Llegando al infierno (Libre)

Después de un largo viaje esta al fin cerca de una de las puertas al infierno que tanto quería encontrar, el lugar donde vivían los demonios el lugar donde habitaban ellos al fin y acabo yo era uno de ellos cuando al fin llegue a ese gran portal, era como si algo familiar como si este lugar ya lo conociera , de repente me comenzaron a dar fuertes dolores de cabeza y caí en el piso de rodillas mientras con ambas manos sostenía mi cabeza, mientras oía un zumbido horrible , era algo que no podía soportar de repente varias imágenes comenzaron a venir a mí en formas de flash, fuego, oscuridad, varias cosas comenzar a entrar a mi cabeza mientras comenzaba retorcerme de dolor en el piso y comenzaba a sudar por la presión que sentía en mi cabeza como si sintiera que fuera a explotar.

“Calma, calma no pasa nada solo son imágenes no te pueden hacer nada”.

Comencé a ordenar mis ideas mientras comencé a levantarme lentamente mientras respiraba hondamente, tenía que relajarme si no todas estas ideas me pondrían mal y no quería cometer ninguna estupidez por ahora, así que comencé a caminar hacia ese portal mientras el viento comenzó a soplar contra mi cabello y mi ropa, estaba listo para entrar y encontrar la respuesta sea lo que sea que hubiera ahí lo enfrentaría ya que ahí estaba mi pasado y mi futuro.


Comencé a caminar lentamente hacia el portal mientras trabajaba algo de saliva para darme valor espero que ninguno de estos demonios me vaya a matar, no sabía nada de ellos no sabía si eran violentos ni nada, pare en seco a un paso de entrar al portal tenía miedo una parte mía tenía mucho miedo, pero otra parte mía sabía que al entrar ahí podría encontrar la respuesta a lo que siempre quise obtener.


Así que con todo mi valor y cerrando mis ojos entre al portal, cuando volví a abrí a mis ojos me quede sorprendido por lo que vi oscuridad y fuego , todo era como lo que investigue comencé a sentir muchas auras así que decidí, disminuir la mía para que nadie se percatara de la mía no quería llamar la atención comencé a caminar lentamente mientras veía todo el fuego que había en el infierno, no sabía de nadie solo estaba yo solo , tenía que seguir caminando por que si me quedaba quito de seguro algo malo me pasaría.


“Tengo que encontrar a otro demonio que me ayude o que mínimo me diga que hacer, pero por lo que se los demonios eran seres bajos y mentirosos no lo sabía lo único que quería es encontrar la respuesta, pero por lo poco que sabía no podía confiar en nadie ni nada”.

Me apetecía dar un paseo por el reino, pues hacía mucho tiempo que no lo hacía. La mayoría de las veces acababa viajando a Yggdrasil, ya que sus parajes eran realmente más acogedores. Decidí suprimir mi aura, de modo que nadie se percatara de mi presencia, o al menos de la magnitud de la misma.

Volaba con suma tranquilidad cuando percibí a un muchacho que caminaba preocupado. Nunca le habia visto y su aura, aunque reducida, me hacía ver que estaba muy nervioso.

Aquella revelación me iluminó una sonrisa, podía pasar un buen rato a costa del novato, y en cierto modo le serviría para descubrir lo que era de verdad el infierno...

Me acerqué a él con el aura totalmente suprimida y una vez en el suelo recogí mis alas.

- Hola, ¿acaso eres nuevo por aquí? - pregunté en un tono informal y totalmente opuesto al que era habitual en mí.

“Que hare los demonios me comerán vivo, no puedo confiar en ninguno de estos seres tengo que seguir caminando”.

Sumido en mis pensamientos de que hacer, un ser que nunca había visto en mi vida llego del cielo, recogiendo sus alas una vez en el suelo, era una persona de complexión media, su cabello era largo y cenizo , su cara demostraba experiencia podría haberme visto y sería un blanco fácil para él.

