Un ultimo suspiro

OFF:La pelea es solo Lu-tze y yo, nadie mas puede meterse en medio hasta que termine todo xD

ON:Ya habia dejado de correr, me habia vuelto a transformar y andaba sin rumbo fijo con la cabeza agachada, no habia vuelto a hablar desde entonces, ni a comer, simplemente me dedicaba a mis pensamientos, a ver si por un instante ella reaparecia. Me senté derrotada, yo solo queria que se volviera mas fuerte porque si nos hubieramos fusionado asi ella habria perdido todo el control de si misma y habria terminado matando a todo el mundo que se cruzara por delante, pero la bondad habia sido su perdicion. Me acorde de ella y de todos sus pensamientos y sentimientos y me eche a llorar de nuevo, nunca habia llorado, mas en ese momento era lo unico que hacia durante dias. Suspiré y eche la vista al cielo, ahora solo queria acabar desapareciendo, como ella-Vuelve...-susurre, era la unica palabra que yo decía.. y despues de eso me quede callada todabia llorando, pensando.

Aparecí entre las sombras, con el aura suprimida, observando la patetica situacion de la licantropa con sigilo. Realmente esa situacion me causaba gracia. Comencé a reirme en bajo, mi risa retumbo por toda la esplanada encubriendo mi localizacion. Entonces se empezaron a escuchar algunos aplausos. Emergí de las sombras, andando lento mientras con una sonrisa en los labios aplaudia.

-Precioso, completamente precioso-me paré y alcé la mano situandola en mi pecho-Realmente me has conmovido, lobita-comenté con sarcasmo, sin perder la sonrisa de los labios

Me sequé las lagrimas con la mano y le miré con odio mas no dije nada, como hacia varios dias, me levante todabia mirandole como si quisiera pulverizarlo con la mirada.

-Creo que solo nos emos visto en una ocasion, a lo sumo dos... eras... haruka no? mmm tengo bastantes comunicadores y me intereso verte todos estos dias corriendo de un lado para otro... al parecer os dejo el novio o algo asi por... adulterio quizas?-reí un poco-supongo que ganado lo tenias

Su voz resono por mi cabeza, me quedé sorprendida y solo podia oír su voz medio susurrando su nombre, el cabreo empezo a crecer y cerre los puños con fuerza, me transforme, mi tamaño era mucho mas grande que antes, rugí con fuerza-¡¡No tienes derecho a pronunciar su nombre!!-dije histerica, poco a poco iba perdiendo consciencia de mi, Haruka siempre era la parte humana que me controlaba, ahora solo era pura fuerza. Me lancé hacia el cabreada y le lance varios zarpazos seguidos.

Aun sin perder la sonrisa, incluso, aun mas ensanchada comence a esquibar sin mucha dificultad sus zarpas. Alcé el dedo y de el se enpezó a formar una pequeña bola de fuego, que, convirtiendose en una gigantesca bola, la impulso varios metros hacia atras, chamuscando parte de su pelo.

Estallé en carcajadas.

-Pesimo...

Me levante, no me importaba el dolor aun que me hubiera chamuscado algo del pelo, nunca nadie volveria a pronunciar su nombre sin sentido, reduje mi aura al completo pero sabia que el podria encontrarme aun que con algo de dificultad comencé a correr y a moverme agilmente para los lados ya que tenia una gran agilidad, consegui colocarme a su espalda y me tiré hacia el para hacerle un placaje con toda mi fuerza.

Me tiró al suelo, mas fue por que me distraje entre reirme y tal. Entonces una llama enorme me cubrio tragandome, dejando a haruka en el suelo desconcertada. Aparecí unos metros mas allá, aun sin perder la sonrisa de la boca y sacodiendome un poco el polvo. Moví la mano hacia ella haciendo algunos gestos, entonces unas cadenas de fuego aparecieron amarrando fuertemente a Yunna. Me acerqué a ella y me agaché, saqué mi espada y se la enseñé; la mostré su imagen en el reflejo de la espada.

-Parece que haruka no esta ahi dentro... que penita... acabaste con ella.

Seguí riendo, realmente me estaba divirtiendo con todo eso

Me quede sorprendida a la vez que aterrorizada,*puede... verlo* eso significaba que ella ya no estaba, baje la cabeza, oia su risa, su desprecio. Me empecé a cabrear de nuevo demasiado deprisa, clave las garras en el suelo, nadie nuna volveria a reirse de ella, nadie nunca volveria a hacerla daño nunca... comencé a crecer del cabreo que llevaba, mis patas se ensancharon al igual que mis espaldas. Levante la cabeza y gruñí con furia, consegui soltar una pata delantera y le metí un zarpazo en el estomago, ya que estaba demasiado cerca. Aun que todabia seguia amarrada con las otras patas, no me daría por vencida.

