¿Y por qué no?

Había pedido una mesa en la zona VIP del local, para evitar que estuviera toda la peña encima. Estaba calmado, la iluminación era algo tenue, y había al menos 5 metros de distancia entre mesa y mesa. Pedí algo de beber, y di un largo trago para relajarme. El Rey de los demonios llegaría tarde o temprano, y sería nuestro primer encuentro; por suerte como aliados...

- Más me vale que esto vaya bien...

Llegué a la taberna a la hora estimada. Allí estaba la persona con la que me había citado por carta. Me acerqué y me senté en la misma mesa, no sin antes hacer una breve reverencia.

-Buenas noches, príncipe R, puntual como esperaba de vos.

Hice una pequeña reverencia desde mi posición en señal de respeto.

- Encantado, rey Aspicious; lo mismo puedo decir de usted. - llamé al camarero para que le pudiese atender - Es para mí un placer conocerle, no solo por nuestra situación aliada, sino por el aprecio que tengo por sus "métodos"; han llegado a mí muchas historias que me han provocado interes por usted..

-Vaya, vaya... Así que tan rápido corren los rumores... En cualquier caso, el motivo de esta citación es el siguiente: dado a la reciente alianza entre ambas razas, creo conveniente mantener una charla para que las cortes de ambos reinos se conozcan. Por supuesto, esto es un encuentro informal, sin embargo creo que resultará provechoso... - dije sonriendo maliciosamente