Jardin

Paseaba alegremente por el jardín cuando me tumbe a descansar

Aquella mañana me apetecia dar una vuelta afuera del castillo, hacia un dia soleado. Decidi vestirme de manera distinta. Me puse una falda de cuero roja con un insinuante corpiño blanco bastante ajustado.

Nada mas salir al jardín y dar unos pocos pasos vi algo que me cambió la cara complemente. Era Dasfinger.


- vaya vaya- dije en tono irónico- pero si es mi buen amigo Dasfinger. Te creía por ahí medio muerto tras nuestra lucha.

Le lanzé una de mis mejores sonrisas diabolicas.

Al ver que se acecaba Natasha a mi posición me aroodillé cogiendo las rosas que había en el jardín y se las ofrecí de rodillas:
-Esto es para ti. Le ruego que disculpe mi comportamiento de antes

- ohhhhhh pero que tierno- esto lo dije con la mayor irónia que pude utilizar- para ser un vampiro eres demasiado ñoñas no?. De todas formas aceptare tus flores aunque e de decirte que a mí no me van estas cosas; pero no quiero que te confundas sigues cayendome igual de mal... no se porque pero es asi.

pase por su lado para irme cuando Dasfinger me agarró del brazo y me detuvo.

Le dije soltantole el brazo:
-Espera, cuéntame cuales son las razones de tu odio hacia mi

Sonreí.

- sabes no lo sè muy bien... Pero la primera vez que te ví, cuando llegué al castillo y te vi, me recirdastes a alguien... Alguien a quen guardare rencor siempre y del que me vengare en su debido momento. No sé porque me recuerdas tanto a él. Pero un secreto entre tú y yo.

Me acerqué a él y susurrandole en el oido le dije.


- me molesta la manera en la que tiras los tejos, ¿crees que nobme e dado cuenta?, y no soporto que m trates como abuna princesita, no tienes ni idea de como soy.

- No voy a decirte todo sabes, si quieres saber como soy ylo queme gusta tendras que averiguarlo.

sonreía cuando le dije eso.

me acerqué lo mas sigiloso que me permitía mi rango... estaban tan embobados que ni se dieron cuenta de mi presencia... aproveche esa ventaja.

- ohhhhhh pero que monosos estaís los dos. Es tan cuco y tan bonito.... me estan entrando verdaderas ganas de... Vomitar -.-"- esto lo dije mirando directamente a Dasfinger- por dios es peor que una novela de Jane auesten xD.

ya que los dos habían reaccionado y ahora estaban centrando su atención en mí continue hablando.

- Nati no sabía que te hubieras hablandado tanto en este tiempo sin vernos... ahora aceptas flores y todo. Verlo para creerlo jajajajajja.

ella reacionó justo como pensaba y noté como Dasfinger empezaba a cabrearse.

Nat había reacccionado justo como esperaba. Al menos las cosas no habían cambiado tanto.

- La hostia, hay que ver que caracter tiene esta mujer... en fin.

vi como Dasfinger ignoraba mi comentario y se estaba alejando de mí... cuando corrí hacia donde estaba él y le bloqueé el paso.

- eh eh eh... adonde vas tan rápido. ¿no te han dicho nunca que es de mala educacion irse cuando alguien esta hablando?...

Dasfinger empezo a cabrearse y yo sonreí.

- E visto como mirabas a Natasaha... y quiero que sepas una cosa. No te lo voy a poner facil.

