Morada en el Hielo

Él parecía tan ilusionado como yo por este asunto. Y parece que le gustó que fuera Andrew el elegido para ser nuestro padrino casi tanto como a mí. Y lo demás también. Sinceramente, esto parecía totalmente un sueño. Aunque parecía que con Dana tendría que verla primera. Ya iría con él a visitarla, o que viniese a vernos. Sería lo primero que haría cuando terminara de estar con Lucius hoy.

Entonces, me cedió, tras escribir unos cuantos nombres, la lista de nombres de invitados. Pero antes de poder abrirla y leerla, para escribir los nombres que me vinieran a la cabeza, me preguntó algo que me dejó descolocada. ¿Kaede?¿Él le conocía? Pensaba que no le gsutaban nada los ángeles caídos. Pero parece que ya no los odia...

Le acaricié la cabeza sonriendo con dulzura.

Me parece muy bien, Lucius. Yo también adoro a esa chica, es muy simpática y amable, y muy formal.

Desde luego, Lucius parecía haber madurado mucho más desde hacía un tiempo. Me gustaba el Lucius de antes, pero el de ahora me gusta mucho más.

Desplegué entoneces el papel lentamente y tomé la pluma de Lucius con suavidad, pensando en quiénes debería añadir. Y poco a poco fueron fluyendo nombres de mi mente, como si fueran agua de un río. Aunque tardé más tiempo, porque estbaa comprobando que los que yo apuntaba no estuvieran ya en la lista

Spoiler:

Que no fueran en común, eran muy pocos al parecer. Porque luego, la gran mayoría de los que él había apuntado, iba a añadirlos también. Y esperaba que no me olvidara de nadie. Algunos que no apunté fue por que hace mucho que no sabía de ellos. Aun así había a escrito el nombre de Sakura... A lo mejor volvía antes de lo esperado.

Le entregué de nuevo la lista con las modificaciones subrayadas para que se vieran, y sonriendo apaciblemente, recosté mi cabeza sobre su hombro, sonriendo.

Esto es ideal Lucius. ¿De verdad que no es un sueño?

Me acurruqué en su hombro mientras me atraía hacia sí, mientras notaba sus suaves labios besando mi cabeza.

Mmm....Vale, querido... Repuse ante su proposición, aún con la cabeza apoyada en su hombro. Entones me separé levemente de su hombro, abriendo mis ojitos verdes y mirándole con ojos brillantes, escudriñando su mirada que derrochaba ternura. Aunque al parecer, se rió con respecto de que yo fuera a ver a las mujeres y me quedé alzando una ceja con curiosidad.

Hmm.. no me parece mal. ¿Pero por qué ríes? Pregunté algo curiosa, aunque poco después volví a sonreir, como si hubiera olvidado la razón de por la que estaba curiosa.

Me quedé mirándole de nuevo perdiendo la sonrisa y mirando con el rostro curioso en cuanto me miró de esa forma pícara.

¿De hombre a hombre?Bueno... por mi no hay problema. Pero me gustaría saber qué es, jejeje

Repuse volviendo a sonreir despreocupada. ¿Qué podría pasar? Eran uno de mis mejores amigos y mi amado.

Entonces me levanté del sofá lentamente, mirándole con las manos entrelazadas descansando sobre mi pecho.


Bueno... En tal caso, no perdamos tiempo, cielo. Cuando quieras, marchemos a resolver estas tareas