Llevaba desde el atardecer sentada entre un par de árboles cercanos a las costas,en los que había tratado de dormir un poco,peor no había manera. Nunca había sentido tanta ira en mi interior,e incluso,empezaba a alterar mi aura.
Anocheció horas despues,tras lo que aproveché para sentarme en la orilla de sus playas cristalinas,rogando por calmarme de una vez.
Apreté con fuerza mi mano contra mi cabeza,cubriendo mi cara.