Buscando explicaciones (Natasha y Dean)

Salí precipitadamente del castillo esa misma noche, nunca se me habría ocurrido tener la idea de ir directamente al reino de los licantropos, aunque Ian y yo nos llevasemos bien nunca había ido a visitarle y mucho menos tenía en mente ir al reino que dirige Andrew, pero es que era un caso de vital urgencia.

El tema de Lucía se me estaba llendo de las manos, me ha costado horrores ocultarles a Luccie y Walter quien era el chico que casi hace que Lucía se suicidara. Aún no se por que le estaba protegiendo pero me iba a dar una muy buena explicación, además también quería preguntarle por Ryu lago me decía que había pasado con él y lo iba a averiguar.

Llegue al dichoso reino y como me esperaba los guardias que estaban guardando la puerta me miraron mal, no les culpaba estarían pensando que hacía yo aqui y mas a estas horas de la noche.

-Buenas noches- saludé con cortesía- Solicito la audiencia del joven Dean, no me ire de aqui hasta que venga.

Me cruce de brazos.

Los guardias gruñeron por lo bajo. A ningún hombre le gustaba que le llegaran con esa osadía, mucho menos a un licántropo y por parte de un vampiro.

-Baja los humos, vampira.-gruñó uno de los guardas, a la defensiva. El otro le dió un codazo mirandole mal y poniendose más firme.

-Ve a buscar al principe Dean-dijo el otro con una mirada amenazadora y llena de significado.

Yo acababa de llegar hacía poco menos de media hora del reino caido, la conversación con dana me había quitado un gran peso de encima, pero me había sumido en uno mucho peor.

El echo de que alguien pudiera estar controlando mi cuerpo me alarmaba, me alarmaba mucho, incluso me estaba atormentando. Tenía que tomarme las cosas con calma pero en esta situacion era algo dificil. Tan si quiera sabía si las especulaciones de dana y yo eran ciertas....

Un centinela me sacó de mis pensamientos.

-Señor... Una vampiresa está a las puetas del castillo, dice que quiere verte y que no se moverá de ahi hasta que no vayas-hizo una pausa adelantandose un paso-llamo a la guardia, señor?

Le miré unos segundos. ¿Quien era? ¿era lucia? si era asi quería hablar con ella, podía explicarselo... bueno... no, en realdiad no, pero quizas era un paso para que ella entendiera que yo no hice nada y que sentia todo aquello aun que no hubiera sido yo el autor.

-No. vuelve a tu puesto-dije mientras que sin perder tiempo me dirigí hasta las puertas del reino. Entonces no me encontré con lucia, como yo pensaba, sino con natasha, cosa que me sorprendió.

-Natasha... ¿que haces aqui?-era una pregunta estupida. Estaba cabreada claramente y despues de lo de antes era una tonteria preguntar algo así

Los guardias no parecia muy contentos con mi actitud. Pero me daba igual, estaba agotada tanto fisica como mental mente...pensaba que la noche no iba a acabar nunca. Me toque las sienes con impaciencia y cerre los ojos.

La voz de Dean me devolvio a la realidad. Podia "leer" su preocupacion y curiosidad. Seguramente estaba tan sorprendido de mi visita y mas a estas horas de la noche.

-¿que que hago aqui? Menuda has liado chaval. Necesito hablar contigo y en un lugar mas intimo

Mire con recelo a los guardias, no queria que nadie mas que Dean se enterase de todo.

Asentí en silencio y la acompañé hasta aquel nuevo lugar de piedra donde había llevaba a hablar unas horas atrás a lucia. Ya no iba a ver ese lugar con los mismos ojos, pero era alejado y allí no solía haber nadie.

Los guardias nos miraron marcharnos, simplemente se quedaron vigilando su puesto, como tenían que hacer.

La invité con la mano a que se sentara, acto seguido me senté yo también. Habia entre nosotros una pequeña disancia, pero era logico.

-Vale, ¿tienes algo que decirme?-esa frase no fue con ningún mal tono, en realidad era más bien en tono resignado, estaba cansado de tanto pensar y todo lo que había pasado esa noche no era un plato que me agradara.

Dean parecio entenderlo y me llevo a un sitio mas tranquilo. Era un sitio bastante hermoso lleno de bancos de piedra. El joven licantropo me hizo una seña con la mano que me indico que sentase en el banco y eso hice. Espere a que los dos nos sentasemos para comenzar a hablar.

