Puro entrenamiento (Dean y Roze)

Llevaba algún tiempo queriendo mejorar mis habilidades. No era mi fuerte la lucha y en serio solo había luchado con varios licántropos, sin embargo me consideraba un buen estratega. Quería poder considerar mis habilidades y ver si estaba preparado para enfrentarme a otras razas.

Mis pasos distraidos me habian llevado hasta lo que para mi, fue lo más impresionante que había visto. Ese continente eran todo nuevas sensaciones y maravillas de la naturaleza. Todo era como un gran bosque pero en lugar de arboles, en el había cientos de cristales. Unos más altos, otros más bajos, pero realmente era como un bosque luminoso que reflejaba los rayos del sol provocando en más de una de las lentes efectos coloridos.

Sonreí, era pura belleza, aun que había algún claro que otro entre medias. El suelo era arenoso con algo de hierva, incluso, por algunas zonas.

En mi cabeza me repetia todo el rato lo mismo: ''tienes que hacerte mas fuerte'' , si queria derrotar algun dia a los grandes tendria que entrenar y mucho, medirme con cualquier criatura por rara que fuera y pillarle el truco a cada raza.

Estaba andando por el bosque mientras estaba atenta a mi alrededor para luchar contra cualquier cosa, tras una larga caminata me sente a descansar y en ese momento sentí un aura, era bastante rara no me habia cruzado con nadie asi antes, asi que de la emocion y con mi espíritu incansable sali corriendo hacia donde el se encontraba, era un hombre apuesto y parecia bastante fuerte, justo lo que yo buscaba jeje.

Salté delante suya y le salude cordialmente
-Buenas tardes joven ¿Que te trae por estos territorios? Mi nombre es Roze, mas vale que no se te olvide.- dije con voz cautivadora mirandole directamente a la cara tratando enamorarle y ligeramente agachada de manera que escondia mi espada preparada por si acaso.

off: jaja que curiosa manera de presentarte xD :on

Noté otra aura cerca, me sonaba a la de un uroba. No me dio tiempo apenas a poder examinarla de lejos cuando de pronto vi saltar frente mia a una mujer. Me alejé un poco, sobresaltado. "Vaya... cuanta energía tiene esta mujer"

Me miró de manera curiosa, a mi forma de ver las cosas, casi como si intentara seducirme. Alcé una ceja. Tenía que admitir que era hermosa, no obstante, solo podía tener ojos para Katerina.
Tenía que admitir que me hizo bastante gracia aquel "mas vale que no se te olvide." No me molestaba, ni mucho menos. Tanto tiempo lidiando con mi padre me había dejado curtido, no sentía esa obsesión de orgullo que él, y muchas personas que me había encontrado a lo largo de mi vida.
No parecía ser una mala mujer, sonreí ante su entusiasmo.

-No, tal y como has aparecido no creo que lo olvide. Permíteme presentarme: me llamo Dean Wingates, un placer-dije inclinándome levemente. Miré a mi alrededor, entonces volví a plantar mi mirada fija en sus ojos carmesí-La belleza, sin duda. Aun que he de admitir que estaba buscando a alguien que estuviera dispuesto a mejorar sus habilidades conmigo en la batalla

Note al joven un poco extraño conmigo lo que era normal, me acerque lentamente hacia el y le explique mi situación.
-Tengo que entrenar mis habilidades con alguien y no veo que seas un mal objetivo, ¿Que te parece si entrenamos un rato tu y yo?-
Intenté seducirle para que no se negara a esta petición, pero supongo que no iba a decirme que no igualmente, le pedí un entrenamiento para darle tiempo a reaccionar, hubiera sido muy facil asestarle el primer golpe mientras esta indefenso, ais no es divertido ya que a la mayoria de mis victimas no les daba tiempo a defenderse de mi primer ataque debido a mi gran velocidad.
-Ah otra cosa, no se te ocurra contenerte ni un momento solo porque sea una mujer- dije mientras me abalanzaba contra el.

Sonreí. Era gracioso, no había siquiera empezado a buscar a alguien con quien pelear cuando de pronto se me aparecía alguien.
Aquella mujer tenía bastante poder de convicción, a mi pesar. Sin embargo, estaba desde el principio dispuesto a combatir con ella.

En un abrir y cerrar de ojos veía que se había abalanzado sobre mí.
Gracias a mi gran agilidad logré esquivar aquel ataque. Rodé agilidosamente por el suelo hasta situarme a unos metros de ella, de nuevo en pie, desenfundando mi espada.

