La noble cueva del origen: Bhava Agra

Llegué corriendo junto con Ana y Andrew a donde se encontraba Walter. Le vi bastante malherido.

-Walter, Walter... Así que se te ha escapado...

yyo no sabia k hacer asique me fui dando un paseo asta donde se cruzan los caminos a esperar k ocurria.me sete a esperar

Poco a poco comenzé a despertarme, la cabeza me dolia a horrores y estaba un poco mareado, notaba como me estaba moviendo y sabia que alguien me llevava, me fijé mejor y ví que era Andew, una leve sonrrisa se dibujo en mi rostro y susurrando muy bajo al oido de Andrew dije:

-Gra...gracias...

Pensé que duraria un poco mas pero aun me estaba resintiendo del golpe de Andrew y me volví a desmallar.

OFF: Fatalis, dentro de poco Wataru despertará asi que abandona la cueva y deja ya los paseos xDD

cuando vi que wataru empezaba desperte me fui dela cueva antes de que se despertara,lo ultimo que queria esque uno de los dos muriera

Seguí a Luccie, pero cuando llegamos, el cazador y la vampiresa habían huído. "Se os han escapado unas ratas" pensé. Cerré los ojos con mi aura suprimida y busqué el aura de esos dos. Aunque la suprimieran podría encontrar la del león del cazador.
-Por allí- comenté a media voz, señalando la dirección en la que estaban-. Bueno, ya veo que no necesitáis ayuda y de todos modos éste es un asunto interno de los vampiros. Suerte, Luccie- dije a modo de despedida. Mi imagen se volvió transparente y se onduló hasta desaparecer, regresaba al Limbo.

seguia de rodillas en el suelo me levante intentando retener mi lloro-no he podido ayudar a nadie-lo dije triste y comence a caminar en direccion a la salida

-Deberíamos volver a por el submarino...

Asentí:

-¡Atención, voy a sacar el submarino de aqui! ¡Todos los que no tengamos fuerzas para salir de aqui deberíamos montarnos en él!

-Sintiéndolo mucho, yo no me fio de ese submarino. Además, creo que aún debemos buscar a esa vampiresa traidora. Water y Ana, os acompañaré y os ayudaré a darla caza.
- dije con una media sonrisa en la cara. Aquella extraña pareja había llamado bastante mi atención.

Nada más decir eso me dirijí por el único lugar por el que podrían haber escapado.

Supuse que nadie se fiaría ya de mí, pero eso no era nada por lo que me tuviera que preocupar ahora. Ya me ocuparía de eso más tarde.

-Está bien... Pero todo el mundo que quiera salir en el submarino que se venga conmigo...

Y me dirigí tambaleándome hacia el principio de la cueva.

Empece a seguir a Aral y a pesar de lo que habia hecho que no sabia porque era decidi cargarle a mis espaldas y llevarle a cuestas.

-Quien no quiera presenciar cosas desagradables que se marche ahora-Miré a Walter con una sonrisa medio sadica-Vamos acabemos con esto, de una vez por todas, mi pequeño principe-dije acariciandole la cara y echando a correr lo mas rapido que podia.

No estaba demasiado magullado, simplemente frustrado por los trucos de la traidora. Cerré los ojos y trate de calmarme. Activé mi rastreo y busqué a la traidora. Estaba lejos, pero seguia aqui, aunque parecia muy debil
- Detrás de ti, mi reina.

llegue tambaleandome a la salida mientras murmuraba-no puedo ayudar a nadie, no puedo ayudar a nadie-al llegar a la salida me desplome en el suelo y empece a llorar-soy muy devil-decia mientras lloraba

Yo simplemente fui a donde se encontraba esra... le veia muy mal.
Dejé a wataru en el suelo y me acerqué a el, posando mi mano en su hombro.

-Esra... no digas eso... las cosas no son asi

las cosas si son asi -grite con fuerza-soy debil no puedo ayudar a nadie -segui llorando

Me quedé un tanto sorprendido de que Darksik se ofreciera a llevarme aun después de todo lo que había hecho... Me dejé llevar por él, pero le pedí que me llevara ante EsRa antes de marcharnos del lugar. Me agaché con él y le dije suavemente:

-EsRa...el solo hecho de haber sido mi amigo ha ayudado más de lo que podrías haber hecho...Gracias, y ven conmigo al submarino, tenemos que salir de aqui.