-Dean, de verdad que por mas que intento entenderte no consigo lograrlo- dije en un tono trsite- con lo buen chico que me pareciste ese dia...¿Pero tu no estabas saliendo con Katherina? ¿A que diablos juegas? Vas a dos bandas o que

Necesitaba una buena explicacion para todo esto.

Era un alivio que al menos viniera de buenas. Entonces dijo algo que me conmocionó. ¿¿Cómo sabia lo mio con katerina??

-Co...¿cómo sabes lo mio con katerina?-era una pregunta que retumbaba en mi cabeza en esos instantes. Quizaás se lo hubiera dicho Lucia... y si Lucia se lo podía haber dicho... quizás... quizas también Luccie y Walter lo supieran. ¡Mi padre podría enterarse! Palidecí.

Entonces traté de tranquilizarme, tenía que explicarme, yo no había hecho nada... pero seguramente no me creeria. Al fin y al cabo yo era un licántropo y Lucia una vampiresa.

-Es muy probable que no me creas, por no decir que es casi seguro. Pero yo no hice nada. Yo... yo solo quiero a Katerina. Siempre que lucía se me insinuaba la dejaba bien claro que no quería nada con ella y no haría nada mucho menos estando con Katerina. Soy un hombre decente, si mi corazón se encomienda a una persona no tiene ojos para otras, mucho menos manos. Además, lucía es mi prima.-todo lo que dije era la pura verdad. Recordaba todas y cada una de las veces que Lucia se me insinuó y yo la rechazé, aun que también recordaba alguna vez que llegué a ponerme minimamente celoso por que otra persona la tratara de cortejar, pero eso no tenía nada que ver. Suspiré y la miré a los ojos casi a modo de suplica-Tienes que creerme... mirá, he hablado con Dana y juntos empezamos a pensar qué podría haber pasado. No cero que Lucía mienta, pero yo tampoco miento.

Empecé a pensar entonces en todo lo que había hablado con Dana. De las perdidas de memorias y la posibilidad de que algo o alguien se haya metido en mi cuerpo escondiendose en la zona donde habita mi lobo interno. Pero aun seguía dándole vueltas al cómo

Espere tranquilamente a que terminase de hablar. Pude leer que no le faltaba verdad en lo que decia, pero por otro lado los pensamientos de Lucia eran totalmente sinceros. Se acordase o no, el se habia acostado con Lucia. Algo raro estaba pasando y teniamos que averiguarlo antes de que Walter o el mismisimo Andrew descubriesen la verdad.

-se lo tuyo con Katherina por que lo he leido en tu mente al igual que lo he leido antes tambien en la mente de Lucia. Mira no se que esta pasando aqui pero puedo asegurarte que Lucia no ha mentido en ningun momento. Tu te has acostado con Lucia y no se que paso despues, pero esa es la verdad. ¿Sabes que Lucia ha estado a punto de suicidarse? No se que hubiese pasado si no hubiera llegado a tiempo. Lucia ha cambiado, Dean ya no es la que era antes...eso sin contar con que Walter y Luccie buscan explicaciones y yo he tenido que ocultar que eras tu...menudo lio...

La escuché, mirandola perplejo. Cuando dijo que había leido mi mente me sentí mal, me sentí usurpado, y ya tenía bastante creyendo que alguien controlaba mi cuerpo cuando quería.
Suspiré, "mirándolo por el lado positivo ha tenido que escucharme y saber que no miento, entonces".

Escuché lo del suicidio y abrí la boca, muy sorprendido y preocupado a la vez.

-Pero... ¿Lucia está bien?. ¿Cómo que ha cambiado? ¿Por qué ha querido suicidarse?-todo era muy estúpido a mi parecer. ¿Era idiota o que la pasaba?-Pero yo no he hecho nada... no es mi culpa. Aun asi no puedo evitar sentirme culpable...-esto era demasiado... agaché la cabeza, sujetándomela, para levantarla al momento-No se lo que está pasando, pero, independientemente de que yo... o alguien con mi aspecto o mi cuerpo se haya acostado con ella y la haya dicho que la quiere y no se que más... Eso no es lo más grave, lo más grave es lo que podría hacer... Hay mucha gente que confía en mi, Natasha... no se que hacer, no quiero dañar a nadie...-volvi a suspirar, angustiado-Hablé con Dana y creemos que algo... o alguien se ha logrado meter dentro de mi y... creemos que está intentando liar todo. Me siento como si me hubieran robado mi identidad, mi intimidad hubiera quedado obsoleta. ¿De qué puedo fiarme, sino puedo hacerlo de mi mismo... de lo que hago o dejo de hacer?

