La gran boda!!! (solo los que recibieron invitación)

Alguien intentó un ataque mental contra mi persona. Eso me habria ofendido en otras circunstancias, pero no era el momento de armar revuelo. Me concentré y elevé un muro mental. Dejé mi mente completamente en blanco y no pensé en nada, además susurré unas palabras. Por suerte jugaba con ventaja pues la ceremonia no requeria de mi atención. Cuando sentí que la presión habia desaparecido me relajé y asistí, desde mi esquina, al final de la ceremonia. Más tarde hablaria con Elinor. Era la única presente capaz de hacer eso.

vi toda la ceremonia sin decir nada cuando termino me levante de mi asiento y grite energeticamente

VIVA LOS NOVIOS !!!!!!

Dado que de los presentes yo era posiblemente el mas impulsivo, no pude evitar ser el primero en contestar.

-¡¡¡VIVA!!!

Grite mientras sonrreia ampliamente, pues desde mi interior deseaba que Walter pudiera perdonarme algun dia.

Me levanté del banco con lentitud,y con una cálida sonrisa,comencé a aplaudir tras haber visto como "unían sus lazos".

Estaba bastante feliz por ambos,y ojalá eso nunca desapareciera.

asenti a las palabras de natasha y volvi a mirar al frente viendo como terminaba la ceremonia, sabia que las relaciones estaban tensas, pero andrew no me habia dicho que no asistiria a la boda, aquello que ir fatal si no podia ir a la boda de su propio hermano, volvi a mirar a la feliz pareja y sacudi la cabeza. no podia llegar a creerme aquello, andrew era un ser muy familiar, aquello debia haberle dolido muchisimo. sin poder evitarlo mire con reporoche a walter, seguian siendo hermanos pese a las razas.

en cuando todo aquello terminase me iria de alli, habia dejado de sentirme comoda y algo extraño se notaba en el ambiente

Cuando pude ver la unión de ambos, una alegría sincera, que en no muchas ocasiones me alcanzaba, me invadió por completo. Por impulso, me levanté del asiento, y comencé a aplaudir a los recién casados, mientras seguía sonriendo. A los pocos segundos, abrí la boca y grité, emocionada.

¡Vivan los novios!

Era de las pocas veces que sonreía a estas cosas. No podía sino esperar a que comenzasen a pasar por la gran alfombra roja e irnos al banquete, si es que lo había. Quería comentarle algo gracioso al principito.

El sonido de tantas voces para vitorear a los, ya oficiales, recién casados, me invitó a levantarme, y mientras daba palmadas celebrando el bonito acontecimiento de unión de dos personas, que, aunque fuera bebiendo sangre del otro y me sorprendiera el hecho de ver cómo se mordían mutuamente, es único y bello, una sonrisa más dulce de lo habitual me iluminaba el rostro. Una voz alegremente feliz salía de mi boca, mientras daba palmadas con cada vez más fuerza.
¡¡Vivan los novios!!¡Que vivan por siempre juntos!

Llevaba arroz para la ocasión, guardado para nada más fueran a cruzar la alfombra, lanzárselo. Aunque no sabía cuántas personas más de las allí presentes imitarian lo que iba a hacer.

Yo tambien me uni a la gente y me levante rapidamente del banco y grite con todas mis fuerzas.

-Viva los novios.


estaba muy feliz y me alegraba mucho por Luccie y por Walter, ambos se lo merecían.

me fui fuera a esperar que salieran, necesitaba aire fresco, empezaba a agobiarme con tanta gente...

Al fin la union de aquellas dos personas se habia llebado a cabo, vi algunas rosas negras y bueno se me ocurrio la feliz idea de darle algo mas de magia al momento, el aire se arremolino haciendo volar las rosas alrededor de la feliz pareja, espero que no les importe pense.

-¡¡¡Vivan los novios!!!

La gente estalló en vítores y los petalos negros cubrieron la escena. Por fin algo de sol entre las nubes de tormenta. Ofrecí mi brazo a Luccie para que lo cogiese y asi salir juntos de la capilla para comenzar la celebración.

Me levanté minutos después de que la gente empezara a hacerlo tras ver salir a los novios.En cuanto pudiera hablaría con Luccie.

Me acerqué con disimulo a Aurora,y le dije en voz baja mientras soltaba una risita que no pude evitar.

-No ve una todos los dias a su reina tan espectante,deberías ir a si mas a menudo-dije mientras empecé a reír mas.No le haría mucha gracia,pero no importaba.

Todo el mundo gritó con felicidad una vez terminamos nuestra union y las rosas negras empezaron a volar por toda la capilla, dando un espectaculo realmente hermoso. Me agarré a su brazo y comenzamos a andar hacia afuera de la capilla, ni demasiado lentos ni demasiado rapidos, hasta que porfín llegamos a fuera y fuí a saludar a todo el mundo con una gran sonrisa.

Esbocé una media sonrisa. De no haber tenido que guardar las formalidades, le habría dado un golpecillo a Kaede con la cadera (off: te has librado xD)
-No todos los días me invitan a una boda. De todos modos, voy a largarme en breve, y te sugiero que hagas lo mismo- le dije a Kaede en susurros.

(OFF: escribo esto ahora porque me voy de viaje y volvere el miercoles por la noche aunque pensaba ponerlo más tarde pero por si acaso se acelera la acción dentro de la boda. Haced como que llega cuando se entreguen los regalos, gracias.)

Tras bastante tiempo andando llegué a los límites del reino vampírico cuando se presentaron dos guardias delante mía. Durante el trayecto anduve pensando en todos los últimos sucesos y sobre todo en la carta de Walter prohibiéndome el acceso a la boda.
Los guardias se miraron un poco asustados, iba con unos pantalones negros y una sudadera de lmismo color con la capucha puesta; por eso, y por el aura que tendría que intimidarles por narices.
Les mostré un paquete y se lo enseñé. Se trataba de una especie de blog de dibujo en el que aparecían numerosas escenas que había dibujado durante mucho tiempo. Había adquerido esa habilidad durante los momentos en los que el lobo no se apoderaba de mi hacía tanto tiempo.
Podéis revisarlo todo lo que queráis para ver si es peligroso que ya os digo de antemano que no. Por favor, entregádselo a la reina Luccie como presente por su boda con el príncipe Walter.
Dije antes de irme pensando en las últimas palabras que había esbozado en la última página: Porque para mi sigues siendo mi prima.
Sabía que tarde o temprano llegaría a manos de Luccie, pero esperaba que fuese durante la boda que se podía estar reallizando en ese mismo momento.