Sin nada que hacer

En silencio, me mantuve con los brazos cruzados, mientras observaba la discusión entre mi reina y Andrew. En cierto modo, estaba enfadada, tanto que apretaba mis manos a mis brazos más y más, pero en el fondo Andrew parecía comportarse como un caballero, por una vez en su vida. Je, para cuando tengo que hacerle daño, terco hasta el final. Mi rostro mostraba todavía enfado, hasta que Andrew tiró su espada, y con los brazos abiertos se acercó a mi con pasos lentos. Su voz me decía que estaba decidido. Sí, asumiría su destino. Eso me halagaba, pero no por ello dejé de bufar levemente. La razón me decía que con eso era suficiente, pero no, necesitaba venganza, tenía sed...mucha sed. Sed de hacerle sufrir...de descerrajarle un puñetazo en la barriga.

Dejé caer mis brazos rápidamente, y con pasos rápidos, me acerqué a Andrew, con los puños apretados, rechinando los dientes, que se mostraban ante él, al igual que los colmillos, y gruñendo levemente. SIn miramientos de ninguna clase, le dediqué un puñetazo en la barriga. No sé si le haría mucho daño o no, Andrew tiene buenos abdominales, o eso noto...Pero no acabaría ahí. Tras retirar el brazo, le tomé por la camisa con ambas manos y le zarandeé fuertemente, al tiempo que le gritaba enfadada, con una expresión poco feliz.


¡¿Cómo me pudiste hacer todo lo que me has hecho?!¡¿EH?!¡¡¡¿¿EH?!!!¡¡¡YO TE APRECIABA, TE TENÍA POR AMIGO!!¡¡TRAIDOR!!

Detuve mis zarandeos, para darle un rodillazo en la boca del estómago. Tras eso, bajé la pierna con lentitud, y le volví a mover con mis brazos.
¡IDIOTA!¡ESTÚPIDO!

Tras zarandearle, y dedicarle tan bonitas palabras, detuve mis zarandeos y bajé el tono de voz, al igual que mi vista, tras lo cual le iba a hablar con un tono más oscuro. Mi cara se ensombrecía bajo mi propia sombra de la poca luz que llega de la luna.

Te odio...

Se acerco corriendo hacia mi, estaba enfadada, en parte lo comprendia. Mi mirada seguia fija en ella, no hice ningun movimiento. Pego un fuerte puñetazo el estomago, iba con rabia por lo que me dolio un poco, me agaché minimamente por acto reflejo, mostrando un momento una cara de molestia. Entonces me tomó de la camiseta y comenzó a gritarme. La escuché, permanecía serio mirandola. Una leve mirada de lastima pudo espacaparseme, era una vampira, y aun que no pensaba que la habia causado tanto daño, comprendia por que estaba asi y en el fondo me apenaba; seguia siendo un ser de luz al fin y al cabo. siguio con violencia, hasta que un inesperado rodillazo alcanzó la boca de mi estomago. Era fuerte, pero ese punto propiamente dado y con rabia incluida era delicado.

Me inchiné un poco, con cara de dolor y de los anteriores zarandeos cai de cuclillas al suelo, posando una de las rodillas en este y apollandome con las manos. Se me habia cortado durante un momento la respiracion, pero entonces me levanté, algo costoso e ignorando el dolor me puse firme y la miré, esperando más, todo eso habia sido bastante poco.

Vi con mirada rabiosa, cómo Andrew se inclinaba tras mis dos golpes. En el fondo no deseaba pegarle. No..para mi era más que un simple lobito. Le tomaba por alguien con quien competir amistosamente. Pero en el fondo de mi corazón, si aún queda algo de él, siento resentimiento. Sus idioteces nos llevaron a esto. O quizás mi extremismo. EN cualquiera de los casos, hemos llegado a lo que tenemos entre manos. Notaba cómo mi rabia se iba transformando. Un líquido transparente cubrió con su velo mi vista ahora nublada. Para que no me viera las lágrimas, y al ver que estaba firme nuevamente, como un caballero, consecuente con sus actos, no quise pegarle más. No...le tiré con mis manos hacia el suelo para arrodillarle, y le di la espalda, cruzándome de brazos. Mi cabeza gacha hacía que estuviera oscurecido mi rostro, pero mis rojizos ojos miraban a Luccie con melancolía. Sí...llegamos a esto...y da real pena.