Di un largo suspiro viendo las reacciones de Dean me daba cuenta de que de verdad se sentía muy afligido con todo lo que estaba pasando. Pero en esta historia había algunos cabos sueltos. Cabos que no era capaz de atar.

-Pues si Lucía ha cambiado, ya no es la chica dulce e inocente que era antes ahora es mas desconfiada y mucho mas fría y distante. Por supuesto ella no me ha dicho nada lo he averiguado todo yo leyendo su mente y lo he que he leido es que ella esta profundamente enamorada de tí, mas de lo que te puedas llegar a imaginar pero cuando ya lo daba todo por perdido, vas y te acuestas con ella y no sólo eso la dices que la quieres....ella se hace ilusiones y cuando te va a ver se encuentra con la desagradable sorpresa, fue al castillo y ahi la vi la segui y empezamos a saltar hasta que practicamente estaba a punto de exponerse al Sol, la salve por los pelos y la volví a llevar al castillo. Walter esta que echa humo, y claro yo no le he dicho nada, al menos quería hablar contigo antes y evitar una guerra. No se que pasará si Luccie y Walter se llegan a enterar de que les he mentido se me caera el pelo, pero tenía que venir a verte.

Me tome una pausa y escuche lo que parecía una teoría de lo que podría haber pasado.

-Todo esto es muy raro...¿estas seguro que no te acuerdas de nada?

La escuché, atento, pero no por ello menos afligido. Todo lo que me contaba era horrible y en realidad solo me preocupaba que Walter y Luccie se enteraran por que podría ocasionar muchos problemas a mi padre.

Medité, cabizbajo.

-Se que me empecé a percatar de que algo pasaba hace algunas semanas, cuando vi que de pronto mi pelaje había cambiado drasticamente de color. Ahora es negro y eso es muy raro en los licántropos ya que somos seres de luz, no es un color normal. De echo yo me alarmé abstante, pero mi padre y Lucia no le dieron mucha importancia.-hice una pequeña pausa, tratando de recordar-No se... la última vez que me transformé aparte de ese día que me di cuenta del color fue hace ya bastante. Poco antes de lo que le pasó a Luccie.

Me quede pensativa escuchando sus palabras. Y no le faltaba razón, en todo esto había algo muy raro.

-Sí eso que dices es muy raro, el pelaje de los licántropos suele ser mas claro y si ahora lo tienes mas oscuro eso no es nada bueno...puede que algo malo te este pasando y no seas consciente de ello- me llevé un mano a mi mentón- y si una parte de tí oculta esta despertando ahora...una parte mala de tí, mas oscura...¿desde cuando dices que te sucede esto?

No sabía si esa podría ser la razón pero teníamos que averiguarlo.

Pensé

-Esa idea la barajamos Dana y yo... De que igual "algo" se había introducido dentro de mi. Pensamos en los Asters pero ellos solo pueden hacerlo si dominan todo el cuerpo y la persona que vivia antes en él no estaría ya. Sin embargo, pensamos también en que mi lobo pudo haber despertado, pero es pura irracionalidad, todos los licantropos lo tenemos y una vez que lo sabemos dominar es muy muy dificil que este vuelva a apoderarse de notros-hice otra pausa-El caso, es que Dana dijo que podía haber algo que se metiera en ese nodulo que tiene el lobo para si mismo y pudiera manejarme haciendome perder la consciencia. Pero no se cómo se me pudo haber introducido eso, no he notado nada salvo lo del pelo negro-callé y pensé en su pregunta, tratando de recordar-Pues no se bien cuando, por que yo me sentía normal. Pero cuando me di cuenta de lo de mi pelaje no me había vuelto a transformar desde... ya te digo, antes de que le pasara eso a Luccie.

No había caido hasta ahora en la cuenta de que le había pasado algo a Luccie. Nadie me ha dicho nada al respecto, pero tampoco han tenido oportunidad...ultimamente no paro de un sitio a otro intentando localizar a Ryu, hace ya un par de semanas que se fue del castillo y aún no ha vuelto. Su aura es casi imperceptible y no quiero pensar que le haya podido suceder algo malo. Todavía no quería ponerme en lo peor.

-Espera, has dicho antes de que le pasara eso a Luccie...¿que le ha sucedido? he estado asusente varios días del castillo y no me he podido informar de ello.

Medite tratando de recordalo bien todo.