-Vaya, tu no te andas con tonterías-dije, poniéndome en guardia-Que seas mujer es lo de menos

La verdad es que no era de los que pensaban que las mujeres eran más débiles que los hombres. Había mujeres muy fuertes y sabía que ella era de un rango superior al mio en lo que a potencialidad se trataba, no hacía más que ver su rápida actuación de antes.
Tenía que andarme con mucho ojo, aun que esto fuera una pelea de entrenamiento no dejaba de ser peligrosa. Analicé en aquel instante sus puntos débiles, pero prefería que viniera ella a atacarme.

Esquivó mi primer ataque por lo que supuse que no iba a ser como los demas, al menos este iba a dar guerra.
Me giré y le miré de reojo y cuando terminó de hablar me moví tan rapido que parecia que habia desaparecido, me situé por debajo de el y dirigi una patada hacia su barbilla apoyandome unicamente sobre mis manos, cuando el se dio cuenta apenas faltaban unos centimetros para que le impactara.

Me costaba seguirla el ritmo, era muy rápida, mucho más que yo. Tenía que valerme al 101% de todos mis sentidos. Al fin y al cabo era un licántropo, los tenía muchos más desarroyado que otras razas.
Vi como su pierna iba directa a mi barbilla. Me aparté a tiempo, mi agilidad me es estaba salvando bastante, sin embargo si que rozó parte de mi piel, provocándome un rasguño.
Agarré su pierna con la mano que me quedaba libre y con las piernas me arrojé a golpear sus manos, desequilibrándola y del impulso arrojándola hacia atrás.
Rodé por el suelo y volví a mantener la guardia, mirando hacia ella.

Mi rival tenia muy buenos sentidos, otro cualquiera no hubiera esquivado esa patada, además fue a por mi me desequilibró y me di contra el suelo, por suerte me di en el hombro izquierdo y no fue grave ya que cai encima de hierba que amortiguo el impacto.
Me puse en pie nuevamente y guardé mi espada, vi que mi adversario no llevaba armas y por educación y como reto no iba a sacarla, al menos por el momento...
-Ju...es rapido, pues veremos si me alcanza
Desaparecí nuevamente para aparecer delante suya y darle un puñetazo en la tripa pero antes de impactar me colé por debajo de sus piernas y le di un empujon mientras le hacia la zancadilla de manera que se tropezara perdiera el equilibrio e impactara contra una roca a donde yo le dirigia.

Aquello fue inesperado. Fui a bloquear su ataque pero entonces sentí como algo se colaba entre mis piernas, lo siguiente que vi fue como me alejaba y me estrellaba contra una roca.

Me levanté algo costoso, estaba bien pero es que era muy rápida.
No quería sacarlo tan rápido pero no me quedaba otra opción. Me sacudí el polvo y la miré, poniéndome en guardia. Me di cuenta que ella había depuesto las armas asi que hice lo mismo con la mía.
Mi postura no era como una defensa de boxeo, sino algo más abierta, con las piernas también separadas. Era algo más oriental.

Esperé a que fura de nuevo hacia mi, entonces comenzaría con el "baile de las sombras" que mi padre me había enseñado, y el cual solo se podía descubrir en qué consistía si alguien te enseñaba.

Acerté de lleno con mi golpe pero el era muy duro y eso apenas le hizo nada, se levanto, guardó su arma y empezo a defenderse esperandome a que fuera yo.
-Veo que me estas probando Dean, no lo haces del todo mal pero sere yo quien gane, je- intente picarle para que viniera el, pero fue inutil el seguia en sus quince con su postura defensiva, asi que no me quedaba mas remedio que ir yo. En esta ocasion iba bastante lenta, caminando hacia el mas bien., me quede en frente suya cerre los ojos y como de costumbre desaparecí para aparecer por encima suya mientras caia con una patada que no iba a ningun sitio, simplemente mi intencion era asustarle y que se intentara defender de esa patada para luego asestarle el golpe real.

Sonreí, tenia un buen animo y mucha confianza en si misma. Ya se vería como acabaría todo eso.
Empezó a caminar hacia mi, entonces, desapareció. La sentí encima mia, alcé la mirada y sonreí. COmenzaría ahora, mi baile de las sombras, el cual me había costado tanto perfeccionar.
Entonces, desaparecí en un pequeño destello de luz. Volví a aparecer, esta vez encima suya y la lancé una patada a las costillas.

