me encoji de hombros, siempre podia robar una panaderia o algun bar, bastaba con un simple golpe en el cristal y listo pero bueno, no queria mancharme en unico traje decente que me quedaba por una simple cena-te acompaño pues a casa, quieres ir volando o prefieres andar?- me acerque a ella a una distancia prudencial, lo suficientemente lejos para no volver al mismo juego de antes pero cerca como para no ser descortes.
-no me importaria verte enfadada, debes de ser divertida- sonrei y empece a andar hacia las puertas de la ciudadela