andando sobre la arena

Estaba atardeciendo y me apetecía dar una vuelta por las costas vaahl. Eran preciosas y ver allí el atardecer era un gran espectaculo que no puedo perderme. Hacia una brisa estupenda y la arena de la playa era muy blanca y fría. Me encantaba aquel lugar, ademas no había nadie lo que lo hacía mejor todavía.

Empece a pasear sobre la arena.

off: si te molesta lo quito

on:
llegue a una hermosa costa, de aguas claras y arenas cristalina, la brisa fria lo hacia perfecta, es muy agradable. Estaba lleno de tierra ya que habia pasado por muchos obtaculos y animales salvajes para llegar ahi. Corri hacia el agua, dejando en la arena la parte superior de mi ropa, la cual era mi chaqueta y mi franela, junto a ello mi espada con su funda.

Me lave el rostro, mojandome el cabello y un poco mi cuerpo, se sentia bien, pero no podia beber el agua al cual es salada.

Me encantaba aquellas costas, eran hermosas, frescas y sus aguas cristalinas eran las mejores en las que te podías bañas y acariciar los corales.
Y eso me dediqué a hacer, era realmente hermoso, entonces la luz empezo a descender estaba anocheciendo lo notaba.

Me acerqué por fin a las costas, mi pelo estaba realmente mojado y totalmente liso, lo que provocara que casi me llegase hasta las rodillas ya que normalmente lo tenía bastante rizado. Toda mi ropa estaba completamente empapada, mi camiseta rajada, mi falda corrtada hasta tal punto en el que se me pudiesen ver los muslos esa era la ropa que llevaba puesta, la que no me ponía desde que era reina, pero eso poco importaba asi que me dediqué a secarme el pelo.

Entonces vi a una chica admirando el horizonte, clavé mis ojos verdes en ella-Hola!-anuncié realmente alegre esperando que me viese.

Este continente era precioso, sobretooso por sus playas. Podria estar aqui toda la noche observando el horizonte, pero entonces hoy una voz a mis espaldas y me gire.
Era una joven de cabellos cobrizos y uns hermosos ojos verdes. Y mas adelante pude ver a otro joven.

-Buenas noches -dije con una educada inclinacion de cabeza

Sentado sobre la arena, mientras que el suave viento marino soplaba mi cuerpo, moviendo un poco mi cabello al flujo del aire. Distraido mientras miraba el horizonte, una vista bella del sol poniendose, entrando asi la luna y la noche oscureciendo el mar.

Note unas dos auras a lo lejos a unos par de metros, mire de donde provenia y son dos chicas, ambos con cabello rojos, al parecer pasaban por esta playa para relajarse, asi como yo lo hacia, suspire y solo las ignore para seguir admirando la vista.

La chica se dió la vuelta y me saludó, parecía bastante maja -Siento si te e molestado o algo! hacia demasiado tiempo que no veía caras nuevas por estos lugares-Ensanché mi sonrisa con una mirada dulce pintada en mis ojos verdosos. Entonces ví que la chica miraba hacia detras de mi y observé yo tambien, había un chico sentado, me maldije a mi misma por no haberme dado cuenta haber si iba a pensar que era una maleducada-Hola Buenas tardes-noches!-

Había alzado la voz un poco pues parecía realmente absorto en el paisaje, parecía que ninguno de los dos era muy hablador, habría que hacer algo al respecto-Me llamo Luccie Hyuga es un gusto haberme encontrado con vosotros en esta noche-

-Tranquila no molestas, solo quería concer mas de cerca las costas, me dijeron que eran preciosas pero nunca imagine que lo serían tanto. Este paisaje es el mas bonito que he visto nunca.

Me quede como una emobobada viendo el horizonte y entonces me di cuenta de que no me había presentado.

-Hola, mi nombre es Azhara Rostov. Es un placer conoceros a los dos.

Cuando las dos chicas me dirigen la palabra voltee a verlas, al parecer la de ojos verdes era muy amigable y la otra muy fría, o quizás tímida y no sepa cómo llevarse bien con las personas. Me levante y con mis manos sacudo la arena de mis pantalones.

-Me llamo Hunter Darknight, un placer.- Fui donde están mis pertenencias, agarrando la franela negra y al acto seguido colocándomela. Solo hice eso para tapar mis cicatrices aunque de los brazos solo se notaban un poco, pero no le daba un poco de importancia.