El placer de la tranquilidad

Una nueva noche se presentaba. Había estado estudiando mucho el manuscrito que encontré en aquellas ruinas, así que decidí relajarme un poco. Me dirigí hacia los bosques más cercanos, en busca de brisa fresca y soledad.

Cuando llegué el ambiente estaba muy tranquilo. Pude respirar hondo y sentir la calidez de la oscuridad solamente rota por las estrellas y la Luna. Encontré un árbol cuya copa hacía un hueco muy aparente para sentarse. Alcé el vuelo y me posé en aquel imprvisado asiento y me quedé embobado mirando el cielo.

Iva volando por encima de los bosques de la discordia cuando detecté un aura, antes de saber quien era suprimí la mia al mínimo posible y me acerqué a ver quien era, una vez cerca encontre a aspicious y decidí acercarme lo mas sigilosamente posible a el y propinarle un buen susto.

-ASPICIOUS!!!!!!!!!!!!

grité cerca suya.

Ignoré por completo el grito. Si lo que pretendía era asustarme no lo había conseguido. De todas formas aquel día estaba de buen humor. así que miré abajo y vi a Wataru.

-¿Te parece normal molestar de esta manera a la gente? Más te valdría apreciar lo que a tu alrededor se encuentra. Hoy hace una noche preciosa.

Y volví a mirar al cielo estrallado.

Aparecí al aldo de Asp, le habia rastreado hacia un par de kilometros. Sonreí picaramente mientras señalaba con la cabeza al personaje que acababa de aparecer.
-¿Es siempre asi de ruidoso?

Miré a Walter como pidiéndole ayuda.

-Por desgracia es el demonio más estúpido que me he encontrado en mi vida. No sé ni como ha llegado a príncipe... Y lo peor de todo es que le tengo que soportar. En fin, paciencia, Aspicious.

-Teniendo en cuenta como andan las cosas por el infierno no me extraña que haya llegado a ser principe. -Dije encongiendome de hombros y refiriendome a la desaparición de Arshei.

Es cuche como esos dos se metian con mi forma de ser, pero no me importaba, yo era asi tenia que aceptar que decian la verdad, aun asi me puse a hablar con ellos.

-Oye que no soy de piedra ¬¬

Les dije a ambos.

-Y respecto a lo de ser príncipe, teneis razón, aproveche el revuelo que se armó en el infierno para poder ascender. En cuanto a lo de Arshei... Nunca llegué a conocerla en persona, pero creo que por muy cabezota que se ponga aqui "mister serio" pienso que lo haria mucho mejor que una reina que desaparece sin dejar rastro

Despues de eso hubo un incomodo silencio.

Miré a Wataru sonriente. Creo que fue la primera vez que me hizo reír sinceramente.

-Al menos eres alguien sincero Wataru. Supongo que hasta el más tonto puede tener momentos de lucidez. Sin embargo las cosas no son tan simples. Hasta que no resolvamos el problema de la reina estamos atados de pies y manos.

Me volví hacia el, intrigado.

-¿Problema?¿Que problema?

Dije queriendo saber lo que pasaba exactamente.

-mmm... Pero algun rey necesitaremos, llevamos ya tiempo sin ninguno y como no aparezca a Arshei nos tocara a nosotros hacer su trabajo.

Dije sobandome la nuca.

Solté un largo suspiro. La idea de que alguien como Wataru se coronase como rey de los demonios no me hacía ni pizca de gracia. Sin embargo yo tampoco quería cargar con ese deber.

Puede ver en la cara de Aspicious lo que pensaba.
-A mi no me mireis, es algo que debeis discutir entre voostros dos. -Dije encogiendome de hombros, la verdad es que no me apetecia demasiado que ninguno de los dos fuese rey. Wataru era demasiado.... Wataru. Y Aspicious podria ahcer cualquier cosa con tanto poder.

Miré a Walter, no me esperaba que ni siquiera se les pasara por la cabeza el echo de verme como rey.

-Nunca haceptaria ese puesto. Teniendo a Aspicious, ¿para que me van a necesitarme ami? Es mas, nunca he querido ser rey, me vale con controlar el agua a este nivel y de politica se lo justo, creo que para alguien que se pasa el dia investigando sobre nuestra raza y su historia en todo el reino, y encima es príncipe, se merece ser rey

Mirando a Aspicious.

-Agradezco el cumplido, pero lo cierto es que el poder corrompe... jaja - dije con una risa apagada

Me pone en un tono serio.