Intente guardar mi nerviosismo ante él ya que un demonio me podría usar como su juguete, quise examinarlo como habilidad de leer las auras de las personas, pero era algo raro parecía que su aura estaba suprimida o ni siquiera existía, se me hizo muy raro no podía confiar en alguien que tuviera su aura en este nivel tan bajo eso significaba solamente una cosa que me quería ocultar sus intenciones, lo mire fijamente, mientras ponía mi izquierda sobre mi cadera para verlo de manera informal.

-Me llamo Auron, nunca había estado en esta parte del infierno quizás por eso no me conoces-le decía con uno tono de voz algo tosco y desconfiado, no podía dejar que nadie jugara conmigo, volví a poner mi mano en posición normal mientras di una suave exhalación de aire hacia mi cabello para soplarlo, tenía que calmarme más si no este demonio me usaría como su juguete.

-¿Por qué ocultas tu aura? –decía mientras caminaba hacia el lentamente y quede de frente al yo era más pequeño aunque él no fuera tan alto yo seguía teniendo la complexión de un adolecente, lo mire a su ojos con una gran determinación pero lo que encontré en esa mirada era poder, experiencia.-Solo si quieres ocultarme tu intenciones harías eso-decía algo desconfiado de él. Una parte mía tenía mucho miedo pero otra parte mía no se tenía que dejar convencer por nada ya que si me dejaba caer en una trampa podría lamentarlo toda mi vida.

Me quede viéndolo fijamente a ese hombre, o más bien demonio ya que ningún hombre podría pisar esta tierra o si llegaba a pisarla de seguro no duraría nada, y por lo que había visto antes era un demonio tenía que tener cuidado de que podría pasar, no iba a bajar la guardia en ningún momento, tenía que ser cuidadoso de la intención de este hombre.

“Calma no vayas a cometer ninguna estupidez Auron el parece ser mucho mas poderoso que tu así que no lo vayas a provocar.”

En mi interior comencé a reírme a carcajada limpia, mas mi semblante no varió un ápice. Realmente era un novato, un recién nacido, se podría decir, pues aquella actitud revelaba que no había pisado en mucho tiempo el infierno, si es que alguna vez lo había hecho.

- Quizá deba ser yo el que se pregunte qué hace un desconocido como tú con el aura suprimida en este reino - le respondí arqueando ligeramente mi ceja derecha -. Desde luego yo, que soy autóctono de aquí, no tengo que dar explicaciones por mostrar o dejar de mostrar la mía.

Bien era cierto que aquel individuo despertó en mí una acuciante curiosidad. Realmente era extraño que un joven de su apariencia aparentara estar tan sumamente perdido. No me hizo falta pensar mucho para deducir que probablemente había pasado toda su infancia lejos del Infierno, lo cual no era demasiado habitual.

- Así que soy yo el que te interroga aquí. ¿Qué haces en este lugar, Auron, y por qué ocultas tu presencia? - pregunté insidiosamente. Por el momento no quería intimidarle, pero era evidente que no podía actuar de otra manera.

Comencé a ponerme más nervioso cuando aquel hombre mayor se comenzó a dar cuenta de que mis cuartadas era n falsas parecía ser que conocía cada rincón del infierno o en el peor de los caso que había pasado mucho tiempo de su vida aquí , tenía razón ese hombre yo era un recién llegado maldita sea no quería llamar la atención hasta encontrar alguna respuesta de que hacer en este lugar pero parecía que mi cuartada no había funcionado, tenía que responderle algo rápido antes que comenzara a sospechar así que volví a verlo fijamente y sin basilar.