-pues... no se explixarlo bien. Nos encontramos cn la inquisicion... luego empezo a ocurrirla algo raro. Era pura oscuridad. Decian que tenia a una diosa dentro. La lleve al reino y mi padre utilizo un colgante angelical para detener esa oscuridad y volverla en si. Aun que eso es lo que me. Ontaron yo cuando llegue al reino la intente sujeetar pero me dio un golpe contundente y quede inconsciente. Despues dijeron que me levante y me fui y ami cuarto, que estaba bien, pero no me acuerdo.

-Vaya no tenía ni idea de que el sello de Luccie se volviese abrir, pero bueno no hay mucho de lo que preocuparse ella parece que se ha recuperado y eso es lo que importa. Además ahora creo que lo importante es descubrir que es lo que ha podido pasar con tu cuerpo...por que si alguien lo ha poseido y no te has dado cuenta eso puede ser peligroso. Además...creo que el estado de Lucía de algún moodo tiene que ver también con mi hijo...tu la conocías mas que a nadie...dime...¿había alguna relación mas allá de la amistad entre Lucía y Ryu?

Le mire a los ojos.

Llegó a mis pensamientos una luz, una iluminación voraz.
La maldición de Luccie.

-Luccie, lucie me golpeó cuando estaba... poseída, o como los dioses quieran que estuviese-dije, alzando bastante la voz-¿Puede ser? ¿puede ser que esa oscuridad... me la pasara? aun asi... esa oscuridad tiene conciencia, ¿puede ser que tenga consciencia y me esté controlando para sus fines maléficos?-hice una pausa-No creo que luccie me controle... sinceramente no lo creo. No haría daño a su hija, imagino... asi que... tiene que ser un ente independiente. Pero creo que puedo afirmar que fue ahi cuando lo capte, por que no suceden cosas raras desde entonces.

hice una pausa, meditando sobre Ryu y lucia.

-Lucia nunca me habló de él más cuando un día me los encontré en el bosque a ambos. Estuvimos una tarde juntos pero nada más. No se nada más de él y si tenían relación amorosa, lo ignoro. Siento no serte de ayuda en eso, Natasha.

Podía oler la preocupación maternal de natasha y me sentía mal por ella, quería ayudarla pero poco sabía yo de ese muchacho.

Todo este asunto se estaba volviendo mas raro y a cada pista que me daba Dean mas se estaban enredando las cosas.

-Todo esto se pone cada vez mas difícil pero según lo que me has contado es muy posible que inconscientemente Luccie te haya inducido oscuridad en tu cuerpo, aunque no puedo decírtelo a ciencia cierta.

Luego me contó que no sabía nada de lo que podría haber pasado entre Ryu y Lucía, en el fondo me imaginaba que no pero al menos tenía que intentarlo.

-Ya veo, no te preocupes Dean...el caso es que ...no tengo pruebas de ello pero se que Lucía y Ryu han mantenido relaciones sexuales.

Quedé muy pensativo, planteando las posibilidades de que Luccie me hubieran incidido parte de su oscuridad.

Pero, eso tendría que estar bien sellado en ella, no puede desprenderse así por que si. Al igual de que yo tengo que controlar esto y ahora que lo sabía tenía que hacer algo para remediarlo, tenía que ir a hablar ya con mi padre.

Entonces las ultimas palabras que mencionó Natasha me sacaron de mi ensimismamiento.

"¿Que qué?" pensé.

-¿Relaciones sexuales?-pregunté. Me alivió comprobar que no me afectaba aquello, como en otras ocasiones pudo hacerlo. Eso demostraba que ya nada o casi nada sentía por Lucia. Me aliviaba mucho haber descubierto eso, solo me demostraba que había sido una estupidez juvenil aquello.
No obstante pensamientos de desaprobación pasaron por mi cabeza. Lucía estaba teniendo una adolescencia descontrolada. Que cediera su cuerpo a mi... o bueno... a quien creía ser yo, con lo enamorada que decía estar, era una cosa. ¿Pero hacerlo así por que si con otras personas? era algo que no aprobaba, ¿quien sabe con quien más habría compartido el lecho.
Aparté rápidamente esos pensamientos de la cabeza, no tenía ningún derecho a tenerlos ni a juzgarla, al fin y al cabo era libre. Pero no dejaba de desaprobar rotundamente aquel comportamiento fulanero.

-No tengo idea de lo que me hablas.-la dije con sinceridad, en ningún momento vi algo que me llevara a pensar que ellos estaban juntos... al menos no tan juntos.-Siento no poder ayudarte con eso, ni con el tema de tu hijo