¿Nuevo rey?, interesante... [Dunkel y Tornak]

Desde los fríos desiertos del norte, hasta los cálidos desiertos del sur de Vaahl, se extendía una noticia, que consiguió arrancarme de mi pequeño refugio de ermitaño, donde desde hacia varios meses, me había alojado, para centrarme en una profunda meditación y estudiar a fondo la maldición que sobre mi caía.

Las nuevas noticias que a mis oídos llegaban a la voz de mercaderes, decían que un nuevo rey, había tomado el poder del reino de los brujos, algo así, merecía mi regreso al reino, aunque solo fuera para conocer al recién nombrado, según decían las leguas de doble filo, ese hombre estuvo un tiempo en prisión a manos de los renegados, creo que se llamaba Dunkel, o algo así, me habían contado algunas cosas sobre el, pero nunca te puedes fiar de lo que va ablando la gente por ahí, por lo que prefería conocerle yo mismo. El reino de los brujos no se merecía a un mal rey, y yo me encargaría de que esto fuera así, de serlo necesario. Al fin y al cabo, ser rey, es una forma de ser mas poderoso, y proteger a tu pueblo.

Por otra parte, no sabia si el nuevo rey, tenia en cuenta la existencia de un superior en su reino, y debía hacérselo saber.

Hacia rato que me había adentrado en mi reino natal, todo estaba como lo recordaba de la ultima vez que estuve, poco a poco, pasando por las calles, me iba acercando mas al castillo de la brujería, aquel castillo me había fascinado desde que solo era un chiquillo, y que seguía emocionándome cada vez que clavaba mi vi vista en sus tétricos y majestuosos muros.

En su entrada los solados montaban guardia, me acerque a ellos lentamente, y me miraron extrañados, seguramente por mi extraño aspecto -Soy el Superior Tornak, e venido a visitar al Rey Dunkel- les dije distantemente, con una expresión seria. Los guardias me abrieron paso y me llevaron a una sala donde se suponía que tenia que esperar al rey.

Hampelmann vino a avisarme a mis aposentos de que un superior brujo que estaba de 'vacaciones' había regresado a palacio y reclamaba mi presencia.

Oh más visitas, llevo toda la semana recibiendo visitas, estoy harto .Me esfumé hasta aparecer en mi trono.

Aparecí envuelto en un aura purpúrea sentado en mi trono,delante , a varios metros me encontré en pie a un extraño ser que decía ser superior brujo,no se como ganó ese título sin estar en el reino,pero me andaría con ojo,pues sus extraños dibujos de su piel causaban en él una mala impresión.

Es usted quien ha vuelto de un largo viaje y me busca,buen hombre acerquese, cual es su deseo, ¿no está de acuerdo con las nuevas normas,o tal vez quiere entrar en el consejo real? Rápido tengo trabajo y muchos papeles que preparar, el trabajo de rey es agotador y hace tiempo que este reino no tiene uno y hay numerosas cosas que enmendar.

¿Y como es que usted se hace llamar 'el Superior Tornak' ,quien le puso ese distintivo tan arrogante?,no se si posees tal título, deberé revisar mis anotaciones.
Giré la cabeza y aprecié al escuchimizado secretario real de aspecto enfermizo y pequeñas gafas que cubrían sus enormes y vistosos ojos.

Puny...., ¡Puny,no te enteras, estás sordo, rápido traéme la ficha de este brujo!

Puny, el secretario real, algo tartamudo: Siii seeeeeñoor en....seguida.
Corrió hacia la sala de archivos de la 1º planta tropenzándose una y otra vez.

Este crío no tiene remedio,pero es un genio con el papeleo

Puny:

Hampelmann:

Mire directamente a la cara de Dunke que curiosamente estaba oculta tras un espejo, era bastante raro, esta vez mucho mas serio -No me gusta el tono en el que me hablas, y si... soy superior desde hace bastante tiempo, te guste, o no...- No me gustaba nada de la forma en la que me trataba ese extraño tipo, me miraba raro, y aunque yo ya sabia el porque, después de tanto tiempo aun me molestaba que los de mi propia raza me mirasen raro por mi aspecto.

Después, volví al tema principal de mi visita - Pues he venido a conocerle mas que nada, y no, no tengo intención de unirme a ningún consejo real, y ni siquiera me conozco aun esas nuevas leyes de las que me hablas- Al parecer ya incluso había cambiado las leyes, había sido bastante rápido, seguramente tuviera miedo de que el pueblo no le aceptase, y por eso actuaba tan rápido, al menos a mi parecer, ya que trataba a sus súbditos como mierdas, aunque yo no permitiría que a mi también me tratase de esa forma.