Mi plan iba segun lo planeado..pero el desapareció sin dejar rastro y no sabia por que, cuando aterrizé en el suelo y me estaba incorporando apareció encima mia y me asestó una patada en las costillas, reaccione en el ultimo momento , pero casi no me dio tiempo a apartarme, si no llego a apartarme esos milimetros seguramente hubiera recibido un golpe que me hubiera dejado casi sin fuerzas.
Su patada era tan potente que sali rodando unos metros para atras del tremendo impacto, además hizo tanto ruido al impactar que salieron volando algunos pájaros de la zona al oirlos.
Estaba pensando como podria haber aumentado su velocidad en tan poco tiempo, esto ha sido un fallo me he acostumbrado a su velocidad y no le he visto venir...
-!Maldición! Esto requiere que me ponga totalmente seria desde ya!- Me levante rapidamente, desenvaine mi espada de nuevo y llena de ira por el dolor me lancé sobre el nuevamente.
Esto se va a acabar ahora mismo, aun me quedan muchas fuerzas

Mi patada logró colisionar sobre ella, pero no como yo lo deseaba.
Me mantuve en el sitio, dando algunos pequeños saltitos en el sitio, manteniendo una postura defensiva típica de las artes marciales que conocía.
Desenvainó su espada y vino rapidísima hacia mí. No me daría tiempo a coger mi espada, estaba yacente en el suelo a varios metros tras de mi.
Justo antes de que lanzara su estocada desaparecí y volví a aparecer detrás suya, lanzándole otra patada en el aire, esta vez dando una vuelta sobre mi mismo.

Mi rival se habia vuelto rapidísimo, seguro que un cambio asi de velocidad y tecnica tendria repercusiones después, pero no iba a parar esta batalla.
En cuanto di mi estocada volvio a desaparecer y eso me lo esperaba asi que acto seguido di una vuelta sobre mi misma, pues a máxima potencia mi espada de llamas y se creo un escudo de llamas a mi alrededor de manera que yo me encontraba en el interior, el estaba detras, lo sentia, si no paraba esa patada lo mas seguro es que se quemase el mismo cosa que no le vendria nada bien.

off: puedes crearte un escudo temporal por la velocidad, pero sería temporal. A menos que tuvieras magia chamanica no podrias crearlo en sí y contenerlo:on

Fui demasiado rapido, demasiado confiado, fue mi gran error. Cuando me dí cuenta no pude parar a tiempo y mi pierna traspasó el fuego residual que había dejado la espada, logré pegarla (aun que no llegándola a atinar bien) la mejilla antes de comenzar a sentir el dolor de la quemadura.

Caí al suelo y comencé a rodar, tratando de apagarlo. Cuando lo conseguí, la mitad de mi pantalón se había quemado, al igual que parte de mi piel. Me dolía bastante pero no parecía ser tan grave como hubiese sido si lo hubiera dejado más tiempo.

La miré aun con cara dolorida y traté de levantarme. Ahora cojeaba un poco y me aparté aun más como pude. Traté de mantener la postura defensiva, milagrosamente consiguiéndolo en gran medida.

-Vaya... eso ha sido interesante...-dije, aun con cara de dolor pero se podía distinguir una pequeña sonrisa en mi rostro. Una finisima capa de sudor podía distinguirse en mi frente al igual que en mi pecho. Me quité el chaleco tirandolo aun lado, quedando solo con los pantalones quemados. Aquel quemazón en la pierna había subido un poco más mi temperatura, pero aun podía luchar.

Había tenido demasiada suerte en todo este tiempo, al fin y al cabo ella era una princesa y yo, solo como título, mi rango era realmente de maestro en lo que se refería a fuerza.

Alcé los puños y tratando de soportar el dolor, con bastante más exito del que creía, me puse en guardia, en mi tépica posición defensiva.

-Venga, ven a mis brazos-tenté

Off:pretendia que el escudofuera temporal, ademas ni era solido ni nada, XD.
Onnn:

Me rozó la mejilla y como su patada venia cargada de mi propio fuego me quemó, menos mal que el se apartó antes de darme otro golpe llameante, en el momento que se aparto lo supe: era mi momento.

El chico ahora a unos metros de mi parecia cansado y por poco se desnuda por tal de quitarse el fuego y hacerse mas rápido.