-Soy Auron un demonio, suprimí mi aura ya que es un muy densa y no me gusta llamar la atención de otras personas, o demonios-decía mientras lo veía algo serio ya que no me gustaba que comenzara a saber de lo que era yo un demonio sin memoria, podría ser fácilmente usado por cualquiera si me descuidaba algo, cruce mis brazos mientras en mi cara hacia una mueca de pensamiento , mis labios cerrados y una ceja inclinada mientras pensaba un poco en que sería mi siguiente paso es obvio que no serviría huir de este demonio, ni tampoco hacer nada contra él ya que al parecer tenía mucha más experiencia, después di un suspiro y quede en una posición jorobada , volví a erguirme y a ver a los ojos de aquel hombre.


-Con que uno con el infierno eh? Para que sirve mentirte entonces, bueno no hay otro demonio así que tendré que decirte… -decía mientras duba si decirle la verdad aquel hombre pero no me quedaba otra más que hacerlo , si no de seguro saldría perdiendo no serviría de nada ocultar mi aura así que la subí a su nivel normal .


Bueno era hora de decirle la verdad –Yo eh estado fuera del infierno durante toda mi infancia o incluso más, la única pista que tengo es esta-le decía algo inseguro a ese hombre pero no me quedaba de otra estaba acorralado por lo que parecía un experto en el infierno con mi mano derecha comencé a levantar mi manga izquierda para que quedar al descubierto el tatuaje que decía “Auron” el nombre que yo había tomado como mío.

–Según yo tengo 18 años pero sé que los demonios tiene una gran longevidad así que no sabría de responderte mi edad actual, así que pro esa razón nunca me has visto o si una vez te llegue a conocer de seguro fue antes de que me quedara sin recuerdos no lo sé exactamente yo solo vine para encontrar respuestas-le decía mientras bajaba la manga de mi brazo izquierdo no me gustaba ese tatuaje mucho era como si me hubieran marcado con ese nombre.

Puse mi mano sobre mi barbilla mientras bajaba algo la mirada, no sabía qué hacer y ahora que le había contado la verdad a ese hombre no sabía exactamente que iba a pasar quizás ahora iba a jugar conmigo, o quizás peor intentar matarme pero de todas maneras si seguía mintiendo lo mismo iba a suceder, no me gustaba pensar mucho estas cosas ya que me estresaba.

“Bueno Auron no hay vuelta ya le dijiste la verdad ah este hombre ahora tienes que aceptar las consecuencias de lo que vaya a pasar”.

Todavía tenía mi mano puesta sobre mi barbilla mientras, mis pensamientos me comenzaban a inundar pero tenía que tener calma para que no salga perdiendo mínimo salir bien de esta situación.

Volví a arquear mi ceja, esta vez aún más marcada. Acto seguido solté una risita tenue aunque quizá algo punzante y ofensiva. Como suponía, el pobre niño no había visitado nunca el Infierno.

Pese a ello, consideré que no era necesario hacer más burla de su situación, pues podía haberse debido a una causa de seriedad mayor. Sus progenitores debían tener alguna razón para abandonar a su pequeño vástago en el mundo terrenal. O quizá no fuera eso, si no que lo que le sucedía era que tenía amnesia...

En cualquier caso, ofrecí mi mano a Auron en señal de cordialidad. Mi deber en cualquier situación era velar por el reino y por todos los habitantes de él.

- Bienvenido seas entonces, Auron. Espero que aquí te encuentres a gusto entre los tuyos - le dije en un tono afable aunque sin perder el matiz amenazante característico en mi voz -. Yo soy Aspicious Oicilpus, un placer.

Estaba esperando lo peor de este demonio que se aprovechara de mi o algo peor, vi que levanto la ceja un poco más que la anterior vez, después de eso soltó una pequeña risa me enoje un poco con el pero me contuve apretando mi puño y respirando levemente ese hombre era mucho más fuerte y listo que yo bueno más bien demonio, era el primer demonio que conocía en todo mi existencia nunca había estado con uno en mi vida hasta apenas , tenía muchas dudas y quizás este fuera el hombre que me pudiera responder estas preguntas que me generaba, en mi cabeza.

