, lo lamento y si quieres, pagala aqui conmigo ahora mismo, desahogate. Pero no metas a nadie mas en esto por que lo unico que haras sera crear mas odio, y mas y mas odio y esto nunca acabara-di un paso al frente y estire los brazos abriendolos, alzando mi pecho-hazlo ahora, si quieres llevame a tu castillo y que angeline tambien descargue su ira hacia mi, pero no sigas la cadena luccie... no cometas mis errores... Por que si continuamos con esto... muchos moriran... no solo los mios, si no tambien los tuyos... y muchos otros que son nuestros amigos-estaba dispuesto a saldar mis deudas, al fin y al cabo, era un hombre de honor y principios. No queria bajo ningun concepto que ian se metiera en esto, y mi olor debio de dejarselo bien claro, era un rotundo no con violencia si se intentaba interponer. Era mi decisión, y queria que la respetaran

Oí sus palabras sin intervenir, si seguía diciendome cosas como aquellas entonces... entonces aquel muro que habría creado y todos mis sacrificios no servirían para nada, me dí al vuelta rapidamente quedandome hacia Natasha, quería ir a abrazarles quería decirles todas mis intenciones y que esto se terminara de una vez por todas, pero entonces... pero entonces todo estaría igual que antes, abrí la boca para decir algo, pero mi voz se trabó, sabía que ellos podían oleer mis sentimientos, pero lo ujnico que conseguirian sería un buen dolor de cabeza, por tantas cosas entremezlcadas, subí mi cabeza-Yo no tengo que rendir cuentas contigo, sino Angeline-mi voz sonó todo lo seria que podía y conseguí no trabarme, aun asi carraspee y me quedé quieta completamente, como si de repente me hubiera vuelto una piedra.

Por un momento, un instante, sentí una marea de sentimientos azontando mi cara, tantos que apenas podia distinguirlos, pero todos eran entornados a referencias negativas.
Mantení la forma, y volví a ponerme firme, dejando caerlos brazos a su posicion inicial.

-Pues entonces llevame con ella, que salde lo que tenga que saldar conmigo, pero solo conmigo. Y con ello, prometeme que nadie sufrira-hice una pausa-podemos fingir no ser amigos, luccie, al fin y al cabo nuestras razas por naturaleza se odian, pero no tenemos por que hacernos enemigos. Simplemente, lo que surja, pero llevamos siglos y siglos asi, no indica que tengamos que atacarnos con todo lo que tenemos, solo cuando nos encontremos y si eso.-hide una ultima pausa y respiré ondo-bien, ahora, llevame con angeline, porfavor.

-No-mi voz sonó alta y clara, pero como siempre que me dejaba llevar, había salido sin que yo quisiese, seguí en la misma posicion quee antes-No quiero-apreté los puños, mordiendome el labio inferior, para no empezar a emanar lagrimas a diestro y siniestro.

Me eché un poco acia atras, levemente boquiabierto, sin entender.

-...por que?-pregunté desconcertado, entonces fruncí el ceño y di un paso al frente-dejame saldra mi deuda, luccie. No la pienso atacar-la miré aun mas perplejo cuando vi sus ojos.-...pero que demonios te pasa luccie...?

-No quiero-cerré los ojos, ahora verdosos, el cabreo había disminuido notablemente y solo hinché los mofletes-Nada-dije orgullosa alzando mi cabeza hacia un lado, para que no me mirara y entonces di un par de pasos alejandome, bufando levemente.

-Entonces prefieres ver como tu pueblo muere por una lucha sin sentido, cuando se puede arreglar ahora?-le pregunté alzando un poco el tono, aun completamente perplejo

Me giré para mirarle con mis ojos verde esmeralda clavados en los suyos y mi cara, no denotaba ni tristeza ni alegría-¿acaso yo e dicho eso?-pregunté sin desviar mi mirada ni un apice.

Fruncí el ceño.

-Pues dime lo que quieres decir

Me encontraba caminando por los bosques colindantes a las extensas llanuras llenas de verdor y frescor que tanto apasionaba mis sentidos. Sin embargo, le faltaba chispa...algo interesante, mi olor favorito..."En fin, da lo mismo, es interesante también, jejejeje" Aunque unas voces me atrayeron la atención, y para poder escuchar lo que decían, me escondí tras el tronco de un árbol, suprimiendo así mismo el aura, y mantenía mi oído lo más atento posible a lo que dijeran. Al parecer, un par de voces ciertamente conocidas dialogaban sobre el posible futuro de ambas razas...la mía y la canina...y parece que Andrew, por fin ya como un hombre algo más caballeroso y respetable, se ofrecía como sacrificio a mi. No sabía qué pensar de aquello, pero estuve atenta, esperando una posible respuesta por parte de alguno. Si había algo que me hiciera tener que intervenir, lo haría.