Vi como empezaba a crecer de tamaño, tenia que admitir que eso me habia sorprendido.

-Valla, eso si que es interesante...

Entonces soltó un zarpazo hacia mi estomago, fui rapido y me deshice en una llama de fuego por lo que no me dio; sin embargo, logró dar a tiempo y rozó mis ropas, desgarrandolas un poco. Aparecí en otro lugar, no muy lejos suya. Miré las telas algo rotas y levanté la vista frunciendo el ceño.

-Parece que tendre que ponerme serio

Desenbainé mi espada y esperé a que viniera a mi.

Vi como sacaba su espada, por fin se ponía serio, me desize de la atadura en mis otras patas y alzandome imponento rugí tan fuerte que me devian de haber oído a varios kilometros a la redonda, respiré profundamente y comencé a correr hacia el, icé el intento de irme hacia la derecha con mi agilidad pero segui recto lanzandole varios zarpazos rapidamente.

Se puso en pie, realmente era un ser grande, pero eso no me intimidaba en absoluto. Esquivé los zarpazos sin demasiada dificultad, me deslicé por uno de sus laterales, cortandole a mi paso por el lado de las costillas. Fue un corte profundo y amplio que enseguida empezó a sangrar a borbotones.

Observe todos sus movimientos y como evadía facilmente mis ataques y como finalmente me rajaba el costado, lance un rugido lastimero y la pata trasera me teblo unos instantes-Esto no terminara asi-medio gruñí, aun me quedaba una pequeña parte humana pero no se entendia muy bien lo que decía. Empecé a correr en circulos al rededor de el, y cada vez mas rapido y cambiando agilmente de direccion, definitivamente paré justo a su espalda y fuí a arremeter contra el.

Permanecí con los ojos cerrados y una sutil sonrisa, esperando a que atacara. Justo cuando se iba a abalanzar sobre mi a mis espaldas, desaparecí en otra enorme llama de fuego y esta vez me situé encima de su espalda.

Comencé a reir a carcajadas, era mas bien una risa histerica que retumbó por los alrededores.

Entonces empuñé la espada con las dos manos y la clavé en el centro de la espalda de aquella lupina. No la clavé del todo, pues queria ver su sufrimiento. Seguí riendo de aquella manera y retorcí la espada urgando en la herida, que sangraba a borbotones.

Desde que saltamos por la ventana en su busca, Ian y yo llevabamos dias persiguiendo la pista de Haruka, pero se movia demasiado rapido para nosotros.

Un rugido se escuchó no muy lejos de la zona en donde nos encontrabamos, a unos pocos quilometros. Hubiese reconocido ese rugido en cualquier momento, era Haruka. Apreté aun mas el paso, sin percatarme de dejar bastante a tras a Ian. Me guiaba por instinto, ese rugido no era bueno, temia por la seguridad de Haruka.

Llegué a la zona y lo primero que vi fue a aquel desviado encima de lo que parecia ser haruka transformada... pero de una forma mas grotesca. Entonces, presencié como aquel desviado clavaba su espada en la espalda de ella. Quedé horrorizado y enseguida salí gritando hacia ellos.

-Haruka!!

Giré la cabeza al ver a ese asqueroso perro gritando y viniendo a salvar a su amiguita; ese tipo de acciones me repugnaban. Desencajé la espada de su espalda y salté acia atras dando una voltereta y aterrizando almenos unos 10 metros. Miré al licantropo que corría hacia mi, pasé un dedo por la espada, arrastrando la sangre de aquella criatura y lamí el dedo.

-Mmm, no me extraña que les gusteis tan poco a los vampiros, vuestra sangre es repugnante.

Entonces clavé rapidamente la espada en el suelo y junté las manos cerrando los ojos. Entonces alcé las manos y andrew salió impulsado hacia atras varios metros, como si una maza le hubiera golpeado. Un campo de fuego se creó formando una cupula entorno a haruka y ami en la que nadie podia salir o entrar si yo no queria, el que se atreviera, acabaría bastante chamuscadito.

Sonreí.

-Lo siento, perrito

Tomé de nuevo la espada y me puse en guardia, esperando a la licantropa.

Cuando me clavo la espada en el lomo me caí al suelo, casi no podia levantarme, note como saltaba de mi lomo y oia a Andrew gritar, su nombre volvio a ser prenunciado, me levante del suelo y lancé un rugido lastimero girandome hacia Andrew, mis ojos no eran de aquel color azul que tanto caracterizaba a Haruka. Me giré a mi oponente e intente despotricar contra el, pero me fué imposible asi que me limite a rugirle y fuí a por el de nuevo esta vez abalanzandome contra el con toda mi fuerza.