Estaba sumido en mis pensamientos cuando de repente extendió su mano, en ese momento me quede pensando que hacer ya que pensaba que él me iba a atacar o se iba a provechar de mi porque no sabía nada de lo que estaba en el infierno , era la primera vez que tenía contacto directo con uno de ellos , comencé a examinar mi mano mientras la acercaba lentamente mientras temblaba lentamente algo nervioso ya que esta situación era algo rara para mi estreche su mano en señal de cordialidad y algo de respeto ya que él era un demonio con mucha más experiencia que la mía.

Des estreche mi mano con él para oír su nombre Aspicious Oicilpus, con que ese era el nombre de este demonio no sonaba tan mal yo siempre me eh preguntado si el nombre que tenía era el mío, en ese momento me puse a rascar un poco la cabeza ya que no sabía qué hacer , de repente varios zumbidos comenzaron a venir a mi cabeza ,varias voces , varias imágenes mientras intentaba no comenzar a mostrar señales de dolor , tenía que calmarme tenía que estar en paz no sabía que significaba eso era como flashes que venían a mi cabeza , eso hizo que me quedara un rato quiero mientras sostenía mi cabeza y c erraba ambos ojos eso duro más o menos un minuto.

De repente los dolores dejaron de pasar y volví a mi posición normal mientras le sonreír a Aspicious, no me gustaba preocupar a la gente así que comencé a pensar en mis palabras para hablar con él.

-Muchas gracias Señor Aspicious, una pregunta ¿Cuál es tu función aquí en el infierno? –le pregunte algo curioso a este demonio ya que no sabía que hacia aquí –¿No conoces a otro demonio con mi nombre? o ¿no sabes algo de mí no me conoces?-comencé a preguntarle varias cosas ya que quería saber varias cosas de mí y parecía que él era el indicado para saberlo pero después me di cuenta que podría ser algo incómodo, así que pare mi ronda de preguntas-Perdón Aspicious por molestar es que tengo varias dudas-decía calmándome algo.

“Espero no haberla arruinado quiero saber más de mí y el parece que podría saber varias cosas de los demonios”.

En cierta medida era divertido conocer a novatos. Por un lado era gratificante mostrarles la inmensidad del mundo, aunque por otra parte podía resultar cansino si te consumían más tiempo del que estás dispuesto a malgastar. Por el momento vería hasta dónde llegaría la situación, así que decidí seguir el juego.

- Soy uno de los mayores eruditos que han pisado este reino - repuse con calma -. He conocido a muchos demonios a lo largo de mi vida y con muy diversos nombres. Por ello Auron puede haber sido uno de ellos.

Después volví a soltar una risita un tanto burlona, pero sin ánimo de ofender.

- Es posible que en la biblioteca del Templo Infernal encuentres algo de información que te sea útil. En cualquier caso... Cuéntame Auron. ¿Dónde has estado todo este tiempo? ¿Y por qué motivo vuelves al Infierno ahora? - la pregunta iba cargada de una cierta malicia, pues yo sabía perfectamente que ese tipo de demonio había tenido una infancia dura.

Parecía ser que Aspicious era un demonio bastante experimentado , no solo las palabras que decían me demostraban eso si no su experiencia en sus ojos se reflejaba , algo que no había visto hace varios años, experiencia , sabiduría , poder eso era lo que veía cuando lo miraba a sus ojos una parte mía hacia que lo comenzara a respetar como si algo en mi dijera que era una persona muy importante, agite mi cabeza para quitarme esas ideas no me gustaba pensar en cosas complicadas.

De repente oí que había conocido a muchos demonios atreves de su vida, yo nunca había tenido contacto con ningún tipo de demonio hasta ahora, comencé a rascarme la cabeza un poco por tantos pensamientos que venían a mí, él podría haber conocido a mis padres pero yo no sabía ni cómo eran solamente, sabía que era un demonio y quería encontrar respuestas a mi pasado.