Mire a Dunkel seriamente, no me hacia nada de gracia de lo que el tanto se reía - Veo que te hace mucha gracia... pues no hablemos de lo que la gente va contando por ahí sobre usted... según cuentan, hace tiempo los renegados te tuvieron encerrado en la prisión hasta que se aburrieron de aguantarte, ¿es eso cierto? ¿O no debo fiarme de lo va contando la gente?- Le mire con curiosidad y a la vez un poco burlón, la vida me enseño que la mejor forma de pagar era con la misma moneda, o como otros decían, que prueben su propia medicina.

- Pues no... no conozco a ningún otro superior, aun menos habiendo pasado tanto tiempo fuera del reino, no suelo frecuentar estas tierras, por motivos personales, y... no quiero hablar ahora sobre mi, todo lo que quieras saber los tienes en esos papeles, si te interesa mi vida... simplemente leelos, aunque no creo que esa recopilación de datos sea tan extensa como para conocerme, ni a mi, ni mi historia- Le dije.

Observe como Dunkel se enfurecía tirando los papeles al suelo y levantandose con furia, sin duda ese rey no me caía nada bien, tras oír las palabras de su siervo, le lance una amenazadora mirada -¿Quien eres tu para dudar de mis modales?- le dije fuerte y enfadadamente, no permitiría a que el siervo de un mal rey me faltase. Volví mi mirada al rey, escuchando sus palabras nuevamente, la verdad e que yo no me mordería la lengua ante el, es por eso que le mire con un gesto de negatividad cuando dijo que no me dirigiese a el de ese modo, y frente a su amenaza de echarme, hice un gesto de indiferencia.

Luego me hablo de mis marcas -¿Yo? ¿un peligro para el reino?... tal vez si, pero ese no es el caso de las runas de mi piel, estas runas las marco alguien mas poderoso que cualquier brujo o criatura que puedas imaginar... Y dime, yo me he fijado en ese espejo que llevas en la cara ¿que ocurre? ¿te acomplejas de tu propio rostro? De ser así... no me gustaría tener un rey "acomplejado" de si mismo- Al igual que el hizo conmigo, yo cuestione su aspecto.

- Yo no he dicho nada de que usted quisiese unirse a los renegados, pero si quieres que te diga la verdad, viendo como es usted no me extrañaría-

Otra vez volvió a hablarme del consejo real y unas pruebas las cuales yo no tenia intención alguna de pasar, ya que preferiría tener que irme del reino, a obedecer de ea forma a ese rey, ni en sueños. - Y una vez mas te digo que no tengo intención alguna de unirme a ningún consejo real, y tampoco pienso pasar ninguna prueba, así pues.. usted decide lo que hacer-

Observe desafiante como se esfumaba y aparecía frente a mi, lo que mas me enfurecían eran las palabras que como una sucia víbora su asqueroso súbdito escupía letra a letra, pero espere a que el rey terminara su discurso para yo hablar y seguir aclarándoles cosas - Dices que te interesa la vida de tus fieles súbditos, pero debes tener claro que yo ya nunca seré tu fiel súbdito, no dejare que también a mi me lleves a tu bolsillo de sirvientes para después tratarme como una mierda, al igual que a el y seguramente a todos los demás- Dije señalando a su anciano sirviente - Lo único que ahora has conseguido es provocar odio de mi hacia tu persona, no quiero que mi rey sea alguien como tu, tal y como eres estoy seguro que no seras un buen rey, y solo traerás ruinas y desgracias al reino, lo llenaras de odio y la pobreza se apoderara del pueblo, y la gente con ganas de revolución quedara suprimida bajo el yugo de un rey tirano, todo eso sucederá si tu gobiernas estas tierras, es lo que suele pasar cuando alguien como tu se sube en un trono como este, no estas a la altura.

Comencé a caminar lentamente hacia la puerta, dejando a tras a Dunkel tragándose mis duras palabras, solamente había dicho lo que de verdad yo pensaba viendo esa actitud, y sin duda esa situación que yo acababa de describir anterior mente era la que se solía ver en muchísimos reinos

Justo cuando llegue a la puerta me pare y volví a girarme hacia el - Poco a poco te darás cuenta que lo que acabo de decirte es la pura verdad, pero... antes de que todo eso ocurra, yo luchare por evitarlo, tenlo por seguro... Volveré y te haré frente ¡Te derrocare Dunkel!- Mi mirada era mas fría de lo que se acostumbraba mi voz sonó mas brusca y severa, de entre todas las cosas que había hecho en mi vida, a parte de esconder los secretos del dios Nilven, esta situación era una de las mas arriesgadas que había vivido, y además yo la había provocado.

Nada mas terminar de hablar salí de aquella habitación, con pasos un poco mas ligeros, con cuidado salí de aquel castillo, antes de que dieran ninguna orden de atraparme, del reino de los brujos me fui, al llegar venia con la intención de conocer a un rey y al marcharme llevaba conmigo una clara misión que aunque arriesgase mi vida, la intentaría cumplir a toda costa -Nos volveremos a ver Dunkel... -

Comienza el juego.

OFF: Bravo! xDDD Digo... Reniego de Tornak a Superior Renegado realizado.