Honor, justicia, sangre

Fruncí el ceño ante la espesa nube que me acorraló. Parecía obviamente,alguna especie de conjuro rastreador. -Que molesto

Empecé a toser a los pocos segundos,pero traté de concentrarme unos instantes. No podía derrochar magia en todos mis ataques,o no aguantaría ni un solo día. Saqué a ciegas dos papeles que conocía bien por su tacto,e ellos se veía escrito en un antiguo idioma : "explosivo". Los lancé al aire y en el acto empezaron a deshacerse antes de estallar. En los escasos segundos que tenía antes de esto,en mis manos apareció una caja de madera que brillaba ante aquella sucia oscuridad,y al abrirse,una amplia gama de cartas alargadas empezaron a rodearme a asombrosa realidad. Pese a la oscuridad,las había usado lo suficiente como para sentir la energía individual de cada una. Toqué una de las cartas,que se paralizó al instante.

Spoiler:

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La repentina aparición de Luccie me sorprendió, pero no por ello bajé la guardia. Noté la fuerza de la explosión provocada por su hacha, era uno de esos extraños artefactos de tiempos perdidos. Su poder era innegable. La miré de reojo y sonreí.
-Un placer verte por aqui, querida. ¿La trajiste? -Pregunté refiriendome a mi última adquisición. Estaba en el castillo, guardada con recelo desde el dia que la encontré. Vlad, la espada sanguinaria. Si Luccie estaba aqui significaba que el ejercito habia partido, todo marchaba según lo planeado.
-¡La reina esta aquí, hermanos de la noche! ¡Por la reina! ¡Honor! -El grito resonó por encima de la batalla y cientos de voces corearon mis gritos. Su reina les inspiraba valor y confianza, y muy a menudo eso era lo único necesario en una batalla. Los animos subieron y los vampiros lucharon con renovadas energias. Yo me centré en el grupo que nos rodeaba a Luccie y a mi. Con un rápido movimiento corté mi muñeca con mi espada de plata. La sangre brotó y comenzó a acatar mis ordenes. Pequeñas cuchillas de sangre, no mucho más grandes que un cuchillo de cuberteria, comenzaron a flotar a mi alrededor. En mis labios se dibujó una diabólica sonrisa. Salté hacia delante con mis dos espadas preparadas y corté a todo el que encontré en mi camino, mi agilidad me ayudó a esquivar los golpes dirigidos hacia mi. Mientras tanto las cuchillas de sangre, como animadas por espiritus, revoloteaban cortando y clavandose en mis enemigos, revanandoles el pescuezo o clavandose en sus ojos.
"Humo, Neliel, ¡necesitamos oscuridad!" Pensé mientras acababa con uno de mis oponentes. "¡Ahora mismo! Pon a trabajar a tus brujos"

Después de la grandiosa explosión y ante su pregunta acaricié la parte de detrás de mi armadura sustrayendo la espada. La clavé en el suelo con fuerza, pues ahora andábamos mas que ocupados con los brujos que nos rodeaban.
Después hice lo mismo con mi hacha, quedó incrustada hasta casi la mitad del filo, con la fuerza de mis enemigos sería imposible que cogiesen las dos armas. Mis manos danzaron hasta la parte de detrás de mi armadura, exactamente al lado de donde había extraído la espada de Walter y rajé las dos palmas de mis manos. La sangre broto de la herida y empezó a flotar a mi alrededor creado agujas finas y casi imperceptibles a mi alrededor, justo después cogí mis tonfas adoptando una postura casi felina.

Eché a correr hacia mis enemigos con las tonfas en una primera posición de defensa, saltaba, esquivaba.. era casi como un baile. Mi agilidad era bastante superior a la suya lo que me permitía moverme con facilidad entre ellos descargando una lluvia de acero y sangre por donde pasaba. Mi boca mostró una mueca casi sádica, adornada por mis colmillos-Escuchad mi rugido!!-grité, siendo secundada por todos los míos.