Aparecí detrás de Andrew sujetandole por varias razones, no queria que cometiese una estupidez y saltase a las llamas ni tampoco que cayese hacia atrás por el golpe recibido.
Las llamas habian rodeado a los contendientes, parecia que el final estaba proximo y no iba a ser un final feliz.
Intenté ver algo a través de las llamas pero me fue imposible, eran demasiado brillantes.

Habia seguido a Walter que se encaminó a toda prisa hacia aquel lugar, baje estaba asombrada, intenté mirar desde varios angulos pero lo unico que conseguia es que el olor a sangre me inundara las fosas nasales-No logro ver nada..-susurre preocupada

Iba paseando por el bosque cuando noté varias auras poderosas. Distinguí la de Walter, Ana y la de aquel apestoso licántropo llamado Andrew. También había otras dos, al parecer estaban peleando. Me acerqué y saludé a los tres.

-Buenos días, ¿qué os trae por aquí?

Derrepente unas llamas se crearon frente mí, echandome varios metros hacia atras con el doloroso impulso de una maza. Aterricé en Walter, que ya me estaba sujetando para que no me lanzara. Entre todas aquellas llamas pude distinguir los ojos de haruka clavados en mi, no era haruka la que controlaba la situacion ahora... es mas... el rastro de haruka habia desaparecido casi del todo, no la olia dentro de ella, menos aun la sentia; quien controlaba la situacion ahora era Yunna, y eso no era bueno.

Me retorcí, en vano, para poder adentrarme en la pelea.

Entonces noté otra presencia, aquel asqueroso y ruin diablo, le fulminé con la mirada.

-Largo de aquí, no quiero que haruka sea el espectaculo de ninguna sabandija como tu.-amenacé, era evidente mi cabreo. Hice oidos sordos a todo lo demás y puse toda mi concentración en lo que estaba pasando en el interior de esa cupula de fuego.

Vi como se abalanzaba hacia mí, sonreí. Pasé mi mano a esacasos centimetros de la espada, esta obtuvo un color rojizo y brillante, ahora el acero de la espada ardia como si de lava se tratase. Corrí hacia ella. Logré deslizarme debajo suya, debido a su gran tamaño en comparacion con el mio. Segun abanzaba mi espada se deslizaba por su pecho, incandose profundamente. Al pasarla completamente me levanté y permanecí en guardia, sin perder la sonrisa.

Caí al suelo rendida, la sangre salia demasiado deprisa de mi cuerpo y mis patas ya no podian sostener el peso. Me costaba respirar y caía sangre por mi boca llenandomela de un sabor asqueroso, intenté articular palabras pero me fue inutil, era una cualidad solo de Haruka, aun asi lo intente pero solo salieron varios rugidos con alguna vocal mal entonada. No me rendiria seguia repitiendo en mi cabeza y volví a levantarme aun que con mucho esfuerzo y me quedé quieta esperando algun movimiento por su parte, en guardia.

-Ohhh, valla... pobre cachorrito que ya no puede seguir... yo esperaba mucho mas pero veo que no servis de mucho. Podria cortarte la cabeza, pero seria demasiado rapido, asi que... haré una cosa mas, no creo que aguantes mucho mas despues de eso.

Cerré los ojos, tenia que concentarme, no era una tecnica sencilla. La sangre del suelo comenzó a juntarse y, utilzando el calor aun constante en ella logré crear unas 10 o 11 daguitas. Las levanté y estas se clavaron por todo el cuerpo de haruka, quemandola por dentro sin contar por el dolor de penetrar su piel.

Mi cuerpo iba a la mayor velocidad corriendo de la que había ido nunca hasta ahora. El mal presentimiento que llevaba conmigo desde hacia días hoy se había intensificado,y sabia que este giraba en torno a Haruka.


Vi como estaban ahí muchas criaturas, intentando ver lo que parecía una violenta lucha entre alguien, pero de quien se trataba?...Alce el vuelo con energía y me apresure a ver que se trataba de Haruka y otra persona,a la cual no conocía,pero sentí todo su poder, se trataba de nada mas y nada menos que de un rey..

Tenia que ayudar a Haruka, sentía que algo mal iba a ocurrir de un momento a otro, y sabia que los presentes no querían meterse en medio por algún motivo,pero no podía quedarme quieta viendo como sufría Haruka, aunque no fuera de mucha ayuda..

Descendí en picado hacia la agonizante lucha que bajo el cielo grisáceo se cernía.


-Harukaaa!!!!-grite con fuerza.