Me extrañaba la forma en la que Luccie había cambiado de tono al hablar con Andrew. Iba a replicar algo de la conversación que tenían pero olí un olor conocido.
Me agaché, cogí una piedra la tiré cerca de donde estaba ella, sin darla.
Puedes salir.

Oí la piedra chocar contra el tronco del árbol, y una conocida voz que me invitaba a salir del lugar. Rechiné levemente los dientes, un poco molesta porque me hayan descubierto, y salí, mirando de reojo a Andrew y a Ian. Pude ver que Luccie estaba frente a Andrew. Me acerqué, cruzándome de brazos en mi lento caminar, y me detuve a pocos metros de todos ellos. Le dediqué a Andrew una mirada asesina levemente, sin decir palabra. Quedé callada, en espera de que alguno me preguntase algo.

Note otro aura cerca de nosotros...era bastante inferior y por eso la percibí tan bien.

era una vampiresa que no había visto antes.

-¿hola?

Desvié una fulminante mirada a Andrew, antes de dirigirme, con cara de aspecto enfadado a Natasha, a la que no conocía de nada. Podía percibir que era una vampiresa, pero totalmente desconocida para mi. Mi respuesta a su saludo no fue ni más ni menos que esa. El silencio y una fulminante mirada. No quería hablar, porque de hacerlo, no sé hasta dónde llegaría. O incluso enfadarme tanto como para ir a por Andrew al instante. No, prefería estar en silencio, apretando los puños para contener todos mis sentimientos.

Miré a la recien llegada con una suave sonrisa picara-Aqui tienes lo que buscabas andrew- me eché para atras un poco, siempre me había gustado la actitud de Angeline respecto a todo tipo de personas cuando estaba de mal humor-Natasha, esta es Angeline, maestra. Angeline esta es Natasha, princesa-presenté de forma breve, mirando de reojo toda la escena.

Vi como llegaba, impasible ante la escena. "perfecto" pense. Sin embargo, miré a ana.

-Es ella la que tiene algo en mi contra, si ella se venga de mi, no atacarás mi reino? pues ya no tendras problema alguno conmigo pues el problema en si lo tenemos ella y yo; como ya te dije, asumo mis actos, pero no voy a permitir que sacrifiques a más de los tuyos y te lleves a la par a unos cuantos de los mios por esta estupidez.-esperaba la palabra de ana, entonces, acabariamos con esto de una vez por todas. No dejariamos de ser enemigos y siempre que nos vieramos atacarnos, pero almenos no caerian tantos en ambas filas

-Ninguno de los mios a ido a por los tuyos, vosotros fuisteis los primeros-Puse mis brazos por detras-nunca sacrificaría a uno de los mios por algo tan insignificante, como vosotros-sentencié entrecerrando los ojos con seriedad-Y me interpondré si hace falta-

Mi mirada cambió.

-hablas mucho, pero no me contestaste, mujer-mi voz sonaba neutra, no la miraba mal, ni bien, simplemente la miraba

-Si no sabes sacar una respuesta de mis palabras es que en realidad, no debías de haber ascendido tan rapido, Andrew.-una semi sonrisa burlona apareció en mi rostro-Si vuestro reino no fué atacado en su momento, no lo será ahora, mas no diré un porque-

-No es que no entendiera el significado de tus palabras, vampira. Las cosas claras es como mejor se recuerdan despues, y esto es oficialmente darme vuestra palabra de que lo hareis, no con sutilezas... reina luccie-mi rostro era serio, pese a la falta de seriedad de la "reina", en las ultimas palabras entoné de distinta manera. Se notaba que no era una entonacion burlona, mas bien tenía un leeve sentido sarcastico, hablandola sin el cariño que solia aportar al hablarla. No la hablaba en absuluto de mala manera, solo de una forma seca y fria. Ya tenia la respuesta que queria y habia personas presentes para confirmarlo, más seguramente algun que otro entrometido, no eramos las unicas auras que rondaban estos lares.

Miré a angeline, acercandome a ella e ignorando todo lo que dijesen los demás.

-Bien, acabemos con esto. Aqui me tienes-dije, tirando mi espada a un lado, cerca de ian para que fuera el unico a su alcance en tal caso, y me la cuidase; aun que lo hice sin mirar siquiera.