De repente me pregunto de mi lugar de origen de por qué había venido a este lugar, respondí primero con una risa que mostraba algo de tristeza, odiaba hablar de los malos recuerdos pero a este demonio no se le podía engañar ya lo había intentado y no función hace que iba a responder con la mayor sinceridad que pudiera, di una leve respiro para comenzar a hablar.

-Fui criado por un humano hace, 14 años desperté en medio de lo que parecía una batalla ya que había fuego y cuerpos por donde quiere la única pista que tenía era este tatuaje, no sé qué significa ni de donde proviene-le decía algo nervioso me dolía mucho recordar eso –Un humano llamado Shu me acogió , me enseño varias cosas humanas pero un día fue asesinado, fue el día que saque mi verdadera forma-decía mientras una densa capa de aura de color negro me comenzó a rodear para convertirme en mi verdadera forma –Esa vez fue la primera vez que oí la palabra demonio ya que sus atacantes me vieron convertirme en uno y yo los mate, como las ratas que eran un logre escapar y huí del pueblo donde fui criado-decía recordando todos esos recuerdos que venían a mi mente –Comencé a investigar de los demonios, me entre de una de las puertas del infierno, sabía que para saber más de mi pasado tenía que venir aquí , quizás mis padres estén muertos o quizás no, yo que se no tengo esperanzas de encontrarlos-decía mientras bajaba la mirada –Vine al infierno a buscar respuestas, también sé que de aquí venimos los demonios por que no también establecerme –decía intentando recuperar mi energía –También quiero aprender más cosa de los demonios.-decía viéndolo a los ojos , era algo raro estar con mi verdadera forma ya que nadie casi había visto esto.

Le había dado respuesta a sus preguntas pero eso me puso algo triste porque odiaba recordar todo el dolor que había tenido antes, pero si quería ayuda de alguien sentía que él era el demonio adecuada para esto quizás el, me podría ayudar a tener las respuestas que yo quería.

Escuché atentamente a la historia del demonio. Al parecer no había tenido una vida fácil, pero, ¿quién la tenía en este mundo? Me resultaba curiosa su situación. Alguien o algo debió haberlo enviado a Yggdrasil, borrando su memoria, quizá a modo de experimento. Otra posibilidad es que tuviera amnesia. En cualquier caso resultaba interesante averiguar de qué se trataba.

- ¿No te has planteado la idea de que no eres un demonio? Podría ser que fueras algo totalmente distinto, y te han hecho creer que aquí encontrarías a los de tu raza... - respondí pícaro tras observar como mostraba su forma y su aura densa - De hecho, por lo que me cuentas podría ser algo bastante factible...

De repente en el demonio llamado Aspicious digo una pregunta que siempre me había planteado realmente era demonio yo, siempre era algo que me preguntaba eso hizo que bajara un poco la mirada, mientras comencé a examinar mi manos y apretarlas pensando en que era, pero algo en mi me decía que era demonio, como un instinto, eso me hizo estar seguro de lo que era yo.

-Es como si le preguntaras a una ave hacia donde migrar en el invierno o a un lobo como cazar.-decía viendo al demonio a sus ojos – es instinto, yo sé lo que soy, se que soy un demonio-decía viéndolo a los ojos con más seguridad que antes , yo no podía asegurar que lo era pero yo sabía que lo era sabía que era un demonio.

Me pare frente a él con un valor que inundaba mis ojos – Yo soy Auron, un demonio se lo que soy y vengo a encontrar respuestas Aspicious , yo no me rendiré nunca, aunque consuma toda mi vida buscando las respuestas de mi pasado, aunque mis padres resulten ser algo peor de lo que me imagino yo no dejare de buscar esas respuestas-decía viéndolo con valor.

Pensaba en todo lo que había vivido, todo lo que me había hecho así , pero eso no importaba eso hizo que sacar una pequeña sonrisa , porque en vez de dudar de que era yo , solamente reforzaba lo que yo creía , eso hizo que sonriera , que aceptara esto que era yo aunque tuviera miedo de ser un demonio yo lo era.