-Dejate de tonterias aspicious. Recuerdas cunado nos conocimos, yo no era mas que un demonio comun que no sabia atarse las sandalias, sin embargo tu quisiste ayudarme a superarme ami mismo y cumplir mi sueño, poco a poco he conseguido ponerme a tu nivel y podrian llamarnos facilmente "camaradas", teniendo en cuenta que sigues pensando que soy imbecil, ¿no te gustaria volver a ser un superior mio?, ten en cuenta que sino seriamos compañeros y eso tu nunca lo permitirias...¿o me equiboco?

Le dije con un tono muy bulgar y cercano, como si estubiera hablandole a un colega. En realidad lo hice para fastidiarle y que se diera cuenta de que el merece ser rey, pero aun asi no sabria su reacción.

-Siempre podeis dejarle el puesto a... ¿Como se llama ese dichoso diablillo que se autroploclamó rey renegado? -No recordaba su nombre, la verdad, me parecia incloso peor opción que estos dos. Era una demonio gritón, sin sentido... de nada. Me atreveria a asegurar que no veia nada más allá de su nariz.

Me lleve las manos al pecho y agaché la cabeza. No pude contenerme y empecé a reír como no lo había hecho en mucho tiempo, tal vez nunca.
Entre las risas pronuncié unas palabras un tanto inentendibles.

-Wataru, te lo he dicho muchas veces, pero es que eres idiota - a diferencia del resto de las ocasiones, aquello lo había dicho desde el cariño y no como insulto -. Si tantas ganas tienes de verme rey deberías plantearte la idea de conseguir más apoyos. Porque tú simplemente me lo digas no me coronaré.

-En cuanto a Kain... - dije desviando la mirada hacia Walter, esta vez seriamente - No hay nada que decir, ya lo sabemos todos, jajaja.

De pronto se me ocurrio una idea.

-¿Quieres mas apoyo? ¿que te parece si voy preguntando persona por persona que opinan sobre este asunto?, al fin y al cabo no pierdo nada por intentarlo y estoy seguro de que mucha gente querrá que seas rey, si tu no hubieras interbenido en la cueva del origen quizas mas de uno ya estaria muerto, asique ya sabes, ves preparando tu partido politico que dentro de poco te tocará mandar

Le dije a Aspicious en un tono amigable.

Puse mis dedos pulgar, indice y corazón en mi cara (Coolfacepalm). Definitivamente resultaba cargante, compadecia a Aspicious. Aunque por lo menos a él no le traicionaban sus iguales.
-No se puede nombrar rey a alguien a la fuerza. Aunque más de uno haya intentado proclamarsea si mismo de esta manera. -Dije encogiendome de hombros.

Me dirijí a Walter.

-¿Por la fuerza?, nadie ha hablado de hacerlo por la fuerza, en todo caso lo hariamos democraticamente, estoy seguro de que a mas de medio reino se les a olvidado el nombre de Arshei, unas votaciones de vez en cuando no estarian del todo mal ¿no?

Comencé a reirme a carcajadas, era rematadamente estupido.
-¿Unas elecciones en el infierno? Jajajaja. -Tuve que parar un segundo para calmar mi risa. -El infierno es el lugar más anarquico y aristocratico de todos. Nadie querrá votar. Continuarán como hasta ahora, pegando a los que son más debiles y escondiendose de los que son más fuertes. Asi es como debe ser, no seas necio.

Despues de esas palabras no pude evitar recordar mi infancia en el infierno, mi rodtro se tornó serio y me dirijí a Walter.

-Tal vez siempre alla sido asi, pero al fin y al cabo ahora estamos en problemas, podriamos intentar cambiar eso, si el infierno es un lugar en el que los fuertes se meten con los déviles, ¿eso nos da derecho ami y a Asp a llegar y destruirlo todo?, creo que las cosas en el infierno no son como deverian ser y eso hay que cambiarlo.

Pasé a mirarle con curiosidad.
-Aja, y...¿Pretendes derrotar a todo el infierno para inculcarles tus ideas? Ni aunque os juntaseis Aspicious y tu podriais con todo el inframundo. Hay millones de demonios. Si hay un rey es porque ningún otro quiere serlo. Ese demonio a menudo esta sediento de poder, necesita que los demás le obedezcan y se hace respetar por la fuerza. Ni siquiera influye la linea de sangre.
Admitelo, demonio. El infernio no se puede convertir en la utopia que quieres que sea.