Con voz rabiosa, y en el fondo, triste y apenada, sin volverme a Andrew, le grité.

¡Aléjate de mi!¡Apártate!¡No quiero pegarte más!¡Pero como te vea la cara, lo haré, lo haré, te pegaré hasta dejarte irreconocible!

Caí al suelo, de rodillas, ella intentaba ocultarlo, pero no podia ignorar ese olor salado, las lagrimas que no se veian caian por su rostro. Sinti realmente pena por ella, pese a que fuera lo que es, no me gustaba herir a las personas, no obstante... me habian echo tanto daño esos seres... llevandose todo cuanto tenia.

Me puse nuevamente en pie, entonces abrí un poco la camisa con ambas manos, mostrando mas mi pecho.

-Adelante

la dije, esperando a que viniera por mi

Al oir que todavía seguía ahí, detrás de mi, quieto, sin irse, me giré repentinamente, y con una apariencia poco feliz, con un gruñido, al darme la vuelta, moví la mano velozmente, dándole un tortazo en la cara, volviéndosela a un lado. Entre dientes me dirigí a él, cada vez en peores condiciones de humor.

¡Dije que te fueras!¡VETE!¡YA!

Dejé la mano en el aire, abierta, como si todavía estuviera tocando su mejilla. Me daba real pena pegarle de esta manera, pero era una rabia que guardaba en mi interior, y la tenía que dejar salir, o explotaría en mi interior. Sí...ya no podía más.

¡No puedo aguantar más!¡Si no te vas, te juro que no podré parar!

TOmé la empuñadura de mi espada con la otra mano, y la desenvainé rápidamente, sonando el choque del metal con la vaina. Sin dilación, la tiré al suelo, quedándose clavada junto a mis pies a mi lado. Iba en serio.Muy en serio

Al darme la bofetada giré la cabeza a la vez, por el inpacto. Un pequeño hilo de sangre asomó por la comisura del labio. Me lo limpié con el reberso de la mano y la miré nuevamente.

-No pienso huir como un cobarde, angeline, haz lo que tengas que hacer.

habia visto como cogia su espada, no me importaba. Cierto era que no iba a permitir morir, pero el dolor era lo que menos me preocupaba, todo fuese por evitar una guerra.

No tiene problema alguno al parecer. Muy bien, se lo advertí, se lo avisé por activa y por pasiva. No hay vuelta atrás. Bajé el tono, y bajé mi mirada,ensombreciendo mi rostro.

Que conste que tú lo has decidido...

Levanté la cabeza, y al ver sus ojos marrones y su rostro, aparentemente preparado, di un fuerte pisotón en su pie derecho, y a la espera de su grito, propiné con mi codo un codazo en su pecho. Ya no lo podía aguantar más. No...era imposible. Tras el codazo, comencé a dar puñetazos, uno tras otro, sin detenerme. Cada vez más rápido, más fuerte. Era una locura, como una pesadilla. Me había desquiciado, dejado a la mano de la locura, quizás a la espera de que alguien me detuviera. Entre mis puñetazos, grité fuertemente, consternida ligeramente.

¡ANDREW!¡TE LO AVISÉ!¡¡TE LO AVISÉEE!!

Observé toda la escena en silencio, desde la discusión entre Luccie y Andrew hasta la pelea entre este último y Angeline. Veía como Angeline le estaba dando una paliza a Andrew y cada vez me entraban más ganas de pararla pero sabía que ninguno de los dos me perdonaría que lo hiciese así que hice un esfuerzo para no abalanzarme sobre Angeline. Miré a Nat en busca de ayuda porque no sabía si realmente debía hacer algo.