OFF Pensé que este era mi turno... con eso de que en algún tema pasado veía que pasaban cosas como ésta, pues bueno...Bueno, lo guardaré en un bloc de notas. Disculpen las inconveniencias

Off: Angeline, respeta los turnos, el master posteará cuando pueda. Por lo que me han dicho no es la primera vez que te dan este tipo de avisos, los avisos reiterados pueden acarrear sanción.

OFF: Angeline, es el último aviso que se te va a dar (y esto incluye a cualquiera de tus cuentas). La próxima vez no será un aviso. RESPETA LOS TURNOS.
No se había establecido un orden de los turnos, ya que cada uno podía postear una vez tras el Master y con eso quería ser flexible. Pero, SÓLO 1 VEZ cada uno entre cada post del Master durante la batalla.
Espero que quede claro a partir de ahora, o estableceré un orden de turnos que se deberán cumplir a rajatabla.

ON:
El sol comenzaba a ascender tras los picos más altos y sus rayos empezaron a incurrir a interior del fortín.
Desafortunadamente para Angeline, las patadas que asestó a los muertos vivientes que le rodeaban, no fueron suficientes para derribarlos, ya que volvieron a ponerse en pie. Aunque, ella inteligentemente decidiera retirarse a tiempo, pues de haber permanecido más tiempo entre ellos, no lo hubiera contado…
Pero no todos se habían centrado en ella, tan solo unos pocos. Ya que el resto, seguían centrados en derribar el portón.
Neliel logró dispersar el humo que se había cernido sobre los aliados, invocando el poder de un espíritu que parecía residir en una de las cartas de la baraja que acababa de sacarse de la manga. Sin embargo, lo que no había previsto fue que la fuerza del vendaval dejó al descubierto gran parte del techo oscuro que protegía antes a los vampiros de la luz del sol, generando una importante brecha… Aun así, las hogueras continuaban encendidas.
(OFF2: Luccie, los brujos aun no han entrado al fortín. Lo que os rodea a Walter y a ti son muertos vivientes)
Luccie y Walter no se vieron intimidados por el corrillo y continuaron la batalla apoyándose el uno al otro. La reina vampiresa se movía ágil como un felino, los muertos vivientes no podían seguirle el ritmo y caían ante el filo de sus tonfas sin remedio. Mientras, Walter seguía la batalla a dos manos paralelamente a su reina, derribando muertos vivientes como si de marionetas se tratasen… A manos de ambos, sus agujas y cuchillas de sangre, también ayudaban a segar vidas de muchos de sus enemigos como si de algo sobrenatural e impredecible se tratase…
Pero seguían entrando más muertos vivientes cual masa por la torre de asedio que aun se mantenía en pie.
El portón cedió definitivamente, y el enemigo penetró a la primera fase del fortín sin remedio, comenzando la primera batalla seria.
Era una invasión…

El día fue avanzando, al compás de la incesante batalla encarnizada que tenía lugar ahora en la primera fase del fortín. Incesantemente, continuaba la invasión a través de éste y por el asedio a las murallas a través de la torre que aun permanecía en pie. Había bajas en ambos bandos. Quizá en los aliados, a pesar de no ser numerosas, fuesen más alarmantes, teniendo en cuenta que eran menores en número. Debían empujarles, si querían resistir dos días más.
Una parte del ejército, permanecía luchando en la batalla. La otra, continuaba su camino ignorando la batalla y dejando ese flanco atrás, por el paso del desfiladero hacia las Llanuras…

OFF3: A partir de ahora, avanzaremos más tiempo en cada post. El día pasa y la batalla continúa. Narrad vuestras hazañas de manera más generalizada y no tan puntualmente como hemos estado haciendo hasta ahora. Ya que ahora no será un transcurso puntual, sino un periodo más prolongado. Que sino a este paso no terminaremos nunca la batalla.