Cuando oí lo que me dijo le dí un rodillazo en sus partes y mientras estaba quejándose del dolor me situé detrás de el y le dí una patada en el gemelo derecho. Cuando se tiró al suelo gritando de dolor le puse mi espada en el cuello haciéndole un pequeño corte superficial en el cuello y le dije:
-No eres el único que se preocupa por Natasha y te juro que como la toques o le hagas algo te mato.
Estaba dispuesto a matarle en ese mismo momento, mis ojos estaban rojos y mis colmillos deseaban su sangre

Estaba dando la vuelta y un reconocido olor de sangre aparecio de repente, suspire *otra vez* y como si de un rayo se tratase apareci y desarme a Dasfinguer de una patada.-A sido suficiente Das, creo que Natasha es lo suficientemente autonoma como para defenderse sola. Y ya sabes que no me gustan las amenazas pero ni por tu parte ni por la de ningun otro, si quereis luchar me parece bien, para eso hay una sala de entrenamiento, pero no quiero muertes. -dije con un tono un tanto autoritario y miré a Kouga con una sonrisa calida ayudandole a levantarse. Miré a Natasha-Me puedes seguir por favor tengo algunos asuntos que me gustaria hablar contigo-sonreí.

Cuando Ana me desarmó y la ví desaparecer con Natasha, envainé mi espada y desaparecí del jardín ocultándome en la hierba para que nadie me viera. (no huía de la escena. Simplemente me iva para evitar dejarme llevar por mi irá y así poder relajarme)

decidí irme también del jardín, total tampoco tenia nada que hacer allí.
Pero esto no iva a quedar así Dasfinger sabría quien soy yo

Espere a que Dasfinger y kouga salieran por completo.

*panda de estúpidos*
me acerqué a Ana.
- que querías comentarme Ana.

espero que no me echara la bronca por el espectaculo que habían montado esos dos descerebrados.

Suspire en cuento se fueron los dos y sonreí a Nat.-Nunca cambiaran -rei un poco y luego me sente en uno de los bancos por ahi cerca.-Nat, Walter me a comentado algunas cosas sobre tu antiguo clan, ademas de que ya me habian avisado ellos con anterioridad que os buscaban, les mande al quinto pino asi que aqui no vendran a molestaros. Sin embargo me gustaria que me mantuvieras al tanto de todo lo que sepas sobre este asunto.-Miré las estrellas.-Mientras sepa que pasó, estareis a salvo aqui-La miré seria-sino podrian sorprendernos en cualquier momento.-

-Ya informe a Walter sobretodo lo que se de mi antuguo clan asique no puedo ayudaros mas en eso, lo unico que puedo hacer es mantener vigilado a Kouga y sonsacarle información, cosa que ya tenia pensada hacer. Además estoy por entrenanrle yo, asi no le quitare ojo de encima.

de todas formas debería consultarlo antes con Walter.

suspire- muy bien, que tengas buena noche Nat..-dije dandome la vuelta pensativa y andando tranquilamente hacia el castillo.

Buenas noches Ana.

Yo también me encaminé al castillo.

*Entre en el hermoso jardin, mi olfato se encandilo con cada uno de los aromas a flores, me encanto aquel lugar. Tome mi pequeño libro encuadernado en piel y comence a escribir, la poesia fluia de mi pluma, pero una vez lei lo que escribi lo destroce, los sentimientos eran demasiado dolorosos.*

-Aveces pienso que no estoy muerto del todo... y aveces lo estoy completamente *Susurre al viento y a mi mismo*

Paseando tranquilamente por el jardín me encontré de pronto con Lestat:
-Hola, quisiera disculparme por mi reacción de antes, estaba cabreado y no era por ti. Perdoname

*Mire a Dasfinguer por encima de mi cuaderno, ahora era yo el que sentia una gran ira, claro que nada tenia que ver con él*

-Acepto tus disculpas *Respondi cerrando los ojos, no queria que viera nada debil en mi, parecia un vampiro temperamental, cuando los abri, ya me habia serenado, guarde el cuaderno y saque una rosa negra que comence a desojar muy lentamente*

-De acuerdo. Sí necesitas algo pídemelo. Le dije extendiendo mis alas para volver al tejado del castillo a seguir tocando mi instrumento.

-Asi lo hare... *Dije, preguntandome que pensaria el Vampiro acerca de mi realmente.*

*El jardin era bonito, no cabia duda, pero yo aun esperaba ver la flor mas hermosa de todas por alli. Quizas fuera un ingenuo pese a mi edad*