Observé la pelea impasible, parecía que Andrew no se defendería y eso me hacía enfurecerme un poco,¿ acaso creía que Angeline no era lo suficientemente fuerte como para vencerle? ¿o es que se quería hacer el martir?, giré la cabeza a mirar a IAn y como este miraba a Nat, ni que estubiera enamorado, le miré fijamente clavando mi mirada amenazante y bufé, lo sufientemente fuerte como para captar su atencion, como interrumpiera, se las vería conmigo.

OFF: emm sigo esperando a que posteen ian y natasha y tal eh xDDD

(OFF: si subes un poquito, solo un poquito, veras mi post xD en caso de faltar falta natasha xD)

observe atentamente toda la pelea.
Angeline y Andrew estaban que echaban humo, no se cuanta paciencia les quedaría.

Me fijé en como me observaba Ian, estaba esperando a que dijese algo.

yo tambien le mire fijamente, estaba deseando ayudarle...¿pero como?


me acerque hacia Andrew y Angeline.

-Basta, dejar de pelear.

off: siento haber tardado tanto Unn.

No iba a detenerla, tampoco iba a huir como un cobarde, no pensaba que me mereciera aquello, en absoluto, sin embargo si eso evitaba una guerra, que fuese asi. Punzazos agudos por todo mi rostro a la par que torso, mis labios sangraban, al igual que una de mis cejas y mi nariz, seguramente bastante tocada por alguno de los colpes. Solo giraba la cabeza por el impacto de cada golpe, pero no hacia ningun amago de defenderme, no lo hiba a hacer. Ella no me iba a matar, era de demasiado podo nivel y no la dejaria llegar a tanto, sin embargo no me importaba tanto esa situacion. Firme y en mis 13 me quedé quieto mientras esa vampiresa golpeaba una y otra vez mi cuerpo, guiada por la locura.

Entonces pude sentir como alguien se acercaba y decía algo. Mis oidos estaban entumecidos por los impactos, por lo que no oi que habian dicho

La locura continuaba guiándome, hasta que una voz, desconocida para mi me sugirió que me detuviera. Antes de dar el próximo golpe que iba a dar, mantuve el puño en alto, sin descargarlo nuevamente. Tenía los puños rojos, por tanto golpeo uno tras otro. Me giré levemente hacia Natasha, y me quedé, mirando con un semblante cansado, a la muchacha. Me detuve a pensar, tras darme cuenta de toda la ira que había descargado."¿Me he...dejado dominar...?De todas maneras, merecía parte de lo que le dí..."

Dejé caer los puños, y por el cansancio de tanto golpear, caí hincando las rodillas en la tierra, mirando a Natasha cansada. Lentamente giré la cabeza para ver cómo estaría Andrew. Pero sólo pude ver moratones, zonas enrojecidas y una mala cara. Cierto era...dejé que la locura me dominara. Intenté mediar palabra, con bastante trabajo.

Aaah...aah...siento que esto acabara así...pero ya no lo podía contener...

Dije, dirigiéndome primero al licántropo. Luego me dirigí a Natasha, para intentar tranquilizarla, aunque probablemente no lo estuviera para nada.

Y...sí.....ya...terminé...

Noté que se detuvo y como e alejaba un poco de mi. Se disculpo, a lo que yo la miraba. Escupí a un lado sangre que se me habia acumulado en la boca, que aterrizó en el suelo, entonces la miré nuevamente y asentí. Me levanté cansado, ignorando por completo el dolor, no sin antes mostrar una minima mueca de molestia segun me levantaba. Me sequé la sangre del labio con el lateral de la mano.

-Espero haber saldado mi deuda.-le dije a angeline, mirandola una vez mas. Sonaba a un tono cansado, por dentro me recorria resignación, seguia pensando que no me habia merecido tanto... pero lo aceptaba. Caminé pasando al lado de Ana y entonces me detuve un momento, el pelo me tapaba los ojos, pero se podia apreciar que miraba hacial frente.

-Recuerda tus palabras, luccie; no las desacates.-la dije, algo bajo. Entonces, ignorando todo lo demas seguí caminando con las manos en los bolsillos hasta perderme en la oscuridad del bosque