Para tomar algo...

Cuando Odin creó las cupulas yo seguí a lo mio, fui a por una de las sillas que estaban por ahí tirada y la coloqué de pie. Cuando lo hice la silla se desmontó en varios pedazos. "Oh, genial."
Tras buscar otra silla me senté y observe como devoraba Arshei la comida. Era sencillamente un espectaculo. Tras mirar a Arshei observé el resto del lugar. "En algún momento alguien hará algún movimiento, esto no puede estar tan tranquilo."

*finalmente terminé de comer habiendo recuperado toda mi energia: había reducido en un 90% las reservas de toda la taberna sin contar con todo lo que había a la vista pero ya estaba recuperada. Un leve halo de oscuridad rodeó mi cuerpo y cuándo se retiró a los 30 segundos todo estaba perfecto: ni un arañazo ni nada. Miré a mi alrededor y con delicadeza me limpié una pequeña comisura con una servilleta que vi. después, me acerqué a Deimos sin alejarme de Angela y me senté en la barra*
-¿es mi impresión o todo está demasiado tranquilo?
*pregunté mirando el lugar y primero a Angela y después a Deimos*

Escuché lo que Arshei dijo:
-- si... demasiado tranquilo...

-Bueno, yo ya estoy tranquila, me vendrá bien un rato de tranquilidad.
*dije recostándome con placer en la barra y contra una columna que había en una pose extremadamente sensual y provocativa. Las alas estaban algo desplegadas para mermitirme mayor comodidad y como siempre no había nada que me impidiese coger mi (ahora) invisible espada de su lugar entre ambas. Sin embargo, ya no me apetecía pelear sino disfrutar un poco de la relajación y la paz y la tranquilidad*

-- Arshei, con lo que te conozco cintigo no se puede tener un rato de paz -- dije sentandome al otro lado de la columna...

*Me reí*
-Que me gusten las guerras, las peleas y la acción no quiere decir que de vez en cuándo no me venga mal un poco de tranquilidad: yo también tengo un límite... aunque aparezca muy rara vez.
*dije, al fin y al cabo en aquella cena que hicimos las razas no hubo ninguna pelea*

Suspire, con mis sentidos todabia en alerta, era raro que los chuchos desaparecieran de la nada. -Si la verdad, un rato de tranquilidad se agradece, y yo que habia venido aqui a descansar un rato y me encuentro con todo esto.-dije arreglandome un poco el vestido que llevaba, el cual se había rajado gracias a las peleitas de esa noche.

*miré su vestido*
-En tu lugar, Ana, ordenaría hacerme la ropa especial: que no se vea afectada por tus habilidades, que te de plena libertad de movimientos aunque parezca imposible de tenerlos y que sea resistente a tu habilidad especial... aunque en el caso de los vampiros, si es el mimetismo que se mimetice contigo, si es el caso de la lectura de mentes que sea mas receptivo de las mismas, si es rastreo que no sea un incordio y si es la Resistencia al Frío y al Calor pues hacerlo al mismo nivel de tu resistencia... no sé, convertir a la ropa en un buen aliado en batalla no me parece mala idea.
*comenté observando que mi ropa no había sufrido ningún daño en la pelea puesto que los lobos no me habían llegado a tocar en ningún momento*

-- Miré a Arshei -- Puede que ayude, pero en un verdadero combate son las habilidades de la persona lo que valen, pelee con una armadura, un jean, una camisa como yo o desnudo... un vestido, en caso de "La reina" -- Dije esto último mirando a Ana... --

*le miré con una sonrisa*

-eso está claro, pero a mi me ayuda mucho a no tener que renovar el modelo que lleve después de un combate igneo.

-- Pue sno se como lo vereis pero a mi casi nunca se me estropea el vestido -- dije mirandolos a todos uno a uno -- y llevo ropa más o menos normal...

*la miré*
-Bueno, pero tu no haces que el fuego esté por todas partes.
*comenté hacendo referencia a parte de mi combate en el que habia estado en parte rodeada de fuego que incluso me tocaba la ropa*

-- No, yo prefiero otros metodos jaja

Cada una tiene sus métodos y sus características en su raza.
*dije encogiéndome de hombros*