Bajo los rayos de luna

Estaba demasiado cansado para pensar, y ella tampoco quería hablar demasiado. Me sentía con ganas de expulsar algo pero no sabía que era. Decidí tomarme una tila para calmarme, así que me la preparé y me dediqué a observar la luna mientras se reflejaba en el lago que al otro lado de mi se encontraba. Tal vez solo necesitaba tiempo para pensar y acostumbrarme a esta vida. Quería olvidarme un rato de todo y llamar a los astros de la noche a mi consuelo.

estaba sedienta necesitaba una copa ya, entre lo mas rapido que pude en la taberna y cual fue mi sorpresa al ver a un chico solitaria sentado en la mesa mas lejana que habia, parecia algo triste...

decidi ir hacia donde estaba el y sentarme.

-hola buenas noches...

Me volví hacia la persona que me había saludado y traté de esbozar una sonrisa.
-Buenas noches.

Al ver que se sentaba decidí:

-¿Quieres tomar alguna infusión?

sonrei al ver que me dejo sentarme a su lado.

-lo mi no son las infusiones pero puedo tomar perfectamente un te de melocoton... por cierto perdona mi insolencia. Mi nombre es Natasha Higurashi encantada.

-vengo de un entrenamiento por el bosque y estoy sedienta... no sabia que hubese alguien por aqui, aunque ahora agradezco que estes aqui. no me gusta estar sola.

le volvi a sonreir

Sonreí y aparte un poco la mirada:

-Para mi es difícil estar solo, pero me gusta tener compañía de vez en cuando.

Me levanté y me dirigí a un melocotonero, arranqué alguna fruta y me dispuse a preparar un té.

senti como Aral seguia pensativo y muy triste... no sabia porque pero tenia la necesidad de ayudarlo.

-necesita ayuda con el te... me sabe mal estar aqui parada sin hacer nada.