Me incitó a ir a sus brazos por lo que bajé la espada y empecé a caminar haciendole creer que la lucha habia terminado, que ya era suficiente, pero no era asi, cuando estaba a unos centímetros de su posición me agaché y e intente pegarle haciendo un gancho.

off: entonces todos felices xDDD :on

Entonces empezó a caminar hacia mi, tranquila. "¿Quizas se apiadó de mi quemadura? No quiero que se apiaden de mi. No tendré el orgullo de mi padre, pero si que tengo algo de orgullo propio"

La olí, no olía a tranquilidad, aun estaba muy agitada por dentro. Alcé una ceja y no dejé de mantener la guardia.

Como me temía me atacó, me lanzó un gancho, el cual esquivé echándome hacia atrás. Le atrapé el brazo y con la pierna sana la golpeé en el estómago, empujándola varios metros hacia atrás.

Al haberme apoyado en la pierna quemada solté un alarido y perdí un poco el equilibrio, pero rápido lo recuperé.

Aquello era demasiado, la regeneración propia de nuestra raza era muy lenta, aun más en mi nivel, pero se aceleraría si me transformaba. No me lo pensé más y pronto comencé mi transformación.

Fue dolorosa, como siempre, pero cada vez me acostumbraba más.
Mi conflexión comenzó a crecer, al igual que empezaron a desarrollarse en mi garras, hocico, orejas. El pelo comenzó a crecer por todo mi cuerpo.
Me miré un instante, aquel dichoso pelaje negro no había desaparecido, eso me hizo recordar por un momento todos los problemas que ello me acarreaba, pero no tenía que pensar en eso ahora.
Mi pelaje era negro como el carbón, sin embargo se podía distinguir en mi pecho un tono blanquecino, al igual que una línea desde el centro del cráneo hasta el hocico.

La miré con ferocidad, digna de mi especie. Ahora no medía mi metro ochenta, como siempre, sino que al transformarme crecía hasta adquirir la altura de casi tres metros. Mis musculos eran voluptuosos en forma lupina.
Estaba apoyado sobre mis patas traseras y emití un pequeño gruñido, mirándola desafiante.

Como esperaba mi rival no iba a caer en mi truco asi que antes de que impactara mi gancho me cogió y me lanzó lejos, lo bueno es que las quemaduras pasaban huella y estaba cada vez mas agotado, estando quemado cualquier accion podria hacerle daño.
De repente empezó a cambiar y me dio la impresion de que sufria.
-Vaya, ¿Ya te transformas?- dije decepcionada
Yo no creo que me transformara, no me gusta transformarme en dragon, prefiero esta forma.
La verdad es que mi rival daba miedo, asi que empecé a cargar mi aura de manera que le intimidara nada mas sentirla, me puse a tope con mi aura de arconte para que esto no resultara un problema, ya era una cuestión personal.

Dudo que pueda seguir haciendo las tecnicas de artes marciales de antes, ahora tiene garras y al ser mas robusto tendra menos movilidad pense.

Me agache tocando el suelo con la mano y desaparecí, no paso ni medio segundo cuando ya estaba en su espalda cogiendole del pelo y apuntandole con mi espada al cuello,, el minimo movimiento podria ser letal para el ya que yo ahora estaba en todas mis facultades.

La sentí de pronto en mi espalda, aquello me molestó. No sabía aun bien porqué pero con la forma lupina mis poderes aumentaban más o menos un 50% (digo más o menos por que yo era más humano que el resto de los licántropos)
Con gran rapidez me sacudí, agarrándola con mi gran zarpa arrojándola con fuerza contra uno de los cristales, rompiendolo con su cuerpo.

Di un salto hacia trás, situandome en el punto más algido de uno de los cristales apartados, mirándola. Estaba acuclillado, sujetándome con las patas traseras y las otras dejándolas colgar apoyando los "coros" en las rodillas

-Conviértete, será divertido luchar contra un dragón en su plena forma.-Mi voz sonó profunda y muy muy grave, casi gutural. No solía hablar transformado, mi propia voz me daba verguenza.

En cuanto sintió que estaba en su espalda me cogió y me lanzó por los aires, fuí a parar a un cristal del bosque y se hizo añicos con el impacto de mi cuerpo. Se me clavaron algunos en distintas partes asi que ahora no me quedaba elección, tenia que transformarme.

Como de costumbre Dean estaba quieto esperando un ataque por lo que parecia que me estaba dando todo el tiempo del mundo para transformarme.

Poco a poco me fuí quitando la ropa, de abajo a arriba, me quede en bragas y sujetador delante suya, sinceramente en una situación asi no me importaba, cogi mi espada de fuego e hice un circulo en la tierra, el rastro empezó a dejar fuego que ocultaba mi silueta durante unos segundos, ahi decidi quitarmelo todo y empezar mi transformación.