-Aspicious , quiero saber más de los demonios, quiero ser más fuerte , quiero saber más de mí mismo, tu pareces una persona muy sabia , tus ojos dicen que eres fuerte, tu ojos demuestran experiencia, y yo quiero aprender -decía mientras volteaba para verlo con una sonrisa y una mirada determinación ,no iba a dejar que nada me detuviera y quería saber más de mi verdadero yo , sabía que todavía no sabía muchas cosas de los demonios y algo me decía que Aspicious me podría ayudar a saber más del o que yo quería saber .

Solté una breve risa entre dientes. Al menos sabía a lo que venía, lo cual ya de por sí era un avance. Aquel demonio me recordó enormemente a mi antiguo príncipe, Wataru, cuando vino a visitarme por primera vez. Por supuesto, las diferencias eran más que evidentes, pero tenía la misma determinación, eso pude observarlo en sus ojos.

- Bien, bien... En ese caso, lo mejor que puedes hacer es viajar por todo el Infierno. Conocerás a más demonios, y quién sabe - respondí entrecerrando los ojos -, quizá encuentras a los padres que te abandonaron.

Acto seguido desplegué mis alas y mecí mi pelo suavemente.

- Te aconsejo que vayas a la biblioteca del Templo Infernal, allí es donde más información podrás encontrar. Aprenderás la historia de los demonios y conocerás a más eruditos que puedan ayudarte. También tienes la zona de entrenamiento, si lo que quieres es pulir tus poderes.

Acto seguido alcé el vuelo y antes de dirigirme hacia el Templo pronuncié unas últimas palabras.

- Si quieres ser mi aprendiz lo primero que has de saber es que yo soy el monarca de este reino. No toleraré ningún fracaso. Cuando te encuentres preparado visítame en el Templo. Eso es todo.

Escuchaba las palabras Aspicius mientras le prestaba atención tenía razón , tenía que viajar más conocer a las diferentes criaturas , conocer a los ángeles , buscar más demonios , buscar experiencia ,buscar nuevas aventuras tenía que saber que pasaba en el mundo la situaciones que pasaban los demonios había estado ausente unos cuantos años , pero no dejaría que esto fuera un estorbo , mi determinación estaba creciendo cada vez más y más.

Solo hice algo en ese momento asentí la cabeza con respeto hacia este sabio demonio, era como si hubiera llegado en el momento de mayor necesidad para mí, como si el hubiera sabido que al encontrarme, también oí de ir a la biblioteca del templo infernal para aprender más de los demonios, comencé a pensar un poco mi siguiente paso , lo primero que quería hacer era ganar mas experiencia en el mundo real , buscando mas especie, haciéndolo aprendería mas .

De repente sus palabras hicieron que abriera rápidamente los ojos , mientras lo observaba el era, el monarca del infierno entonces eso significaba que todo este tiempo estaba hablando con el rey de los demonios , solo lo vi ascender mientras volé rápidamente para alcanzarlo y verlo a los ojos , con una mirada de determinación.

-Yo aprende, quiero ser tu aprendiz quiero ser mas fuerte saber de mi pasado no me rendiré aunque todo sea difícil no me rendiré, la próximas vez que me veas sere mas útil y sere mas fuerte te lo juro-decía viéndolo a los ojos mientras pensaba en que haría en estos momentos si irme, o quedarme en el infierno

Asentí pacientemente y con suavidad.

- No espero menos - comenté con una sutil media sonrisa -. Ahora haz lo que te he dicho, y no vuelvas a mí hasta que estés preparado. Es momento de que me marche, volveremos a vernos.

Justo después de decir aquellas palabras tomé el camino hacia mis aposentos y le perdí de vista.

OFF: De momento dejamos este tema aquí, que quiero cerrar alguno. De todas formas, nos veremos en la coronación de Normelk