Me apoyé en Darksik de nuevo y continué mi camino...

Sentí como Andrew me dejava en el suelo, y me fuy despertando poco a poco, notaba como mis fuerzas volvian en mi, ya no volveria a desmallarme, pero escuche a ese cazador y no pude evitar decirle algo mientras me levantaba.

-Esra ¿es ese tu nombre? no digas que no has servido para nada, otros solo emos estorbado.

Dije sonrriendo mientras me resentia de mi dolor de cabeza, luego me dirijí a Andrew.

-Siento las molestias que os alla podido ocasionar.

Por último me dirijí a Aral y le mire directamente a los ojos.

-Cuando volvamos quiero que tu y yo hablemos en un sitio mas tranquilo y solos, no te preocupes he estado confiando en ti todo este tiempo y seguire haciendolo, sin ti el submarino no se podra poner en marcha, asi que vamos alla.

Me dirijí por mi propio pie, a la entrada donde se allaba el submarino.

Sentí desvanecerse el aura de Aurora, se abría marchado ya al limbo, así que caminé hasta la salida despacio,pues aun estaba algo cansada. No solté ni una palabra,solamente quería marcharme ya, así que hice una pequeña inclinación de cabeza y me marché volando de allí.

Debía muchas explicaciones, así que decidí que las daría todas una vez salieramos a salvo de la cueva. Eché un último vistazo a esta y arranqué el submarino para marcharnos de ahí, de ese lugar infernal teído de muerte, y sólo esperé que alguien haya castigado a Remilia de una vez.

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Varios dias despues....

Una sonrisa cruzó su cara, habia sido más facil de lo que pensaba, nadie se habia molestado en vigilar la roca.
Sus ojos estaban fijos en ella, con el brillo carmesí que esta irradia revelando su cara. Sus facciones eran juveniles, no pasaria de los treinta años. Sus ojos, de colores dispares. Un ojo negro como la noche y el otro de un color azul palido. Generaban un curioso contraste.
Vestia una larga túnica negra con capucha, que no llevaba puesta. Su larga coleta de pelo llegaba hasta la base de su espalda.

Extendió una mano.

Su sonrisa se hizo más amplia.

La piedra se deshizo en cientos de diminutos pedazos. La luz carmesí flotó un instante en el aire antes de disolverse por completo.

La primera de cinco...

La realidad se plegó a su lado y un portal apareció. Lo atravesó y este se cerró tras él. Como si nunca hubiese estado alli.
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U.N.Os dias más tarde

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(Observando el lugar donde estaba la piedra)

-¿Pero...acaso era tan malo?
Solamente quería jugar.
Mi hermana lo tenía aceptado.
¿Está fuera de lugar?
Alguien mi juguete se ha llevado
y quien sea lo va a pagar
cógeme, osito, de la mano
y marchémonos de este lugar.

(Se marcha grácilmente con un arrebato infantil en su cara)

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*...Justo como imaginaba... La piedra ya no está* pensé delante del hueco que había dejado la piedra de equilibrio al desaparecer.

No quedaba más remedio que volver a hacerlo. Al igual que en la cueva de las llanuras heladas, me senté y me concentré para condensar los pocos fragmentos que quedaban en el aire y los metí en otra botellita.

*Ya son dos piedras las que han sido destruidas, ¿o ya habrá destruido alguna más? Mmm... No, no creo que se haya destruido ninguna más, sino el equilibrio del mundo habría empezado ya a desestabilizarse.*

Una vez tenía lo que deseaba me marché de allí y volví al infierno.

No mucho tiempo después...

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-...

-No es una gran sorpresa pero aun así...

Golpeé el pilar con las manos.

-Le toca actuar a "El Loco"...

-Si... pero hay algo que no encaja aún... Esa manipuladora sigue actuando desde la tumba...sólo hay que encontrar cuál es la clave que nos ha dejado, y quién está actuando a su favor...

-La Jaula de la Cenicienta...

-Wataru...

-Remilia...

-Aspicious...

-William Schcliff...

-Lu-Tze...

-Walter...

-Salem...

-Kaede...

-Luccie...

-Darksik...

-Los cabos empiezan a encajar...solo tenemos que encontrar los hilos de las piedras...

Con la mirada en las alturas, me transporté del lugar, una idea en mis manos...