Mi tamaño aumento hasta los 5 metros, asi que ahora era bastante mas grande que el, ahora mis musculos eran mucho mas fuertes, mis alas salieron de repente y con la luz que venia del sol iluminó todo el bosque como si hubiera habido una explosión.
Me puse a 4 patas nada mas terminar la transformación, era dificil de creer pero ahora mi velicidad era casi límite en el aire.
Sali disparada hacia el le cogí de la cintura y le estampé contra 4 arboles en linea atravesandolos todos hasta que le solté y empezó a frenarse con el suelo.

-¿Has tenido suficiente? dije con una voz muy grave, pero aun se distinguia que era de mujer.


Off: si quieres ver como es mi forma dragón consulta mi post de transformación.

Vi como se empezaba a quitar la ropa, a lo que aparté la vista. Si hubiera estado en mi forma de humano se hubiera visto la rojez en mis mejillas. Ese fue mi fallo, pues cuando me quise dar cuenta ya se había transformado y venía hacia mi.

No me dio tiempo de reaccionar cuando me vi lanzado hacia una serie de arboles, ya perdí la cuenta, y entonces me soltó. En el vuelo y derrape con el suelo, me di la vuelta y comencé a clavar las uñas en él, frenandome y dejando el rastro de mis garras. Eso había dolido, pero podía soportarlo, ahora era más resistente.

La miré fijamente "ahora esto sería más divertido".

Sin dudar me fui corriendo hacia ella. Hice el amago de acatarla por la derecha pero en el último momento giré agarrándome a su cuello y con un giro muy acrobático me subí a su chepa donde me agarré fuertemente incándole las garras entre las escamas para sujetarme, justo en el punto donde no podía engancharme con las fauces y con los brazos ni pensar que llegara.

Esta vez Dean no se golpeo con el suelo, ahora habia parado la caida con el, y como estaba en su otra forma era mucho mas resistente, hizo un amago de atacar con lo que contraataque a mi derecha, tonta de mi, porque quedé expuesta por el otro lado, se subió a mi chepa y empezo a agarrarse fuerte, yo intenté quitarmelo de encima pero no llegaba de ninguna de las maneras, no me quedo otra que levantar el vuelo.


Estabamos ya a unos 100 metros del suelo, si se soltaba se iba a hacer mucho daño, yo de momento seguia subiendo.

Intentó quitarme de encima, mi táctica había resultado pero entonces alzó el vuelo. Estábamos a mucha distancia del suelo. 90.. o quizás hasta 100 metros. Ella seguiría subiendo, y eso no me gustaba. Rápidamente me agarré a la base de una de sus alas y por la caída me deslicé logrando agarrarme a la base de su otra ala, incándole las garras

Seguia subiendo y ganando altitud cuando se solto de donde estaba cogido y se engancho en la parte trasera de mi ala, me hizo daño, pero se podia resistir, en ese punto ya llegaba a cogerle, y tan solo una de mis garras era suficiente, tenia mucha ,mas fuerza que el, asi que le cogí en mi brazo derecho, le estruje un poco, eso provocó un sonido de rotura pero no sabia de donde provenia.
Estuve mirandole fijamente sin que el pudiera hacer nada y le tiré para abajo con toda mi fuerza.

En cuanto llegara al suelo esto se habria acabado.

Me atrapó y arrojó hacia el vacío. A esa altura quedaría en mal estado.

Caí estrepitosamente, no sin antes dejarle un severo rasguño en una de sus alas, incándole las uñas desgarrándosela parcialmente. Podría volar mal después de eso.

Caí sobre el suelo y se hizo un cráter a mi alrededor, al igual que se levantó una gran humareda. Quedé un rato allí tendido, sin poderme mover.
Comencé a transformarme en humano de nuevo, creía que era bastante entrenamiento por hoy. Si seguíamos así terminaríamos matándonos.

Ella estaría algo mejor que yo, pero no mucho mejor, mis garras eran muy afiladas y la había rajado bastante con ellas. Ella no se quedaba atrás, sentía todo el cuerpo muy dolorido y sobre todo uno de los brazos.

Claramente, tras la transformación estaba desnudo. Sin embargo algo de tierra se había levantado con el impacto y me había caído sobre algunas partes del cuerpo, tapando justamente la parte de la entrepierna.