Me sonrojo un poco al momento que me abrazo, de verdad no me lo esperaba de alguien que apenas conocí en esta noche. Con una leve sonrisa vi por última vez su rostro desvaneciéndose en la densa neblina. Sabía que esta no sería la última vez que nos encontraríamos.
-Tu igual cuídate... Y te visitare algún día.- Me refería a ella pero se lo decía a la nada.
Antes de partir hacia mi destino, organice la carne encima de una roca y apague la fogata. Empecé a caminar siguiendo las indicaciones de Lucia. Sé que me iba a tomar días o quizás meses, pero iba a ser muy interesante el viaje.