Atardecer nublado

Recorría el bosque en silencio, con una larga túnica negra,encapuchada. Llevaba una bolsa colgada de lado mientras observaba el bosque y el cielo. Hacia mucho tiempo que no veía una niebla como aquella,y parecía seguir aumentando,así que debía darme prisa.

Habia tenido un dia espantoso, pero no queria que ello me afectara, asi que decidí ir al bosque de la discordia a jugar un rato, al llegar alli encontré un pequeño río, y aproveché para descargar adrenalina, asi que comenzé a evaporar cada gota del río creando con ello una niebla cada vez mas densa.

-Realmente eres un ser muy molesto-comenté apoyada sobre un árbol cuando le encontré.

Esto es aburrido-pensé mirando el cielo mientras sobrevolaba el bosque casi tocando los árboles.

Estaba tan tranquila volando cuando de repente me di cuenta de que no veía el cielo, y me había metido en una densa niebla.

¡Maldita sea...! Tendré que descender-y bajé al suelo.

Noté la presencia de varias personas... no tenía mucha experiencia en leer auras, así que no sabía qué eran, pero me dirigí a ellas, para buscar a alguien que supiera por qué estaba esa niebla tan espesa concentrada en ese punto.

Cuando escuche eso, ni siquiera estaba atento de las auras que me rodeaban, y encima de haber tenido ese dia, alguien me estaba tocando las narices, asique me dí la vuelta malumorado para ver quien era, pero al ver a Neliel, no pude evitar sonreir un poco.

-¿Esque nunca vas a dejar de picarme Neliel?

Le dije con un tono sarcástico.

-Que extraño, muy malo debe ser lo que te ocurre para estar así-comenté observándole con un ápice de curiosidad.

Dejé de evaporar el agua y me acerqué a ella para poder hablar.

-Bah, ¿nunca has tenido un dia en el que piensas que te persigue la mala suerte?... Pues algo asi me pasa hoy.

Dije cabizbajo, pero al poco me incorporé sonrriendo.

-Aunque todo puede arreglarse con un poco de buena compañia ^^

Moví el aire muy fuerte para que se dispersara rápido la niebla, viendo así las dos personas que me imaginaba antes.

¿Are? ¡¡Hola!!-dije contenta de poder verles-Me llamo Elizabeth, y vosotros?-contesté sonriente con los ojos cerrados

Observé en silencio a la recién llegada ignorando el comentario de Wataru.
Este tipo de cosas me incomodaban, solo había salido en busca de unas plantas específicas,pero la niebla de Wataru lo había convertido en casi imposible.

-Mi nombre es Neliel-dije sonriente,como siempre.

Una chica apareció de pronto disipando la niebla con viento, con una sola mirada pude saber que era una princesa de los ángeles caidos y teneiendo en cuenta que conocia a los dos del reino, ella debia ser renegada.

-Y yo soy Wataru, mucho gusto.

Le dije invitandola con gestos a acercarse.

Me acerqué hacia ellos y sonreí levemente.

Encantada de conoceros-dije contenta-¿Qué tal, dando un paseo?-me dirigí hacia Wataru-¿Tú habías creado la niebla?

Dicho eso me acerqué a un árbol y apoyé mi espalda en él, de cara a mis dos nuevos conocidos, que parecían ser amigables.

Andaba por el bosque como hacía muchas veces, curando animalillos heridos y regenerándo plantas y arbustos, haciendo que se luciesen verdes y grandes. Sentí el aura de tres personas a unos metros a mi izquierda pero no quería interrumpir así que me propuse seguir mi camino sin dirigirles la palabra.

Unos escasos minutos después percibí el aura de una cuarta persona,un mago,para ser exactos. Me quede pensativa mirando en aquella dirección.

La chica se nos acercó y se quedó con nosotros, luego me preguntó si yo habia creado la niebla.

-Si, la creé yo, lo siento si ha molestado...

Lo cierto esque estaba mas atento a Neliel que a la pregunta de la chica.

-¿Estas pensando en atacarle solo por ser un hechicero?...

Le dije a Neliel refiriéndome a el aura que tambien estaba sintiendo.

-En que te afecta eso?-le pregunté.


Ademas,que mire en su dirección no quiere decir que quiera atacarle.

-¿Sabes? a veces no hace falta ser vampiro para saber lo que piensa la gente. Ademas, cuando estalle la guerra tendras tiempo de derrotar a quien te apetezca, ami no me afecta el echo de que luches con el, es mas, si lo haces me reiré un rato.

Le dije sonrriendo.

Les miré iquisitivo. Había escuchado parte de la conversación aunque algunas palabras o frases pasaron desapercibidas para mi oído. Ocurría lo de siempre, los prejuicios se anteponían a la razón y ya me quería atacar. Me agaché y seguí con mi propósito de sanar las especies vegetales de mi alrededor.

Me crucé de brazos y le miré con aparente tranquilidad.

-Sabes Wataru?-hice un gesto con la mano,y su boca empezó a cerrarse,como si estuviera fuertemente pegada.-siempre te las acabas empeñando para hacerme enfadar...deja de hablar por los demás como si supieras que están pensado hacer,por que demuestras mas aún todo lo que ignoras.


-Seguro que a mas de una persona le haría un buen favor si este hechizo fuera permanente-comenté sonriendo.

-lastima que no sea así..

En el fondo el comentario de Nel tenia razón... yo solo intentaba llevarme bien con todos, pero siempre la acababa cagando de alguna manera, y en este momento me sentia realmente estúpido, asi que al no poder decir nada, simplemente asumí sus palabras cabizbajo...

Me levanté tranquilo, como siempre, y miré a la extraña parejita. Levanté un poco la mano y la boca del muchacho comenzó a abrirse. Quería seguir con mi trabajo, pero creí que mi deber era acercarme y presentarme. Soy Éric, Éric Novotny. -dije ofreciendo la mano para saludarles, primero al demonio.

El hechicero se acercó y me liberó del conjuro, cosa que le agradecia mucho.

-Muchas gracias por ayudarme a volver a hablar.

Le tendí la mano sonrriendo.

-Mi nombre es Wataru, es un verdadero placer conocerte.

-Hola Éric,yo soy Neliel,y te agradecería que no anularas mis conjuros cuando te venga en gana sin una buena razón-dije en tono firme,pero agradable.

De nada, caballero demonio. -dije contestando a Wataru, que se le veía realmente agradecido. Miré a la bruja con una sonrisa. Tiene usted razón, pero yo creo que no es conveniente que vaya realizando conjuros a quien le venga en gana. -la dije amablemente, en ningún momento alcé la voz.

-No creo ser yo la que acaba de aparecer haciendo un conjuro sobre alguien,pero si crees estar en lo correcto,deberías deshacer toda la magia que has utilizado en los animales que te han venido en gana hasta ahora.

Que poco me gustaba tener que debatir algo como eso.

Ten por seguro que si el conjuro les hubiese causado algún daño los habría retirado hace tiempo. -me acerqué más a la bruja. Busca en tu alma Neliel, no eres tan mala como crees. Apostaría a que has hecho cosas buenas por alguien alguna vez. -la dije sonriendo.