Noche estrellada

-Aspicious...no desaparezcas, ni siquiera cuando hagas tu sueño realidad..vale?-al principio sonreí ampliamente, después le guiñé un ojo con seguridad, y le sonreí esta vez con calided, volviendo a mirar al frente algo enrojecida por ser tan ñoña.

Cuando dijo eso la abracé y la susurré al oído.

-Fui yo el que te dije una vez que no te alejaras de mí. Por supuesto quiere decir que yo tampoco lo haré...

Después de decir esas palabras una sonrisa maliciosa y divertida se me dibujó en la cara. Teniéndo a Kaede fuertemente agarrada descendí en picado a una velocidad vertiginosa atravesando las nubes. Cuando estaba cerca del suelo modifiqué la densidad del aire para que me ayudara con la frenada. En el último momento, cuando parecía que nos íbamos a estrellar aterricé suavemente cuál grácil ave.

Sabía que era lo que Aspicious quería hacer, así que me aferré a el con fuerza, y sentí como caíamos con violenta velocidad,para terminar frenando suavemente. Sentía algo de adrenalina en mi cuerpo todavía cuando abrí los ojos.

Mis labios estaban casi azules, y mi cuerpo helado,y por lo que podía ver Aspicious no se alejaba mucho de mi situación, me acerqué a el y empecé a frotarle los brazos para que entrara en calor,y con una sonrisa tranquila comenté:

Talvez deberíamos encender una hoguera,o algo por el estilo,para entrar en calor-dije casi riendo.

-Tienes razón - dije tiritando -. Recuerdame que no vuelva a hacer esto en mucho tiempo jajaja.

Me acerqué a un claro del bosque, cogí unas cuantas ramas secas y unas piedras. En pocos minutos ya teníamos la hoguera lista. Yo ya tenía experiencia en crear hogueras de mis muchos viajes en el pasado.

Me acerqué a la hoguera secándome de las gotas de agua que tenía por culpa de las nubes.

Me senté a su lado, y extendí mis manos acercandolas al fuego para calentarme, mientras veía como desprendía alguna que otra chispa. Me había quedado embobada,como era costumbre.

Estuve un largo rato callado, recuperando el calor de mi cuerpo en la hoguera. Cuando ya estaba seco, aunque aún bastante frío pregunté.

-¿Alguna vez has visitado el infierno Kaede?

-Nunca-dije mirándole ahora a el.

Sin apartar las manos de la hoguera la dije.

-Es un lugar bastante tétrico y siniestro, pero yo lo considero mi hogar. Algún día me gustaría enseñártelo.

Deberas..?, entonces necesito pedirte un favor.-dije pensativa mientras miraba el fuego.

-Y..ami me gustaria enseñarte el Limbo en ese caso-dije sonriendole.

La miré y la sonreí cordialmente.

-Pues claro que iré al limbo. Hace muchísimo tiempo que no voy por allí.

Me pregunto si habrá cambiado mucho desde entonces-dije curiosa.

-En cualquier caso acepto encantado tu invitación.

Me levanté, ya estaba prácticamente en calor, y desplegué mis alas.

-Bueno, es momento de que me vaya. Me alegro de que estés más animada. Ya nos veremos en otra ocasión. ¡Ah! Y que no se te olvide apagar el fuego.

Me despedí con una última sonrisa y eché a volar hacia el oscuro cielo estrellado.

Le respondí a la sonrisa y observé como se marchaba en silencio. Yo decidí permanecer mas tiempo frente a la hoguera,pensativa.